La sombra de Bernab¨¦u

Los nombres unidos de Franco y Bernab¨¦u, en el discurso pronunciado por el gobernador civil de Madrid, se?or Ros¨®n, durante la cena homenaje a los equipos campeones del Real Madrid, provocaron la mayor ovaci¨®n de una noche sobre la que pes¨® en demas¨ªa la sombra del desaparecido presidente de la Casa Blanca.

Para el gobernador de Madrid, se?or Ros¨®n, los dos graves problemas del pa¨ªs eran las sustituciones de Franco y Bernab¨¦u. Para el gobernador civil de Madrid, Su¨¢rez y Luis de Carlos han sido dos hombres providenciales. En la cena solamente hubo menciones de t¨ªtulos conseguidos para f¨²tbol, baloncesto, voleibol y atletismo.

Bernab¨¦u reun¨ªa a un millar de devotos casi todos los a?os. Y Bernab¨¦u con su cazurrez y lo que Agust¨ªn Dom¨ªnguez llamaba ?parabolas?, manten¨ªa el fuego sagrado de la mitolog¨ªa madridista. En la noche del lunes hubo menos gente que en a?os anteriores. Faltaron algunos testigos de Bernab¨¦u. Hasta las representaciones oficiales, salvo la gubernativa, estuvieron ciertamente devaluadas.

All¨ª estaba, sin embargo, en el sitio de siempre, Raimundo Saporta. ?Por un art¨ªculo en la prensa no vamos a retirar El Naranjito. Ya tenemos mill¨®n y medio de camisetas pedidas. A la West Nally le ha gustado. El Naranjito ya no es nuestro problema?. Saporta estuvo donde siempre. Quiz¨¢ porque los equipos madridistas que han gando t¨ªtulos son los que ¨¦l dej¨® en herencia a la actual directiva.