El PNV acepta un debate con Herri Batasuna sobre el Estatuto
El Partido Nacionalista Vasco (PNV) y Herri Batasuna (HB), las dos fuerzas m¨¢s representativas en la defensa y el rechazo, respectivamente, del Estatuto de Guernica, que se someter¨¢ a refer¨¦ndum del pueblo vasco en octubre, podr¨ªan enfrentarse en un debate p¨²blico sobre el mismo en fecha pr¨®xima. La iniciativa de HB, aceptada ayer ?con condiciones? por el PNV, puede convertirse en un insospechado inicio de la campa?a propagand¨ªstica en tomo al refer¨¦ndum del Estatuto y al mismo tiempo en un hecho ins¨®lito en la moderna historia de Euskadi.Hay que remontarse al 1 de marzo de este a?o para recordar que Euskadi vot¨® aquel d¨ªa nacionalismo. Las urnas devolvieron al PNV la hegemon¨ªa perdida por escaso margen ante el PSOE el 15 de junio de 1977 y convirtieron, al mismo tiempo, a HB -con m¨¢s de 200.000 votos- en la segunda fuerza vasca de peso, en un ?contrapoder? -como la propia coalici¨®n abertzale gusta definirse-. Dada su postura conocida de rechazo a la reforma Su¨¢rez, a la Constituci¨®n, a la preautonom¨ªa (CGV) y al Estatuto de Guernica, HB se convert¨ªa en un elemento inc¨®modo para el PNV, en la ?otra? alternativa socialista e independentista para los vascos.
Los enfrentamientos entre PNV y HB -que de manera t¨¢cita observaron durante la campa?a electoral una pol¨ªtica de ?no agresi¨®n directa?- hab¨ªan tenido, hasta la aprobaci¨®n en Madrid del Estatuto de Guemica, un car¨¢cter leve y hasta casi anecd¨®tico. Cualquier s¨ªntoma de acuerdo o acercamiento entre ambas fuerzas nacionalistas se evapor¨® el d¨ªa en que se firm¨® el acuerdo entre UCD y el PNV en torno al Estatuto. Los dos bloques, pro y contra el Estatuto de Guernica, quedaron perfectamente delimitados. Encabezando los mismos, PNV y HB, que, tras una primera fase de ?guerra sorda? de declaraciones a favor y en contra del Estatuto, ha concluido con un enfrentamiento pol¨ªtico real, de alcance, con acusaciones directas y descarnadas entre uno y otro.
El detonante de la crisis hay que buscarlo en la rueda de prensa en la que Herri Batasuna anunci¨® su postura abstencionista en el refer¨¦ndum. De una manera muy dura, HB acus¨¦ al PNV de ser ?c¨®mplice? de UCD en la aprobaci¨®n de un Estatuto inaceptable en el que -en opini¨®n de la coalici¨®n abertzale radical- se anula cualquier posibilidad de futura soberan¨ªa para el pueblo vasco, se consagra la presencia de las FOP en Euskadi y se segrega definitivamente a Navarra de las Vascongadas.
La respuesta no se hizo esperar y en t¨¦rminos tambi¨¦n muy cr¨ªticos el PNV, a trav¨¦s de un comunicado, rechaz¨® una por una las acusaciones y calific¨® la posici¨®n abstencionista de HB de ?ignorante, irresponsable y c¨ªnica?. La pol¨¦mica estaba en marcha. Veinticuatro horas m¨¢s tarde, Herri Batasuna, por medio de un comunicado, emplaz¨® al PNV a un debate, libre y p¨²blico, en el que ambas fuerzas puedan exponer sus posturas a favor y en contra del Estatuto de Guemica. En el escrito se afirma que la iniciativa ha surgido en el seno de la coalici¨®n ?ante el pataleo desbocado de los dirigentes del PNV -Euskadi Buru Batzar- que ¨²nicamente se han sabido valer del insulto por el insulto, la fanfarroner¨ªa barata y de la confusi¨®n para contestar los argumentos de rechazo al Estatuto dados en la rueda de prensa de Herri Batasuna?.
?En el supuesto de que no se acepte?, se afirmaba en el comunicado, ?consideramos evidentemente que los autores de dichos insultos se los autoadjudican libremente.? Un portavoz de la coalici¨®n ampliaba luego el contenido del escrito se?alando que, de llevarse a cabo el debate, este debla celebrarse -como condici¨®n ¨²nica- en un lugar de gran aforo, por ejemplo un pabell¨®n deportivo.
El PNV aceptaba ayer el reto de HB, pero imponiendo tambi¨¦n sus condiciones. Considera la direcci¨®n del partido que el debate debe celebrarse en un estudio de radio o televisi¨®n (?para que pueda seguirse en todo Euskadi?). ?Ser¨ªa peligroso?, afirmaron, ?realizar el mismo en un lugar cerrado aunque fuera grande ya que el acaloramiento de las distintas posturas podr¨ªa provocar en los asistentes alteraciones del orden.?
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