La oposici¨®n tunecina teme una salida a la muerte de Burguiba

El presidente tunecino, Habib Burguiba, abandon¨® ayer el servicio de cardiolog¨ªa del hospital militar de T¨²nez, donde hab¨ªa sido trasladado el mi¨¦rcoles pasado para someterse a un chequeo, y se encuentra ?en ¨®ptimas condiciones?, seg¨²n la versi¨®n oficial dada por los medios de prensa tunecinos. La sucesi¨®n de Burguiba ha suscitado una advertencia del dirigente de la oposici¨®n Ahmed Ben Salab, en el sentido de considerar que las fuerzas armadas podr¨ªan jugar un destacado papel pol¨ªtico.

Un a?o despu¨¦s de las manifestaciones populares que desembocaron, el 26 de enero de 1978, en la proclamaci¨®n del Estado de urgencia y la detenci¨®n y posterior encarcelamiento de destacados sindicalistas, entre los que figuraba el secretario general de la CGTT, Habib Achur, el panorama pol¨ªtico tunecino sigue ensombrecido, si se tienen en cuenta las declaraciones hechas esta semana por el antiguo ministro de Agricultura Ahmed Ben Salah, actualmente en el exilio.El ?fin del reinado? al que se refiere Ben Salah, en un documento distribuido por la oposici¨®n tunecina, podr¨ªa desembocar en la preeminencia de una soluci¨®n militar, en el caso de que el actual primer ministro y candidato a la sucesi¨®n de Burguiba, Hedi Nuira, no lograra consolidar el apoyo del actual ministro de la Defensa, Abdallah Farhat.

El deficiente estado de salud de Burguiba, que cuenta con 75 a?os y fue hospitalizado en la Rep¨²blica Federal de Alemania durante cerca de dos meses el a?o pasado, habr¨ªa motivado lo que parece ser una discreta toma de contacto entre el jefe del Ej¨¦rcito y c¨ªrculos cercanos a Ben Salah para establecer las modalidades del regreso de este ¨²ltimo a T¨²nez, de cuya prisi¨®n central se evadi¨® en 1973.

Brahim Tobal, otro l¨ªder de la oposici¨®n, que dirige el movimiento llamado Yusefista, se declar¨® recientemente partidario de dar ?participaci¨®n pol¨ªtica? a los representantes del Ej¨¦rcito, con la excepci¨®n de los partidarios del ministro de Defensa, quien, seg¨²n Tobal, constituir¨ªa uno de los puntales del bunker del partido gobernante, el Neo Destur, en uni¨®n del primer ministro Nuira y el hijo de Burguiba.

La formaci¨®n pol¨ªtica oficial tunecina debe celebrar su congreso en septiembre pr¨®ximo, que ser¨¢, seguido por unas elecciones generales. Fuentes cercanas a ese partido han asegurado que el propio Nuira no se opondr¨ªa a autorizar una ?forma de multipartidismo, que, en una primera etapa, adoptar¨ªa la forma de integrar a una serie de candidatos ?independientes? en las listas electorales del Destur.