Porcioles, m¨¢s favorable a la Generalidad que Tarradellas

Jos¨¦ M. de Porcioles, alcalde franquista de Barcelona durante m¨¢s de diecis¨¦is a?os, emiti¨® hace meses, a petici¨®n del presidente de la Generalidad, un informe jur¨ªdico en el cual afirmaba que, en el marco de la legislaci¨®n vigente, era posible un traspaso de pr¨¢cticamente todas las competencias de las cuatro diputaciones catalanas a la Generalidad, seg¨²n ha sabido ahora EL PAIS en fuentes pol¨ªticas de la m¨¢xima solvencia. Las mismas fuentes afirmaron que el consejero de Gobernaci¨®n cesado por Tarradellas, Frederic Rahola, y el entonces ministro de la Gobernaci¨®n, Rodolfo Mart¨ªn Villa, tambi¨¦n hab¨ªan logrado un pleno acuerdo para traspasar de forma inmediata a la Generalidad pr¨¢cticamente todos los servicios y competencias de las diputaciones catalanas.

Fue el acuerdo sobre este punto entre Rahola y Mart¨ªn Villa lo que movi¨® a Tarradellas a solicitar un informe jur¨ªdico a Porcioles. Las fuentes informantes manifestaron que Tarradellas, al solicitar el informe, estaba convencido de que Porcioles se pronunciarla en favor de las diputaciones y en contra de la Generalidad, lo cual dar¨ªa argumentos a Tarradellas. Es de recordar que Porcioles fue presidente de la Diputaci¨®n de L¨¦rida en los a?os cuarenta. Pero, curiosamente, Porcioles adopt¨® una actitud m¨¢s avanzada y m¨¢s catalanista que Tarradellas, al pronunciarse en favor de la Generalidad y no de las diputaciones.Ello no obstante, Tarradellas hizo prevalecer su criterio y, a¨²n en este m¨®mento, las diputaciones contin¨²an sin traspasar sus servicios a la Generalidad. Tarradellas intent¨® tambi¨¦n, como se inform¨® en su d¨ªa en estas p¨¢ginas, dar la apariencia de que Mart¨ªn Villa era el responsable de la supervivencia de las diputaciones. Pero el antiguo ministro del Interior sali¨® al paso a toda interpretaci¨®n err¨®nea de los hechos, manifestando p¨²blicamente que en aquel tema ?la pelota est¨¢ en campo catal¨¢n?. Paralelamente a estas manifestaciones de Mart¨ªn Villa, Tarradellas hizo entrega al entonces ministro del Interior del informe de Porcioles, en ocasi¨®n de su encuentro en Cambrils el pasado verano.

Con motivo de la elaboraci¨®n del reglamento de r¨¦gimen interior de la Generalidad, Tarradellas obr¨® de forma casi id¨¦ntica a la que ahora se revela, referida a las diputaciones. En aquella ocasi¨®n, los partidos propus¨ªeron unos borradores de reglamento que fueron considerados poco presidencialistas por Tarradellas. Para hallar una argumentaci¨®n favorable a su persona, Tarradellas solicit¨® un informe jur¨ªdico a la muy conservadora Academia de Jurisprudencia y Legislaci¨®n de Catalu?a, cuyas consideraciones opuso a las de los partidos parlamentanos, afirmando que era preciso buscar un terreno com¨²n a las f¨®rmulas divergentes, cuando la discrepancia era fruto de la forzada aparici¨®n en el tema de la mencionada Academia, a petici¨®n de Tarradellas.

La existencia, hasta ahora ignorada, de un informe jur¨ªdico de Porcioles que va m¨¢s lejos en la defensa de autonom¨ªa real de Catalu?a que los criterios de Tarradellas, constituye un elemento de prueba del mayor inter¨¦s a la hora de valorar la gesti¨®n de Tarradellas. Como es sabido, la supervivencia de las diputaciones representa uno de los mayores peligros inmediatos para el auto gobierno de Catalu?a. La posibilidad de un enfrentamiento m¨¢s o menos demag¨®gico entre una ?provincia? y otra podr¨ªa implicar movimientos perturbadores de todo tipo. Por parte de la izquierda, existe el temor de que ¨¦ste sea precisamente el deseo de Tarradellas, quien mantuvo siempre unas excelentes relaciones con los bunkers franquistas, que hasta el pasado d¨ªa 3 dominaban las diputaciones.