Los partidos menores de Italia apoyan las gestiones de Craxi

En los corros de apostantes, Bettino Craxi, secretario general del Partido Socialista (PSI), aparec¨ªa ayer como vencedor en su intento de dar al pa¨ªs el primer gabinete presidido por un socialista.Sin embargo, desde Estrasburgo lleg¨® tambi¨¦n ayer la noticia, puntualmente desmentida, que los l¨ªderes democristianos, Benigno Zaccagnini, secretario general de la Democracia Cristiana y Flaminio Piccoli, presidente del consejo nacional del partido, han asegurado a sus colegas alemanes que ?Craxi no pasar¨¢?. Por su parte el grupo llamado ?amigos de Zaccagnini?, que son los m¨¢s propensos a una colaboraci¨®n con el Partido Comunista, afirmaron ayer que est¨¢n en contra de la presencia de Craxi, porque esto significar¨ªa una p¨¦rdida de identidad de la Democracia Cristiana y porque el partido de mayor¨ªa relativa debe mantener en el pa¨ªs su papel de fuerza central. Por eso, dicen, la DC no debe perder la presidencia del partido, ser¨ªa una traici¨®n a los electores que les han votado.
Craxi, desde Estrasburgo, dijo que ?no deseaba mortificar a la DC, pero que tampoco estaba dispuesto a ser humillado por ella. Declar¨® que el Partido Comunista le hab¨ªa asegurado que ?no pondr¨ªa dificultades a su intento? y que la petici¨®n que hace la DC de una ?ruptura con la izquierda? es s¨®lo un pretexto, por que es el pa¨ªs mismo quien no desea que el PSI rompa con las dem¨¢s fuerzas de la izquierda,con las cuales desea mantener un ?di¨¢logo cordial?.
La DC, dijo Craxi, debe decir claramente que no quiere a un socialista, y no buscar pretextos que son poco cre¨ªbles. Se puede decir que existe una lucha sorda entre un Craxi temperamental, joven, milan¨¦s, dispuesto a no soltar la presa, y una Democracia Cristiana que no puede decir abiertamente ?no? al PSI, pero que no lo desea de ning¨²n modo en la presidencia del Gobierno, sobre todo despu¨¦s de la postura del PSI durante el caso Moro. Por otra parte la DC est¨¢ dividida y la parte m¨¢s conservadora desea apoyar a Craxi. Lo dijo ayer Fanfani en Estrasburgo.
Otra dificultad para el partido de mayor¨ªa relativa es que los partidos menores, republicanos, socialdem¨®cratas y liberales est¨¢n dispuestos a apoyar a Craxi, quien en este momento cuenta tambi¨¦n con la simpat¨ªa del hombre de la calle que ?desea cambiar?. Hoy el se?or Craxi empieza su segundo ciclo de coloquios con los partidos. Deber¨ªa ser esta la semana definitiva.
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