Los empresarios vascos plantean una estrategia com¨²n frente a bancos y cajas

La sombra de Olarra plane¨® de manera bastante ostensible sobre las cabezas de los ochocientos peque?os y medianos empresarios de Vizcaya que, en asamblea celebrada hasta ¨²ltima hora de la noche del martes, acordaron -seg¨²n recog¨ªamos en nuestra ¨²ltima edici¨®n de ayer- no pagar los impuestos ni las cuotas de la Seguridad Social como medidas de presi¨®n ante la Administraci¨®n.

La invisible presencia del conocido industrial vasco se hizo especialmente notoria cuando, entre las medidas propuestas para establecer una estrategia com¨²n de todos los empresarios, se consider¨® la posibilidad de boicotear a los bancos y cajas de ahorro ?cuyo comportamiento fuera manifiestamente contrario a alguna empresa en crisis, precipitando su ca¨ªda?. Aunque la moci¨®n no lleg¨® a ser votada, las insinuaciones impl¨ªcitas a la Caja de Ahorros Municipal de Bilbao, acusada por Olarra de ser la causante de la suspensi¨®n de pagos de su empresa, han merecido nuevas precisiones de esta instituci¨®n de ahorro sobre el tema.?La Caja?, informaron fuentes de la misma, ?no s¨®lo no mantuvo una actitud beligerante con Olarra, sino que intent¨® por todos los medios encontrar una soluci¨®n, que, sin perjudicar los intereses de nuestros impositores, a los que nos debemos, causase el menor perjuicio posible a la empresa.? Entre las propuestas sugeridas por la Caja de Ahorros figur¨® expresamente la de un aplazamiento en el pago, que ser¨ªa satisfecho entre septiembre de este a?o y febrero del pr¨®ximo, a raz¨®n de diez millones de pesetas al mes. La ¨²nica condici¨®n puesta por la Caja fue que la operaci¨®n fuera garantizada por alguna entidad bancaria. Seg¨²n consta en un escrito que obra en poder de la Caja de Ahorros Municipal, Olarra rechaz¨® esa f¨®rmula por no poder encontrar ning¨²n banco dispuesto a avalar la operaci¨®n.

Aunque este ¨²ltimo dato parece confirmar la opini¨®n de quienes piensan que, con o sin ejecutivo de la Caja, la situaci¨®n financiera de Olarra conduc¨ªa directamente a la suspensi¨®n de pagos -y de ah¨ª la falta de apoyo de la banca-, Luis Olarra argument¨® en la rueda de prensa del martes que ?la situaci¨®n no es tan mala, dadas las buenas perspectivas de la cartera de pedidos para el primer trimestre de 1980?.

Estas perspectivas parecen estar relacionadas, seg¨²n impresiones recogidas por EL PAIS en c¨ªrculos sider¨²rgicos, con la pr¨®xima eliminaci¨®n de las restricciones a la importaci¨®n de aceros por parte de Estados Unidos. Al parecer, Olarra negocia contratos con dicho pa¨ªs por un importe que pudiera superar los 2.000 millones de pesetas. Este dato explicar¨ªa, a su vez, la estrategia de Olarra, tendente a paralizar, a toda costa, los posibles ejecutivos por parte de los principales acreedores, en la esperanza de que una flotaci¨®n a la baja de la peseta y la mencionada apertura de los mercados norteamericanos le permitiera recuperarse a comienzos de 1980. Seguramente, la f¨®rmula de pago aplazado hasta febrero, propuesta por la Caja de Ahorros Municipal, ten¨ªa que ver con estas expectativas.

Desmentida la tramitaci¨®n conjunta de expedientes de crisis

En otro orden de cosas, la Confederaci¨®n General de Empresarios de Vizcaya (CGEV), que preside el propio Olarra, publica hoy en todos los peri¨®dicos de Bilbao un remitido con las conclusiones de la asamblea del martes.En el mismo documento se incluye una primera valoraci¨®n de la encuesta efectuada entre los ochocientos peque?os y medianos empresarios asistentes a la asamblea. Entre otros datos, de la encuesta se deduce que el 64 % de los empresarios manifiesta que no podr¨¢n hacer frente al pago de sus impuestos. Un 62% asegura que tampoco podr¨¢ pagar las cuotas de la Seguridad Social. En otro sondeo, el 89% de los empresarios se pronunci¨® en favor de la petici¨®n de moratorias a Hacienda y a la Seguridad Social.

Por lo dem¨¢s, la nota que aparece hoy en la prensa bilba¨ªna incluye la solicitud a la Administraci¨®n de que se arbitren medidas que faciliten la ?flexibilizaci¨®n de las plantillas con criterios de estricta rentabilidad de las empresas?. La propuesta precisa que deber¨¢ ser el Estado, bien directamente, bien a trav¨¦s de la Seguridad Social, quien pague las indemnizaciones correspondientes, ?comprometi¨¦ndose las empresas a restituir dichas cantidades una vez superada la crisis y con cargo a beneficios?.

Por otra parte, aunque entre las resoluciones adoptadas en la asamblea del martes figura la de ?tramitaci¨®n conjunta de expedientes de crisis para peque?as y medianas empresas?, la Confederaci¨®n de Empresarios ha desmentido la noticia seg¨²n la cual ochocientas empresas gestionaban ya la presentaci¨®n de suspensi¨®n de pagos en bloque. Esta noticia, lanzada, sin duda, como parte de las presiones puestas en marcha para llamar la atenci¨®n de la Administraci¨®n, ha resultado un arma de doble filo, ya que, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a la propia Confederaci¨®n, ?ha provocado una actitud de recelo por parte de algunos proveedores?.