El "Guernica" vendr¨¢ a Espa?a a principios de 1981

Ya es definitivo: El Guernica de Picasso vendr¨¢ a Espa?a a finales de 1980 o principios de 1981, y este ser¨¢ sin duda el principal acontecimiento del centenario del nacimiento del pintor, que se celebrar¨¢ ese mismo ano, y para cuya organizaci¨®n el ministro de Cultura ha firmado una orden ministerial creando una comisi¨®n especial. Anteayer, el abogado de la familia Picasso, Roland Dumas, se entrevist¨® con el presidente Su¨¢rez, sin duda para tratar de este tema, sobre el cual mantuvo asimismo una conversaci¨®n con el director general del Patrimonio Art¨ªstico, Archivos y Museos, Javier Tusell.De esta manera termina un complejo y pol¨¦mico proceso, hist¨®rico, art¨ªstico y pol¨ªtico, que la c¨¦lebre obra de Picasso, actualmente en dep¨®sito en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, ha planteado a lo largo de los ¨²ltimos lustros. El Guernica -un lienzo de 3,50 metros por 7,82 metros, en blanco, negro y gris- fue pintado por Pablo Picasso entre los meses de mayo y junio de 1937, por encargo del Gobierno de la Rep¨²blica espa?ola, y con destino al pabell¨®n espa?ol en la exposici¨®n internacional de Par¨ªs, que abri¨® sus puertas el 12 de julio del mismo a?o.

El encargo fue hecho a Picasso por Josep Renau, el artista valenciano que entonces ocupaba el puesto de director general de Bellas Artes en el Gobierno de la Rep¨²blica, a finales de 1936. De hecho, Picasso no supo el tema sobre el que iba a tratar su cuadro hasta el bombardeo de Guernica por la Legi¨®n C¨®ndor alemana, en apoyo a las fuerzas franquistas, el 26 de abril de 1937. Conmocionado ante el genocidio, una de las primeras matanzas indiscriminadas de poblaci¨®n civil de la historia, Picasso decidi¨® que ¨¦se ser¨ªa el tema de la obra que el Gobierno de la Rep¨²blica le hab¨ªa encargado. Sin embargo, en las condiciones del encargo -seg¨²n se deduce de una carta del escritor Max Aub, que se ocup¨® de la negociaci¨®n con el pintor, a Josep Renau- el cuadro seguir¨ªa siendo propiedad de Picasso, pues el Gobierno republicano s¨®lo le abon¨® 150.000 francos como gasto de material y trabajo. Al finalizar la exposici¨®n, Picasso recuper¨® el cuadro, pero, ante la inminencia de la segunda guerra mundial, decidi¨® cederlo en dep¨®sito al Museo de Arte Moderno de Nueva York, donde lleg¨® en 1939. Pero Picasso hizo constar en el documento de dep¨®sito que el Guernica pertenec¨ªa al pueblo espa?ol.

Para que el pueblo espa?ol entrase en posesi¨®n de esta donaci¨®n, el pintor malague?o estableci¨® dos condiciones: el restablecimiento del r¨¦gimen republicano y su instalaci¨®n en el Museo del Prado. De ah¨ª que durante toda la dictadura franquista, el cuadro haya permanecido en Nueva York, donde es visitado por numeroso p¨²blico y produce a la direcci¨®n del Museo citado una renta anual de unos 150 millones de pesetas. Bajo el r¨¦gimen de Franco se iniciaron gestiones para que el cuadro viniera a Espa?a, infructuosamente. Estas gestiones fueron reanudadas una vez fallecido Picasso e iniciada la transici¨®n espa?ola hacia la democracia. En los primeros tiempos de la transici¨®n, tanto los herederos de Picasso como su abogado, Roland Dumas, estimaron que era preciso esperar a la consolidaci¨®n de la democracia, pero en ning¨²n momento se pens¨® en aplicar taxativamente la cl¨¢usula que establec¨ªa la reinstauraci¨®n republicana. El 23 de mayo de 1978, el Congreso norteamericano aprob¨® una resoluci¨®n en el sentido de que el Guernica fuese devuelto ?al pueblo y al Gobierno de una Espa?a democr¨¢tica?. Finalmente, las gestiones parecen haber tenido buen fin, en las entrevistas de anteayer de Roland Dumas con el presidente Su¨¢rez y Javier Tusell.

En octubre de 1978 Roland Dumas declaraba a Le Figaro que todav¨ªa exist¨ªan problemas para la venida del Guernica a Espa?a, a pesar de los progresos realizados hacia la democracia, y se?alaba sobre todo el problema vasco, a sus ojos fundamental, precisamente por el tema del cuadro, por lo que no resulta extra?o que la soluci¨®n haya venido precisamente a ra¨ªz de la aprobaci¨®n del proyecto del Estatuto de Guernica.

La comisi¨®n organizadora del centenario de Picasso estar¨¢ presidida por el ministro de Cultura, Clavero Ar¨¦valo, quien podr¨¢ delegar en el director general Javier Tusell, y constar¨¢ de quince personalidades de las artes pl¨¢sticas, historia, cr¨ªtica del arte y museolog¨ªa. Para la venida del Guernica se ha fijado un plazo hasta finales de 1980 o principios de 1981, coincidiendo con la fecha del centenario. Su ubicaci¨®n ser¨¢ el Museo del Prado, conforme a los deseos de Picasso.