Tierno Galv¨¢n: la esperanza de un alcalde para Madrid
Secretario general del PSOE y diputado por Madrid
Para Antonio Machado, Madrid era el ?rompeolas de todas las Espa?as?. El microcosmos que representaba la aportaci¨®n de todos los talantes, de todas las culturas, de todos los sufrimientos y de todas las aspiraciones de los pueblos que integran Espa?a.
Algunos han cre¨ªdo ver en esta ciudad una falsa imagen de centralismo. Ni siquiera los madrile?os de origen se sienten centralistas; no digamos los millones de madrile?os que han llegado a esta ciudad de todos los rincones de Espa?a impulsados por la necesidad o cargados con la esperanza de una vida mejor.
Madrid ha soportado siempre, y soporta hoy, el peso de una Adminisiraci¨®n fuertemente centralizada y agobiante en todas las materias hasta convertir la ciudad en un mal ejemplo de hacinamiento humano, de servicios p¨¦simos para la colectividad, de intolerable contaminaci¨®n atmosf¨¦rica y de vida m¨¢s cara que la de cualquier otra ciudad de Espa?a.
Ante los madrile?os se plantea el reto de la democratizaci¨®n de la vida municipal. Un reto esperado desde hace casi medio siglo. Una apuesta retrasada, como una maniobra vergonzante m¨¢s, por la derecha gobernante. Democratizar significa que Madrid sea gobernada por el pueblo y para el pueblo.
Son varias las opciones que se ofrecen a los madrile?os. La derecha ha sabido agrupar sus votos ante la posibilidad de que la izquierda se alce con el triunfo en las pr¨®ximas elecciones municipales. Nadie como los grandes especuladores, comerciantes o financieros entiende mejor el concepto de ?utilidad? para la defensa de sus intereses como grupo privilegiado.
Pretenden que Madrid siga siendo lo que hasta ahora es. Quieren conservar ese mundo de grandes negocios, impenetrables, de urbanizaciones salvajes, de servicios p¨²blicos deteriorados, de escuelas clasistas y discriminatorias, etc¨¦tera. Sus portavoces siguen siendo, con camuflajes diversos, los hombres del pasado, a pesar de que este camuflaje les permita actuar con el descaro de individuos que pretenden dar lecciones de ?democracia? y de ?eficacia?.
Frente a esta opci¨®n de derecha varias listas de la izquierda compiten por cambiar la orientaci¨®n de la vida municipal. Cada una tiene una credibilidad distinta. Yo no voy a caer en el error de entrar en disputas que pretendan descalificar a unas u otras opciones. Todas tienen el m¨¦rito de ofrecer caras nuevas, sin vinculaciones directas con el pasado inmediato y con el bagaje de la dura lucha contra la clase dominante durante los a?os de la dictadura. Por eso sigo sin poder comprender que desde algunos partidos de izquierda se pretenda descalificar a la lista o a la persona que encabeza la lista socialista para el municipio de Madrid.
Para cualquier ciudadano progresista, amante de la democracia y de la libertad; para cualquier madrile?o que pretenda que su ciudad cambie de orientaci¨®n y que el Ayuntamiento sirva a los intereses de la mayor¨ªa de los ciudadanos; para cualquiera que desee combatir los problemas de la especulaci¨®n del suelo y pretenda corregir las desviaciones que una pol¨ªtica de corruptelas permanentes ha producido con el urbanismo y con los servicios p¨²blicos; para cualquier persona honesta que crea que las cosas no han ido bien y deben cambiar, el ¨²nico candidato con posibilidades de vencer a la derecha es el candidato socialista: Enrique Tierno Galv¨¢n.
?Qui¨¦n es ese candidato que con un equipo de personas de su misma ideolog¨ªa, socialista y democr¨¢tica, pretende ofrecer una alternativa distinta para Madrid?
A Tierno Galv¨¢n se le reconoce por todos una honestidad intachable, acu?ada a lo largo de decenios de lucha tenaz contra la dictadura y en favor de la libertad y el socialismo. Tambi¨¦n se le reconoce por todos una gran capacidad intelectual, asimismo apreciada a lo largo de decenios de ense?anza como maestro y de investigador de las ciencias sociales. Este doble reconocimiento trasciende las fronteras no s¨®lo de Madrid, sino de nuestro propio pa¨ªs.
El profesor Tierno Galv¨¢n es un humanista que se acerca a los problemas del hombre como individuo y a los problemas del hombre en sociedad. De su aproximaci¨®n saca respuestas v¨¢lidas para el hombre.
No es un tecn¨®crata y creo que debe sentirse orgulloso por ello. De multitud de tecn¨®cratas se han rodeado las administraciones franquistas y siguen rode¨¢ndose sus herederos. De hombres sin ideolog¨ªa, sin aspiraciones de cambio, sin deseos de atender a los problemas del hombre concreto; prisioneros de cifras y datos que utilizan para mantener la opresi¨®n y las t¨¦cnicas de marginaci¨®n de la inmensa mayor¨ªa de los ciudadanos.
A mi juicio, Madrid necesita un alcalde honesto e inteligente. Un hombre capaz de comprender los problemas de los centenares de m¨ªles de familias que viven soportando la mala administraci¨®n con que los tecn¨®cratas del franquismo y del postfranquismo han castigado a esta gran ciudad. Un hombre abierto a la colaboraci¨®n y a la participaci¨®n de todos los ciudadanos de buena voluntad. Una persona capaz de entender y asumir los consejos y las orientaciones de especialistas en cada uno de los problemas que deba afrontar, complement¨¢ndolos con ese sentido de servicio a la persona concreta y a la colectividad en que se inserta.
Para los madrile?os la opci¨®n es muy limitada pese a que los aspirantes sean numerosos. O gobierna esta ciudad un alcalde conservador y ligado a los intereses de la derecha, o gobierna un alcalde socialista: Enrique Tierno Galv¨¢n.
Por si alguien piensa que he ca¨ªdo en la tentaci¨®n de personalizar en exceso, debo a?adir que para los socialistas la campa?a municipal es, sobre todo, el reto hist¨®rico de hacer penetrar en la estructura de todos y cada uno de los municipios espa?oles a millares de concejales que con honestidad est¨¦n dispuestos a prestar servicios a su pueblo. Pero la reflexi¨®n que quiero hacer llegar al ciudadano madrile?o a trav¨¦s de estas notas me obliga a simplificar como lo he hecho, con la convicci¨®n profunda de estar defendiendo al mejor candidato para ocupar la alcald¨ªa de Madrid.
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