Somoza maniobra pol¨ªticamente con su posible dimisi¨®n

Si la informaci¨®n es cierta, Anastasio Somoza parece haber variado en las ¨²ltimas horas su obcecada postura de no dimitir. Noticias procedentes de Estados Unidos, y atribuidas a ?un alto cargo del Gobierno que pidi¨® no ser identificado?, se?alaron ayer que Somoza estaba dispuesto a renunciar a su cargo. siempre que se cumplieran una serie de condiciones. En estas, precisamente, iba la casi absoluta inviabilidad.El dictador nicarag¨¹ense exige, nada menos, que Estados Unidos presionen para que en el Gobierno que le suceda est¨¦ representado su Partido Liberal Nacionalista, que se respete la estructura de la Guardia Nacional, que se apliquen sanciones a Costa Rica por su ayuda a los guerrilleros sandinistas y que se canalice hacia Nicaragua todo el dinero necesario para la reconstrucci¨®n del pa¨ªs.

Naturalmente, tales propuestas son inaceptables para la Junta de Reconstrucci¨®n Nacional, para los sandinistas y para los mismos Estados Unidos.

De la misma forma que parece indudable el deterioro del r¨¦gimen somocista en el terreno pol¨ªtico y diplom¨¢tico, la balanza militar se ha inclinado en las ¨²ltimas horas a favor de la Guardia Nacional de Nicaragua. El Ej¨¦rcito de Somoza, en efecto. ha conseguido desalojar de Managua, la capital de la Rep¨²blica, a los guerrilleros que durante m¨¢s de dos semanas mantuvieron en jaque a las fuerzas leales al dictador. Los combatientes sandinistas se han retirado a la ciudad de Masaya, a unos treinta kil¨®metros al sur de Managua.

El saldo de esta victoria es escalofriante: Managua ha quedado convertida en una ciudad fantasma, con amplias zonas urbanas destruidas por la acci¨®n de los bombardeos a¨¦reos y de la artiller¨ªa pesada. Miles de familias han abandonado sus hogares y centenares de hombres, mujeres y ni?os, han perecido en los combates. Casi nada funciona en la ciudad, a pesar de los esfuerzos de la propaganda oficial por mostrar una imagen de retorno a la normalidad.

A trav¨¦s de la radiodifusora nacional de Nicaragua, el Gobierno de Somoza emiti¨® el viernes, durante todo el d¨ªa, espeluznantes llamamientos a la poblaci¨®n civil para que impidiese la salida de guerriIleros de las ciudades de Managua y Matagalpa, sometidas en las ¨²ltimas horas a la acci¨®n de limpieza de la Guardia Nacional: ?Pers¨ªguelos, aniqu¨ªlalos, no los dejes salir?, repet¨ªa insistentemente la radio oficial, en un tono nada conciliador.

La ventaja conseguida en Managua ha animado a los responsables de la Guardia Nacional a intentar una ofensiva en toda regla contra las tropas sandinistas estacionadas en los alrededores del puesto fronterizo de Pe?as Blancas. El Estado Mayor del FSLN detect¨® en la tarde del viernes el desembarco de unos trescientos guardias somocistas en las colinas pr¨®ximas a El Naranjo, lo que se interpreta como una preparaci¨®n de la contraofensiva gubernamental.

Todo indica que durante este fin de semana han de producirse hechos militares de importancia, no s¨®lo en la zona fronteriza con Costa Rica, sino en otros puntos del pa¨ªs. El retorno a la calma relativa en Managua va a permitir a la GN usar buena parte de las tropas que all¨ª operaban en ataques a ciudades dominadas por los sandinistas.