Zaccagnini reitera su oposici¨®n a la entrada del PCI en el Gobierno

La batalla electoral italiana se hace cada vez m¨¢s dura en Ia pugna entre los dos mayores partidos: la DC y el PCI. Pr¨¢cticamente se est¨¢ convirtiendo en un refer¨¦ndum sobre si los comunistas deber¨¢n o no entrar en el Gobierno. Pero parece cada d¨ªa que pasa m¨¢s probable la hip¨®tesis que despu¨¦s del 4 de junio los comunistas volver¨¢n a la oposici¨®n. El mismo Benigno Zaccagnini secretario general de la DC, declar¨® ayer sin paliativos que la Democracia Cristiana ?nunca gobernar¨¢ con el PCI?, y a?adi¨®, ?y esto aunque los comunistas renieguen de Lenin?.

Seg¨²n Zaccagnini, su partido no aceptar¨¢ nunca una experiencia de Gobierno con los comunistas porque ¨¦stos tienden a implantar en Italia una sociedad socialista y esto, seg¨²n el l¨ªder democristiano, va contra la actual constituci¨®n que es democr¨¢tica y pluralista.El dirigente derechista ha vuelto a lanzar una llamada a los socialistas consider¨¢ndoles ?la llave de la gobernabilidad de este pa¨ªs?, aunque les ha acusado de incertidumbre acerca de las reales intenciones del PSI despu¨¦s de las elecciones.

Por lo que se refiere a lo que los grandes partidos llaman ?el peligro radical?, es decir la posibilidad de un aumento consistente del min¨²sculo partido de Pannella, Zaccagnini ha dicho que un crecimiento de los radicales, ?har¨ªa a¨²n m¨¢s dif¨ªcil el mecanismo legislativo?. Pero admiti¨® que una parte del ¨¦xito de los radicales depende del hecho que ?los partidos se han esclerotizado, no se han renovado suficientemente y la gente empieza a cansarse de ellos?.

Reconoci¨® que esta cr¨ªtica sirve tambi¨¦n para su partido que ?no ha llevado a cabo la renovaci¨®n con suficiente coraje?. Estas palabras de Zaccagnini han sido interpretadas como una cr¨ªtica a la parte m¨¢s conservadora de su partido que lo ha obstaculizado en estos a?os de su secretar¨ªa en las reformas m¨¢s dr¨¢sticas que en vano intent¨® realizar.

Por otro lado, todos los sondeos realizados en Italia recientemente coinciden en que el Partido Comunista, por primera vez en su historia, sufrir¨¢ un retroceso electoral los pr¨®ximos d¨ªas 3 y 4 de junio.

Tambi¨¦n concuerdan en que la Democracia Cristiana reafirmar¨¢ su supremac¨ªa como partido eje de la pol¨ªtica italiana.

El optimismo en las filas democristianas es enorme: se cree que el avance ser¨¢ del 5%, con lo cual alcanzar¨¢ el 43% de los votos.

La flexi¨®n del Partido Comunista, seg¨²n los sondeos democristianos, puede llegar a un 4% ¨® 5%, con lo que se situar¨ªa en el 30%.