Los resultados electorales, "caballo de batalla" para sectores del PSOE
La direcci¨®n del PSOE proyecta hacer una concentraci¨®n en Madrid de los 16.000 concejales y alcaldes socialistas, en un acto formalmente enmarcado en las celebraciones del centenario del partido, pero que tambi¨¦n trata de demostrar la fuerza alcanzada por el mismo. Este detalle pone de manifiesto el papel que las consecuencias electorales van a jugar de cara al XXVIII Congreso, en el cual muchos sectores plantear¨¢n que la relaci¨®n de fuerzas en el partido ha cambiado tras las elecciones.
Las ponencias presentadas por las diferentes agrupaciones no contienen referencias al proceso electoral, puesto que todas fueron redactadas con anterioridad al mismo. A falta de ponencias, existen documentos de trabajo en los que pueden encontrarse las l¨ªneas del posible debate. ? Un partido obrero que hace pol¨ªtica dentro de las instituciones -fundamentalmente en el Parlamento-, cayendo en el errorde olvidar el trabajo de masas y derivando hacia el electoralismo, acaba por perder las elecciones?, se lee, por ejemplo, en el texto preparado por un grupo de militantes de Madrid -Manuel Turri¨®n, Manuel Abej¨®n, Jos¨¦ Manuel Mor¨¢n, Federico Fern¨¢ndez, Pedro Sancho-, y en el que tambi¨¦n se dice que ?las elecciones generales se?alan el fracaso de la estrategia que postulaba el PSOE como alternativa inmediata de Gobierno?, mientras las elecciones municipales producen cierta recuperaci¨®n en los medios urbanos, pero el partido ?demuestra su debilidad org¨¢nica en las ¨¢reas rurales?.Otro texto, este ¨²ltimo preparado por Joaqu¨ªn Leguina, Miguel Mu?iz y Javier Solana, destinado a la revista Zona. Abierta, reconoce que ?perdimos las legislativas?, aunque los resultados de las mismas distan de ser una cat¨¢strofe, y que posteriormente se produjo el ?contragolpe municipal?. Entre las razones del relativo fracaso de las legislativas cita las armas utilizadas por UCD, blandiendo la amenaza marxista desmembradora de la patria y ahortista, y las del PCE, que hizo sonarcon fuerza la ?vieja fanfarria de los social-traidores?, pero tambi¨¦n se ocupa de una serie de problemas internos. ?La mayor¨ªa de la juventud - agrega - no comulga con los partidos; de continuar esta tendencia, las posibilidades de la izquierda para cambiar la sociedad se ir¨¢n debilitando hasta desaparecer?.
Ello conduce a los autores de este an¨¢lisis a establecer la necesidad de una batalla ¨ªdeol¨®gica, junto con una l¨ªnea sindical ?inequ¨ªvocamente acorde? con los intereses de la clase trabajadora y una gesti¨®n municipal llevada en solitario por la izquierda. De cara al XXVIII Congreso, se establece la necesidad de desconcentrar cargos, incrementar la autonom¨ªa militante y disminuir el sectarismo.
Soluciones no excesivamente diferentes son las que aparecen en el documento del grupo de Madnd antes citado. Se dice en el mismo que el dilema socialdemocracia/radicalismo es un ?falso dilema?, y que es necesario devolver al PSOE todo su sentido de partido de la clase obrera, ?con un alto nivel de concienciaci¨®n. en la militancia y de lucha ideol¨®gica?, que act¨²e como portavoz pol¨ªtico de las reivindicaciones obreras mantenidas por UGT,yque ¨¦sta sea, asu vez, el ?soporte de masas del partido y el garante de que ¨¦ste no olvida los intereses de la clase trabajadora?.
Por otra parte, es seguro que durante el congreso se plantear¨¢ el problema de la d¨¦bil implantaci¨®n socialista en los medios de difusi¨®n. Algunos sectores van a criticar, probablemente, la escasez de medios en manos del PSOE y la discutible calidad de El Socialista -peri¨®dico que, seg¨²n un despacho distribuido por Europa Press, ha perdido veintiocho millones de pesetas durante 1978-. Mientras tanto, la secretar¨ªa de informaci¨®n ha preparado un documento en el que se constata la no existencia ?ni por aproximaci¨®n? de una prensa de izquierdas en Espa?a, as¨ª como la dram¨¢tica situaci¨®n de RTVE, junto con la falta de medios econ¨®micos del partido para operaciones de m¨¢s envergadura, que le permitieran una mayor disponibilidad de medios de prensa y radio.
Las personas
Hasta aqu¨ª hemos hecho un apretado resumen de las posiciones pol¨ªticas y organizativas planteadas por distintas agrupaciones y sectores del PSOE ante el XXVIII congreso del partido. Pero el trasiego de textos y propuestas no agota la cuesti¨®n fundamental, que en las pr¨®ximas semanas suscitar¨¢ tantos o mayores comentarios que las posiciones program¨¢ticas, y es saber qu¨¦ personas dirigir¨¢n el PSOE en los pr¨®ximos a?os.
Salvo muy contadas excepciones, nadie con peso dentrode dicho partido cuestiona la permanencia de Felipe Gonz¨¢lez al frente del mismo, lo que convierte la disputa de puestos, si es que llega a produc¨ªrse, en una lucha por la segunda fila. A pesar del esquemat¨ªsmo de la idea, podr¨ªa decirse que la cuesti¨®n est¨¢ en saber a t¨ªtulo de elemplo si Alfonso Guerra va a tener m¨¢s, igual o menos poder que ahora, si va a incrementarse o disminuir el peso espec¨ªfico de Luis G¨®mez Llorente, si entrar¨¢n o no en la ejecutiva personas que han permanecido relativamente inarginadas, como Francisco Bustelo; en fin, si va a aumentar el peso de las organizaciones m¨¢s fuertes.
Catalu?a, Pa¨ªs Valenciano en el ¨®rgano de direcci¨®n federal, o si ¨¦stas ¨²ltimas van a reclamar mayor autonom¨ªa, en lugar de complicarse la vida con una lucha por el poder central. En definitiva, hasta qu¨¦ punto las corrientes o sectores de opini¨®n se ver¨¢n representados en la direcci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.