"Supongo que Carrillo ha estado mal informado sobre CCOO de Catalu?a

Las cr¨ªticas de Carrillo al PSUC originaron especial rechazo entre el movimiento obrero comunista de Catalu?a, donde el predominio de la tendencia leninista es total. El hecho de. que, seg¨²n informaron fuentes del PCE a EL PAIS, Carrillo llamara a Madrid al bandera blanca Jordi Borja para tratar de la pol¨¦mica ha servido para agriar el tema, ya que la tendencia minoritaria de Borja siempre ha sido criticada desde los sectores obreros del PSUC, partido en cuyas ¨²ltimas conferencias triunf¨® claramente el leninismo, mientras que la tendencia socialdem¨®crata o bandera blanca simplemente subsist¨ªa al amparo del favor de Carrillo.

El destacado leninista Jos¨¦ Luis L¨®pez Bulla, miembro del comit¨¦ ejecutivo del PSUC, miembro del Comit¨¦ Central del PCE y secretario general de las Comisiones Obreras catalanas (medio mill¨®n de afiliados) accedi¨® a responder a las preguntas de este diario.EL PAIS: Santiago Carrillo preguntaba en su informe al Comit¨¦ Central del PCE si en Catalu?a la lucha en los convenios colectivos se ha llevado de la mejor manera. ?C¨®mo responden los obreros comunistas catalanes, integrados en CCOO, a aquella pregunta?

Jos¨¦ Luis L¨®pez-Bulla. No entiendo por qu¨¦ se ha dicho que no hemos hecho nada en Catalu?a. No se ha especificado ning¨²n sector ni ninguna negociaci¨®n en concreto. Supongo que el secretario general del PCE necesita tener un abanico amplio de interrogantes, pero supongo que ha estado mal informado. Nadie ha efectuado ning¨²n an¨¢lisis de lo que significa el nivel de organizaci¨®n del empresariado catal¨¢n y de c¨®mo la CEOE catalana -el Fomento- es la organizaci¨®n empresarial m¨¢s importante de toda Espa?a. Sin duda aqu¨ª en Catalu?a ha habido insuficiencias. De lo que se trata es de que se me diga d¨®nde ha habido una huelga incontrolada o ilimitada, rehuyendo la generalizaci¨®n facilona de decir que se han equivocado las CCOO catalanas.

P. Jordi Borja cit¨® los casos del metal y del textil.

R. Estoy de acuerdo con Borja cuando dice que el sindicalismo no puede renunciar a defender los intereses de los trabajadores. Pero Borja tiene un lapsus al citar al textil y al metal. El convenio del textil se est¨¢ todav¨ªa negociando y en el caso del metal todav¨ªa no se ha empezado.

P. Poco despu¨¦s del pol¨¦mico informe de Carrillo, Marcelino Camacho manifestaba respecto a las que han tenido lugar en Caesas que han tenido lugar en Catalu?a nos hemos pasado un poco?. ?Por qu¨¦ hubo tal afirmaci¨®n?

R. No entiendo por qu¨¦ se habla de huelgas incontroladas en Catalu?a cuando hay en Vizcaya una huelga metal¨²rgica indefinida y en otras zonas otras huelgas incontroladas en el metal y en la construcci¨®n, y es precisamente en Catalu?a donde hay un sindicato mod¨¦lico. Las palabras que hemos recibido no son de las que ayudan a los sindicatos de Catalu?a, ni a los trabajadores de Catalu?a. Entiendo, no obstante, que Marcelino Camacho no ha desautorizado a las CCOO catalanas, que son jur¨ªdica y org¨¢nicamente independientes de las del resto de Espa?a. Al contrario, creo que ellos est¨¢n en una clara sinton¨ªa con nosotros.

P. ?Cu¨¢les son las relaciones entre el movimiento obrero, y en concreto CCOO, y la Generalidad provisional de Catalu?a?

R. No me explico c¨®mo el honorable Tarradellas no ha citado, para mantener un intercambio de criterios, a la fuerza social y pol¨ªtica m¨¢s importante de Catalu?a, que somos nosotros, las CCOO catalanas, con medio mill¨®n de afiliados. Supongo que cuando Tarradellas oye hablar de numerosos o de masas se pone nervioso.

P. Recientemente manifest¨® que ?si UCD intenta una pol¨ªtica de mayor¨ªa parlamentaria haciendo valer los n¨²meros contra los intereses de los trabajadores se va a encontrar con la movilizaci¨®n sindical m¨¢s importante que haya conocido ning¨²n Gobierno en este pa¨ªs?. Ello produjo una fuerte reacci¨®n. ?Reafirma aquellos criterios?

R. Mantengo totalmente aquellos criterios. Respecto a la reacci¨®n generada contra las mismas, se trata de un intento de marginar los sindicatos y de paso abrir brechas sobre la ?bondad? de un pretendido sindicalismo amarillo. Tambi¨¦n esconde un deseo de limitar el papel del sindicato a temas estrictamente laborales, neg¨¢ndole toda incidencia en el resto de la sociedad.