El asombroso mundo de Howard Hughes, todav¨ªa un misterio sin resolver

Ocho meses despu¨¦s de su muerte, Howard Hughes, el millonario loco y solitario, se convirti¨® en uno de los personajes de mayor actualidad: dos peliculas, cuatro programas para televisi¨®n y siete libros consagrados a descifrar los secretos de su vida, aparecieron en Estados Unidos e Inglaterra en 1977. El teatro tambi¨¦n se ha ocupado del millonario en una obra estrenada este a?o en Nueva York. Uno de estos programas de televisi¨®n -El asombroso mundo de Howard Hughes- comenz¨® a emitirse ayer, en el espacio Grandes relatos, de Televisi¨®n Espa?ola.

En un tiempo de 208 minutos, duraci¨®n original de la serie, el director William Graham pretende reflejar fielmente m¨¢s que los datos, oscuros datos, de la biograf¨ªa de Hughes, el misterio de su existencia. El decir, la serie no aporta ning¨²n dato nuevo al misterio que rode¨® la vida, muerte y herencia del multimillonario.La miniserie televisiva est¨¢ basada en el libro de Noali Dietrich y Bob Thomas titulado Howard, the amazing Mr. Hughes (El sorprendente Howard Hughes), obra sobre la que ha confeccionado el gui¨®n John Gay, y a la que ha puesto m¨²sica Laurence Rosenthal. Intervienen como principales int¨¦rpretes Tommy Lee Jones, actor que encarria al asombroso Howard Hughes; Ed Flanders, James Hampton, Lee Purcell, Jim Amtonio, Sorell Booke y Tovah Feldshuh. Esta ¨²ltima es la actriz que intervino como Helena Siomowa en la serie Holocausto, emitida recientemente por Televisi¨®n Espa?ola, y que en el primer cap¨ªtulo emitido, ayer encarn¨® a la actriz Katherine Hepburn, descubierta precisamente para el cine por el multimillonario exc¨¦ntrico.

?Quiero ser el mejor aviador del mundo, el mayor productor y el hombre m¨¢s rico de la Tierra? hab¨ªa dicho Howard Hughes a uno de sus ayudantes, cuando ten¨ªa veinticinco a?os. Cuando muri¨®, el 5 de abril de 1976, a la edad de 72 a?os, H¨²ghes hab¨ªa realizado su programa casi punto por punto. Quedar¨ªa para siempre en la historia de la aviaci¨®n mundial, tanto por haber obtenido, en 1936, el r¨¦cord de velocidad entre Nueva York-Miami (cuatro horas y veinti¨²n minutos) como por haber dado dos a?os m¨¢s tarde la vuelta al mundo, en 91 horas y catorce minutos. M¨¢s tarde fundar¨ªa la compa?¨ªa de aviaci¨®n TWA, de la que lleg¨® a poseer el 75% de las accio nes.

Como productor de cine -ya en 1954 hab¨ªa comprado la RKOpromocion¨® a las actrices y actores Jane Russell, Jean Peters, Ginger Rogers, Linda Damell, Ava Gardner, Elizabeth Taylor, Lana Turner, Katherine Hepburn.... y produjo pel¨ªculas como Angeles del infierno, Un gran reportaje, Scarface, Polvorilla.

Como hombre de negocios y gran industrial -ah¨ª est¨¢n los cerca de 150.000 millones de pesetas que dej¨® de herencia- alcanz¨® si cabe todav¨ªa mayores metas. Propiedades petrol¨ªferas, compa?¨ªas a¨¦reas, compa?¨ªas electr¨®nicas y casinos de juego aseguraron para Howard Hughes el calificativo de ?uno de los hombres m¨¢s ricos de la Tierra?.

Su plan de vida se cumpli¨®, pero lo que Hughes no hab¨ªa previsto es que tambi¨¦n ser¨ªa uno de los genios m¨¢s exc¨¦ntricos del mundo. Pas¨® los ¨²ltimos veinte a?os de su vida en una reclusi¨®n total dirigiendo las redes de un imperio financiero cada vez m¨¢s extenso e importante. Mucho de este dinero se lo gast¨® para montar una herm¨¦tica red de aislamiento con el mundo exterior. Las ¨®rdenes econ¨®micas son los unicos signos de vida que dio Howard Hughes durante los ¨²ltimos veinte a?os de su vida.

El misterio de su vida tampoco se ha desvelado despu¨¦s de su muerte. Seg¨²n el periodista norteamericano James Phelan, que ha recogido testimonios de los m¨¢s directos colaboradores de Hughes, los m¨¦dicos que se encargaron de constatar su muerte, ocurrida en un avi¨®n en ruta, desde Acapulco a Huston, se encontraron con el cuerpo de un anciano que pesaba cuarenta kilos, con una barba de cuarenta cent¨ªmetros de largo y unas largas u?as redondas, debido a que no se las hab¨ªa cortado desde hac¨ªa a?os.

Dos d¨ªas despu¨¦s de su muerte, el millonario Howard Hughes fue enterrado en la intimidad en el cementerio de Glenwood, de Huston. S¨®lo seis personas estaban all¨ª, y ninguna de ellas pertenec¨ªa al mundo de sus negocios.