El voto de los emigrantes, una carrera de obst¨¢culos
Los emigrantes espa?oles vuelven a sentirse discriminados una vez m¨¢s ante las pr¨®ximas elecciones municipales del 3 de abril. Como ha ocurrido en los anteriores comicios, ser¨¢n muy pocos quienes, despu¨¦s de saltar la carrera de obst¨¢culos que supone el voto por correo, lograr¨¢n introducir su papeleta en la urna dentro del plazo legal.
El primer problema con que se encuentran los emigrantes est¨¢ en la elaboraci¨®n de los censos. Del mill¨®n aproximado de espa?oles que trabajan fuera de Espa?a, s¨®lo 152.000 est¨¢n inscritos en las listas de electores. Y para que ¨¦stos pocos puedan ejercer su derecho al voto -salvaguardado por la Constituci¨®n- tienen que esperar a que les sean remitidas las instrucciones y la documentaci¨®n necesaria en un plazo de tiempo suficiente para que su decisi¨®n no quede almacenada frente a la Cibeles, en los s¨®tanos del edificio de Correos, como ocurri¨® en los cientos de sobres que llegaron fuera de plazo en el pasado refer¨¦ndum constitucional.Para los representantes diplom¨¢ticos tampoco es f¨¢cil llegar a las urnas. En las recientes elecciones legislativas, Juan Jos¨¦ Sants Aguado, c¨®nsul espa?ol en Belgrado, no figuraba en el censo de Madrid. Al comprobar su ausencia coment¨® que no entend¨ªa nada, que ¨¦l mismo hab¨ªa remitido los formularios a trav¨¦s de la valija diplom¨¢tica. Igualmente, no encontr¨® el nombre de ninguna de las personas que integran la comunidad espa?ola en Yugoslavia. Tampoco el c¨®nsul de Montreal recibi¨® documentaci¨®n, ni el 15 de junio ni el 1 de marzo.
Las protestas de los emigrantes espa?oles en Europa, Australia y Canad¨¢ han llovido sobre los despachos de Presidencia del Gobierno y la Junta Electoral Central. La comunidad holandesa se quej¨® por las anomal¨ªas en el env¨ªo de las papeletas: en unos casos faltaban las socialistas y comunistas, en otros ven¨ªan por partida doble las de Uni¨®n Nacional, Fallange Espa?ola y de las JONS y Coalici¨®n Democr¨¢tica. De paso, aprovecharon para pedir al Instituto Espa?ol de Emigraci¨®n que hiciese el favor de renovar la cartelera cinematogr¨¢fica de la Asociaci¨®n Cultural de Amsterdam. Dec¨ªan que ya estaban hartos de Mar¨ªa de la O, Currito de la Cruz, Puente de Coplas y Chinos y minifaldas, y que si ten¨ªan a bien pasarles alg¨²n Saura o alg¨²n Bu?uel.
En Francia, uno de los responsables del PCE hizo constar ayer en una conferencia de prensa que, a diecisiete d¨ªas de las municipales, a¨²n no se hab¨ªa recibido documentaci¨®n electoral, y en Suiza, como la ley helv¨¦tica prohibe el voto por correo, tienen que recurrir al voto por poderes en parentesco de cuarto grado de consanguinidad, de manera que los espa?oles casados con mujeres suizas ven en este punto una nueva dificultad. De Australia y Am¨¦rica Latina no se ha recibido un solo voto para las legislativas, mientras que la comunidad belga protagoniz¨® un encierro en la embajada de Bruselas para protestar por el retraso con que recibieron la documentaci¨®n electoral del 1 de marzo. Una delegaci¨®n de los manifestantes entreg¨® un escrito al secretario general de la embajada en el que se ven¨ªa a decir: "Si los emigrantes somos buenos para enviar nuestras divisas, tambi¨¦n debemos serlo para enviar nuestras divisas, tambi¨¦n debemos serlo para enviar nuestros votos"
Ante esta situaci¨®n m¨¢s tenaces decidieron venir personalmente a Espa?a a depositar su papeleta. A Jos¨¦ Morales le sali¨® el voto por 50.000 pesetas, viaje de ida y vuelta desde Suiza y estancia en Madrid. una anciana de 82 a?os se empe?¨® en venir desde el suroeste de Francia y la cosa qued¨® en 20.000 pesetas. Mariano Cubillo, desde la localidad gala de Saintes, escribi¨® en el sobre de las papeletas: ?Voto por un puesto de trabajo para volver a Espa?a con mi familia.? Una militante del PCE de la comunidad del Benelux se desplaz¨® hasta Barcelona para votar, con tan mala fortuna que fue atropellada por un autob¨²s, en una c¨¦ntrica calle de la Ciudad Condal y muri¨® poco despu¨¦s. ?Si las cosas se hubiesen hecho como Dios manda, esto no hubiera pasado?, dijeron los comunistas en la rueda de prensa.
Para el PCE, la desorganizaci¨®n del Gobierno en el voto de los emigrantes tiene un trasfondo pol¨ªtico. En Alicante, el 70,3 % de los votos escrutados el d¨ªa 2 de marzo en la mesa de ?residentes ausentes? eran para el partido de Santiago Carrillo. Y uniendo los votos comunistas y socialistas de los emigrantes, en Madrid ofrec¨ªan una proporci¨®n del 57 %. ?Lo que pasa es que el voto del emigrante es fruto de una reflexi¨®n de clase, proviene de los obreros y l¨®gicamente va a parar a los partidos obreros -comentaba el responsable de la comisi¨®n de emigraci¨®n del PCE, Jos¨¦ Garc¨ªa Meseguer- Para nosotros, son maniobras de sabotaje por parte del Gobierno, porque UCD sabe muy bien que el voto emigrante es de izquierdas. Y claro, a ellos no les interesa.?
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