Nieto s¨®lo le sac¨® un segundo a Espie
El espa?ol Angel Nieto logr¨® su objetivo de obtener su quinta victoria consecutiva en el mundial. Triunf¨® en el Gran Premio de Espa?a, disputado el pasado domingo en el circuito del Jarama, por un segundo de ventaja. Tal como hab¨ªa pronosticado EL PAIS, Lazzarini, Ballington, en dos, y Kenny Roberts fueron los otros vencedores. Este ¨²ltimo protagoniz¨® un incidente al t¨¦rmino de su carrera.
La prueba de 50 cc no tuvo historia. Lazzarini logr¨® una c¨®moda victoria sin que nadie le inquietase. Sin la presencia de Tormo, y sin que Bultaco hubiese cedido sus motos y motores a pilotos espa?oles, adem¨¢s de al italiano Lusuardi -el importador hizo presi¨®n para ello-, Lazzirini no tuvo rivales de talla. Con los treinta puntos que tiene el italiano en el mundial, por ninguno del espa?ol Tormo, y con s¨®lo cuatro pruebas por disputar en este minurnundial, las posibilidades de Tormo de revalidar su t¨ªtulo mundial pr¨¢cticamente han desaparecido.En 125 cc Angel Nieto tuvo que luchar much¨ªsimo para conseguir batir al franc¨¦s Espie. Aclaradas las posiciones despu¨¦s de las primeras vueltas, y visto que las posibilidades de triunfo quedaban reducidas a Nieto y Espie, ambos comenzaron a tirar fuerte, distanci¨¢ndose del resto. A mitad de carrera, Nieto forz¨® a¨²n m¨¢s, con el fin de distanciar al franc¨¦s y evitar que ¨¦ste pudiera darle un disgusto al final. Pero Espie respondi¨® perfectamente y no hubo distanciamiento. La Minarelli de Nieto, con algunos problemas de estabilidad, era menos r¨¢pida que la Motobecane de Espie, y Nieto tuvo que dar de s¨ª todo lo que ten¨ªa para lograr su objetivo. En las ¨²ltimas vueltas, y despu¨¦s de haber batido el r¨¦cord del circuito vuelta tras vuelta, Nieto, en su desesperado esfuerzo, lleg¨® a rodar m¨¢s r¨¢pido con su 125 cc que V¨ªctor Palomo -ex campe¨®n del mundo- en 250 cc. Ello le permiti¨® distanciar, s?quiera un poco, a Espie, para entrar en la meta con un segundo justo de ventaja sobre el franc¨¦s.
Con esta victoria, quinta consecutiva de Nieto en este mundial, se destaca en la clasificaci¨®n general con 75 puntos, por delante del franc¨¦s Espie, que cuenta con 36, y del italiano Massimiani, y del suizo Mueller, ambos, con veinticinco.
Las carreras de 250 ce y 350 cc resultaron tinas exhibiciones de las verdes Kawasaki. La tremenda potencia de estas m¨¢quinas, unida a su ligereza, las convierten en pr¨¢cticamente imbatibles. El piloto que tiene la moto mejor puesta a punto, el surafricano Ballington, es el que cuenta con las m¨¢ximas posibilidades. En tres y medio, pese a no hacer una gran carrera, logr¨® la victoria. Primero el suizo Frutschi y, m¨¢s tarde, el franc¨¦s Estrossi le inquietaron much¨ªsimo. Hasta tal punto que si no llega a caerse Estrossi en la ¨²ltima vuelta, al tratar de compensar con su audacia la desventaja de moto que ten¨ªa con el l¨ªder, habr¨ªa dado alcance a ¨¦ste. Ballington, muy nervioso, comenz¨® a respirar por la boca, con lo que el visor de su casco integral se empa?¨® r¨¢pidamente, impidiendo una visi¨®n completa y, con ello, el poder rendir al m¨¢ximo. Con la ca¨ªda de Estrossi, autor de una impresionante carrera, Hansf¨®rd se encontr¨® con el segundo puesto, por delante del suizo Frutschi.
