Un premio merecido
La incierta trayectoria de Mart¨ªn Ritt, en su doble condici¨®n de hombre de letras y de cine, le ha llevado desde sus comienzos teatrales a una serie de filmes de muy distinta categor¨ªa e ¨ªndole. Desde sus historias de neta vena faulkneriana hasta esta reciente Norma Rae, sus relatos se apoyaron siempre en un trasfondo social o pol¨ªtico que, aparte de no beneficiarle demasiado, tampoco le salvaban de ciertos pecados m¨¢s o menos melodram¨¢ticos, cuando no convencionales.As¨ª, este realizador s¨®lido, con una cultura poco com¨²n entre sus compa?eros de generaci¨®n, capaz de trazar brillantes caracteres en sus propios guiones, suele sacar a la luz de la pantalla historias como la presentada entre nosotros en la temporada anterior, titulada El Testaferro, y en la que Woody Allen se llevaba la parte del le¨®n, sacrificando a Ritt para su lucimiento.
Norma Rae
Gui¨®n de Irving Ravetch y Harriet Franck. Direcci¨®n: Martin Ritt. Fotograf¨ªa: John A. Alonzo. M¨²sica: David Shire. Int¨¦rpretes: Sally Field, Beau Bridges, Ron Liebman, Pat Hingle, Barbara Baxley. EEUU Dram¨¢tico. 1979. Local de estreno: Cine Roxy B.
Sin embargo, su hora ha sonado este a?o en Cannes y precisamente a la sombra de una actriz, Sally Field, que, desde un principio, centr¨® la atenci¨®n del jurado y los espectadores. Retrato a medidas de su protagonista y a medias testimonio de la actual problem¨¢tica de ciertos grupos de trabajo en Estados Unidos, Norma Rae debe incluirse entre los mejores trabajos de su autor, no s¨®lo por la acertada direcci¨®n de actores que habr¨ªa de llevarle al pasado palmar¨¦s, sino por la ajustada versi¨®n de los conflictos y caracteres que en ella aparecen. Un gui¨®n escrito, construido a su medida, le sirve a Ritt de cauce en esta narraci¨®n, donde protagonista y medio se funden exactamente en escenas que van marcando una progresiva toma de conciencia, desde los d¨ªas revueltos del amor trashumante hasta las reivindicaciones de discutidos derechos sindicales.
Buen cine, en suma, de autor y de realizador, cr¨®nica de una vida contada con sensibilidad apasionada, con dif¨ªcil sencillez.
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