Las tasas de inflaci¨®n condicionan directamente los ¨ªndices de paro en los pa¨ªses industrializados
Espa?a ocup¨® en 1978 el cuarto lugar en tasa de inflaci¨®n entre los pa¨ªses de la OCDE (Organizaci¨®n de Cooperaci¨®n y Desarrollo Econ¨®mico) y mantuvo una tasa de desempleo superior a la media de la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE), s¨®lo superada a nivel nacional por las de Irlanda y Dinamarca, seg¨²n datos estad¨ªsticos difundidos por ambas organizaciones, de los que se deduce una directa dependencia entre inflaci¨®n y paro en las econom¨ªas occidentales.
La tasa de inflaci¨®n media de los pa¨ªses englobados en la OCDE fue durante 1978 -diciembre sobre diciembre- del 8,4%, lo que aproximadamente la sit¨²a en la mitad de la registrada por Espa?a durante el mismo per¨ªodo, que alcanz¨® el 16,5%. Por encima de Espa?a quedaron situados otros tres pa¨ªses de la Organizaci¨®n, Turqu¨ªa (63,4%), Islandia (46,9%) y Portugal (25,5%). La media de los nueve pa¨ªses de la Europa comunitaria fue del 7%, con el liderazgo de Italia (11,6%) y, el nivel m¨¢s bajo de la Rep¨²blica Federal de Alemania (2,4%). El pa¨ªs con menor tasa de inflaci¨®n en el pasado a?o fue, en el conjunto de la OCIDE, Suiza, con tina tasa de s6lo un 0,7%.Seg¨²n las previsiones elaboradas por el Secretariado de la OCDE, la tasa de inflaci¨®n del conjunto de pa¨ªses ha presentado una cierta tendencia desaceleradora, especialmente a partir de la punta registrada en verano. Los t¨¦cnicos del Secretariado estiman que la desaceleraci¨®n de los precios se debe sobre todo al menor ritmo de incremento de los precios alimentarios en Am¨¦rica del Norte y a una cierta contenci¨®n en la evoluci¨®n de los productos de base. Asimismo, se estima ha influido poderosamente en el comportamiento inflacionario la apreciaci¨®n de las monedas de Jap¨®n, la Rep¨²blica Federal de Alemania y Suiza en el segundo semestre del a?o.
Los t¨¦cnicos de la OCDE, no obstante, no ocultan su preocupaci¨®n por la posibilidad de que los respectivos Gobiernos de los pa¨ªses miembros descuiden su atenci¨®n hacia los problemas inflacionarios y desistan controlar rigurosamente el crecimiento de los precios al consumo y los restantes factores inflacionarios.
A m¨¢s de seis millones de trabajadores se elevaba, en diciembre de 1978, el n¨²mero de parados existentes en el conjunto de los nueve pa¨ªses de la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE), seg¨²n datos recogidos en el cuadro adjunto. La evoluci¨®n del desempleo se mantiene m¨¢s o menos estable en algunos pa¨ªses, pero a nivel de toda la Comunidad el aumento experimentado es del 3,9% sobre las cifras registradas a finales de 1977. La tasa de desempleo en los nueve ha pasado del 5,3% en 1977 al 5,6% en que aparece situada a finales del a?o reci¨¦n concluido.
En t¨¦rminos absolutos, el mayor n¨²mero de parados corresponde a Italia, que tambi¨¦n presenta a nivel de CEE la mayor tasa de inflaci¨®n durante el pasado a?o. El pa¨ªs con menor n¨²mero de trabajadores es Luxemburgo, que tambi¨¦n presenta la cifra porcentual menor (0,8%) de toda la Comunidad. En t¨¦rminos relativos (parados sobre poblaci¨®n activa), la tasa m¨¢s elevada corresponde a B¨¦lgica e Irlanda (ambas con el 8,8%), superando incluso el 7,7% que presenta Espa?a, seg¨²n los datos facilitados para este pa¨ªs por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (para el Ministerio de Trabajo, la tasa es de s¨®lo el 6,9%). La tasa menor de la CEE, con la salvedad ya indicada de Luxemburgo, es la de la Rep¨²blica Federal de Alemania (3,9%). Es este pa¨ªs tambi¨¦n el que, entre los de la CEE, presenta una menor tasa de inflaci¨®n.
A nivel OCDE, los datos sobre la evoluci¨®n del mercado de trabajo no han sido todav¨ªa facilitados por la Organizaci¨®n. Sin embargo, los avances incluidos en el informe de previsiones para 1979, presentado el pasado mes de diciembre en Par¨ªs, indicaban la tendencia a relacionar directamente inflaci¨®n y paro en sentido directo, al menos en los pa¨ªses de la zona m¨¢s industrializada. de Occidente. En el citado informe de expectativas para 1979, se inclu¨ªan perspectivas notablemente pesimistas respecto a la evoluci¨®n de las cifras de paro en el conjunto de pa¨ªses industrializados, con un planteamiento netamente esc¨¦ptico sobre las posibilidades de reducir las tasas de desempleo, habida cuenta de las dificultades de creaci¨®n de puestos de trabajo -retracci¨®n de la inversi¨®n- y el acceso creciente de nuevos demandantes al mercado de trabajo cada a?o. La reestructuraci¨®n de aquellos sectores industriales de cabecera, especialmente intensivos en empleo de mano de obra, era tambi¨¦n objeto de preocupaci¨®n en el contenido del informe elaborado por el Secretariado de la OCIDE ?Perspectivas econ¨®micas para 1979?.
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