Rub¨¦n Cano y Leal siguen sin renovar su contrato

El nuevo acuerdo sobre el sistema de pr¨®rrogas del contrato, que ha sustituido al derecho de retenci¨®n de por vida, es uno de los matices m¨¢s importantes que se barajan en las negociaciones sobre la renovaci¨®n de Rub¨¦n Cano por el Atl¨¦tico. El jugador quiere un a?o, y el club le ofrece tres. El ariete aceptar¨ªa esta posibilidad, pero sin ceder sobre un aumento similar al del ¨ªndice de la vida. Leal, por contra, prefiere tres a?os de contrato y se asegurar¨ªa as¨ª un partido de homenaje. Estas dos renovaciones son las que se presentan m¨¢s problem¨¢ticas para el club. Marcelino, Aguilar y Bermejo tampoco renovaron a¨²n.

Rub¨¦n Cano inicia ahora su cuarta temporada en el Atl¨¦tico. En las anteriores siempre fue el m¨¢ximo goleador del equipo, con veinte, veintiuno y veinte tantos en la Liga. ?Cuando vine del Elche?, afirma Rub¨¦n, ?no pod¨ªa exigir, pero considero que ahora planteo unas peticiones justas. Comprendo la situaci¨®n econ¨®mica del club, pero no va a ser siempre el jugador el que ceda.? Rub¨¦n Cano niega que su primera solicitud fuese de quince millones. ?No ped¨ª esa cantidad. La prueba est¨¢ en que ahora las diferencias econ¨®micas con el club no son excesivas. A ver si dentro de poco se llega a un acuerdo, sobre todo para evitar las suspicacias de los que afirman que nos inventamos lesiones o no trabajamos porque a¨²n no hemos renovado. ?A pesar de estos deseos, no parece f¨¢cil todav¨ªa el acuerdo. Rub¨¦n, que como es l¨®gico no quiere hablar de cifras concretas, ha rebajado bastante sus pretensiones iniciales. La cifra solicitada podr¨ªa superar ahora los siete millones de pesetas. ?El matiz sobre el que no pienso ceder estriba en la diferencia de firmar por uno o por tres a?os. Particularmente me da igual, aunque en principio plante¨¦ mi deseo de hacerlo por una temporada. Ellos prefieren tres, pero ya digo que me da igual. Lo que no har¨¦ ser¨¢ esperar a que pongan una cantidad y aceptarla sin m¨¢s. Si firmo por tres a?os ser¨¢ con la condici¨®n de que cada temporada se me suba el ¨ªndice del aumento del coste de la vida.? Ah¨ª est¨¢ la diferencia mayor con el club. Incluso de esta forma, Rub¨¦n Cano perder¨ªa dinero, por cuanto si firmase por un s¨®lo a?o, al finalizar la pr¨®xima temporada si no llegase a un nuevo acuerdo con la entidad, ¨¦sta deber¨ªa subirle obligatoriamente dicho aumento del coste de la vida, multiplicado adem¨¢s por el baremo correspondiente establecido en el nuevo sistema de pr¨®rrogas, que en su caso ser¨ªa por 1,75. Aunque la nueva norma entr¨® en vigor con fecha 1 de julio, las retenciones en cada club se producen federativamente antes, por lo que en la pr¨¢ctica ser¨¢ a partir del pr¨®ximo a?o cuando se aplique el sistema.

La situaci¨®n de Leal tampoco permite augurar de momento un acuerdo v¨¢lido, aunque sus circunstancias y planteamientos son en cierto modo distintos a los de Rub¨¦n. ?Hace unas fechas me preguntaron si quer¨ªa renovar. Les dije que por supuesto, y me pidieron una cantidad. Yo puse una cifra, y la posterior contraoferta del club no la acept¨¦. ?Obviamente el propio interesado tampoco quiere hablar de dinero, pero lo cierto es que Eugenio Leal solicit¨®, de entrada, once millones por a?o. ?Tengo que reconocer?, asegura el centrocampista internacional, ?que existe bastante diferencia entre lo que pido y lo que me ofrecen. ?

Leal, tres a?os m¨¢s

Leal tiene ahora veintis¨¦is a?os. Le cost¨® tiempo y numerosas cr¨ªticas, llegar a ser titular indiscutible. Ha jugado catorce partidos con la selecci¨®n. ?No soy nig¨²n ni?o ya, es mi momento, no de ganar m¨¢s que nadie, pero s¨ª de acuerdo a lo que creo justo. En mi caso no hay problema de tiempo. Dije que quer¨ªa tres a?os y en eso, s¨ª existe acuerdo. Prefiero esas tres temporadas, porque quiero acabar en el Atl¨¦tico, aunque si firmase por una el a?o pr¨®ximo quiz¨¢ ganase mucho m¨¢s dinero. Tendr¨ªan que subirme por lo menos un 20 ¨® 2,5%, por el ¨ªndice del coste de la vida.?

Por lo que respecta a las otras tres renovaciones pendientes, las de Aguilar y Bermejo, se afirma oficialmente que las diferencias son m¨ªnimas. Ambos quieren dos a?os de contrato, y Aguilar, tres millones por a?o. Marcelino, por contra, pidi¨® inicialmente diez millones, y de momento tampoco existe acuerdo.