Un cient¨ªfico sovi¨¦tico afirma haber encontrado la Atl¨¢ntida

Plat¨®n, Sir Arthur Conan Doyle y todos los escritores de ciencia ficci¨®n que se han mostrado perplejos sobre el enigma del continente perdido de la Atl¨¢ntida, deben dar paso al profesor Andrei Arkadyevich Aksyonov.

La ciencia sovi¨¦tica podr¨¢ mantener que el Tri¨¢ngulo de las Bermudas no es m¨¢s que agua y que los platillos voladores (OVNI) son ilusiones ¨®pticas, pero el profesor Aksyonov dice que tiene pruebas fotogr¨¢ficas de la existencia de paredes de piedra hechas por el hombre y escaleras, a una profundidad de setenta metros, en el oc¨¦ano Atl¨¢ntico, a unos cuatrocientos kil¨®metros al suroeste de la costa hispano-portuguesa.?Es posible que sea parte de la Atl¨¢ntida, tal vez no toda, sino una parte?, dice el doctor Aksyonov, un hombre de gran prestigio cient¨ªfico, vicedirector del Instituto de Oceanolog¨ªa de la prestigiosa Academia de Ciencias sovi¨¦tica.

Sus pruebas, admite, son limitadas: dos fotos, que muestran once piedras que ¨¦l cree llevan la marca del hombre.

Las fotograf¨ªas fueron tomadas hace dos a?os, no por el doctor Aksyonov, sino por un colega, VIadimir I. Marakuyev, con una c¨¢mara sumergible en la cumbre sumergida del Ampere Seamount, un volc¨¢n submarino inactivo situado a medio camino entre Lisboa y el archipi¨¦lago de Madeira.

En su oficina del Instituto, el doctor Aksyonov manifest¨® recientemente que no pod¨ªa mostrar las fotograf¨ªas. ?Son de Marakuyev, y est¨¢ muy enfermo del coraz¨®n en un hospital?, dijo. ?Creo que ser¨¢n publicadas pr¨®ximamente en uno de nuestros manuales cient¨ªficos.?

Marakuyev, aparentemente, no se dio cuenta de lo que ten¨ªa hasta fines del a?o pasado, cuando resolvi¨® revelar la pel¨ªcula de una exploraci¨®n del Seamount, en 1977, que hab¨ªa efectuado con el barco de investigaciones sovi¨¦tico Moskovsky Universitet.

El cient¨ªfico no afirma que descubri¨® la Atl¨¢ntida, pero ofrece gratuitamente indicaciones para que cualquiera que quiera ir a buscarla encuentre el continente perdido. ?Todo lo que hay que hacer es ir con un barco y el equipo adecuado al Ampere Seamount, bajar setenta metros, encontrar las piedras y subirlas para ver si fueron hechas por el hombre o no?, dijo. ?Mi opini¨®n personal es que son hechas por el hombre.?

Los primeros datos del descubrimiento fueron publicados en Europa a principios de esta primavera, y el doctor Aksyonov dice que provocaron sonrisas burlonas de sus colegas ocean¨®grafos de Dinamarca.

?Les pregunt¨¦: ?Alguno de vosotros cree esto? Dijeron que no y se rieron mucho.? Al descubrir las fotograf¨ªas, de un total de ocho, dos solamente parecieron interesantes.

?Una de ellas muestra ocho piedras -cuatro cuadradas Y cuatro redondeadas- en una l¨ªnea de un metro o metro y medio de largo?. dijo. ?Especialistas que han visto las mismas dicen que es una pared t¨ªpica de la antig¨¹edad. La segunda foto muestra tres piedras igualmente espaciadas al borde izquierdo, y parecen ser parte de una escalera.?

La leyenda sobre la Atl¨¢ntida se remonta incluso a Plat¨®n, que habl¨® del continente perdido en dos de sus di¨¢logos. Timeus y Critias. Lo situ¨® en el oc¨¦ano Atl¨¢ntico y dijo que un d¨ªa se hundi¨® entre grandes olas.