En 250 cc Estrossi volvi¨® a real¨ªzar otra gran carrera, remontando posiciones tras una mala salida. Con la pierna lesionada por su ca¨ªda no pudo empujar bien la moto, y ¨¦sta tard¨® en ponerse en marcha. Ballington gan¨® con comodidad nuevamente, por delante de Hansford. Tercero fue Rossi, sobre una interesante Morbidelli, y cuarto, Estrossi.
El mundial de ambas categor¨ªas est¨¢ encabezado por Ballington, seguido por el franc¨¦s Fern¨¢ndez en 250, y por- el norteamericano Randy Mamola en 350 ce.
Por su parte, la carrera de 500 cc: tuvo, al menos hasta los dos tercios del recorrido total, una emoci¨®n rara vez vista. El norteamericano Kenny Roberts se enzarz¨® en un duelo tremendo con el holand¨¦s Willy Hartog, altern¨¢ndose en la cabeza. Su impresionante ritmo, que s¨®lo pud,a seguir, aunque de lejos, el norteamericano Mike Baldwin, hac¨ªa que el r¨¦cord del circuito fuese cayendo vuelta tras vuelta. Con iriclinaciones espectaculares, en las que tanto Roberts como Hartog rozaban, una y otra vez, hasta con la rodilla en el suelo, con frenadas en l¨ªmites incre¨ªbles, que s¨®lo dos pilotos de esta categor¨ªa se atreven a hacer, pasando una vez uno en cabeza y otra vez el otro, ambos hicieron las delicias de los espectadores. L¨¢stima que el n¨²mero de ellos fuera s¨®lo de unos 15.000, debido, fundamentalmente, a la poca y mala difusi¨®n y a la programaci¨®n -no se pueden poner carreras a las nueve de la ma?ana del domingo, porque obliga a levantarse, en el d¨ªa de descanso, a las siete de la ma?ana- L¨¢stima tambi¨¦n que Hartog no pudiera aguantar esa tensi¨®n y ese ritmo durante toda la carrera, entre otras cosas porque su lesi¨®n en el hombro le Imped¨ªa un rendimiento al m¨¢ximo. Cuando faltaba un tercio de carrera por cubrirse, El Marciano -apodado as¨ª por su extra?o car¨¢cter y forma de montar en moto- se qued¨® solo en cabeza, al descolgarse algo Hartog. Roberts es un hombre que no s¨®lo va rapid¨ªsimo, sino que puede ir as¨ª desde la prirriera hasta la ¨²ltima vuelta, algo que muy pocos pueden hacer.
Terminada la carrera, con Roberts, Hartog y Baldwin en las tres primeras posiciones, el fen¨®meno norteamericano fue protagonista de un esc¨¢ndalo. La organizaci¨®n no le hab¨ªa pagado todo lo que ¨¦l quer¨ªa -Roberts reclamaba 1.700.000 pesetas por correr, mientras que los organizadores le dieron 500.000-, y el americano tuvo que ceder por ser una carrera del mundial de la que no pod¨ªa prescindir a estas alturas. Kenny Roberts baj¨® del podium justo despues de haber escuchado su himno, dejando a los miembros de la Federaci¨®n Espa?ola e internacional con la corona de laurel y los trofeos en la mano. Con un gesto despectivo se alej¨® de la tribuna de autoridades, ante la indignaci¨®n de ¨¦stas. Antes, justo al pasar la l¨ªnea de meta, hab¨ªa hecho un amago de arrollar al juez que daba el banderazo final.
La organizaci¨®n volvi¨® a perder el control en lugares clave del acceso a la pista al no aceptar a los controles y porteros que le ofrec¨ªa el RACE. Muchos espectadores cruzaron la pista entre prueba y prueba y se colocaron en zonas muy peligrosas. Como dato curioso cabe citar que el surafricano Ekerold fue suplantado por un amigo en los entrenamientos oficiales para cobrar la prima de salida. Ekerold, con fractura de clav¨ªcula, no pod¨ªa pilotar la moto, pero no por ello quiso dejar de cobrar la prima, por lo que cont¨® con la ayuda de un amigo para poder hacerlo.
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