El tabaco est¨¢ relacionado con el 90% de los casos de c¨¢ncer de pulm¨®n, seg¨²n la OMS

No por capricho, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), ha escogido como lema del pr¨®ximo D¨ªa Mundial de la Salud, para junio de 1980: ?Tabaco o salud, elija?. Las investigaciones cient¨ªficas, definitivamente, han permitido la constataci¨®n, por el consumo del tabaco, de c¨¢nceres pulmonares, ¨²lceras gastroduodenales, trastornos circulatorios, infartos de miocardio, riesgos para los reci¨¦n nacidos... La OMS, con el lema acordado, no s¨®lo quiere llamar la atenci¨®n de los consumidores de tabaco, sino tambi¨¦n de los Gobiernos, que hasta ahora han sido ?sordos y ciegos? ante este problema. Alejandro Fush informa desde Ginebra.

Una reciente publicaci¨®n de la OMS, El tabaco, un problema de todos, de Nedd Willard (del departamento de informaci¨®n p¨²blica de la Organizaci¨®n, encargado de la informaci¨®n sobre el D¨ªa Mundial de la Salud para 1980), indica que Estados Unidos sigue a la cabeza de los pa¨ªses consumidores de tabaco con un promedio anual, de m¨¢s de 2.700 cigarrillos por habitante; Europa occidental ocupa el segundo lugar de la lista, con niveles anuales que fluct¨²an entre mil y 2.000 cigarrillos por habitante.En el caso de las mujeres fumadoras, el consumo diario oscila entre diez y cincuenta cigarrillos diarios, constat¨¢ndose que la difusi¨®n del h¨¢bito de fumar en el sector femenino va en aumento, mientras que en la poblaci¨®n masculina se observa una ligera tendencia decreciente. Las estad¨ªsticas revelan que con el n¨²mero de mujeres fumadoras aumenta la incidencia de casos femeninos de c¨¢ncer de pulm¨®n y de cardiopat¨ªas coronar¨ªas.

Otras revelaciones del trabajo de la OMS: en B¨¦lgica fuman la mitad de los ni?os de quince a?os y en la Rep¨²blica Federal de Alemania, el 36 % de los ni?os, de diez a doce a?os, ?son fumadores avezados que no pueden prescindir del cigarrillo?. En Italia, la proporci¨®n de fumadores es del 60% entre los ni?os varones de quince a?os.

En su trabajo, Nedd Williard define el consumo de cigarrillos como ?un h¨¢bito personal y un uso social, una manera de entablar amistades y de matar el tiempo?, pero sirve de base -agrega- a una poderos¨ªsima industria transnacional, que emplea los m¨¦todos m¨¢s modernos de producci¨®n y persuasi¨®n, y cuya red de puntos de venta se extiende pr¨¢cticamente a la totalidad de los lugares del planeta en los que a alguien puede apetecerle inhalar unas buenas bocanadas de humo.

Seg¨²n la OMS, la industria del tabaco ?sigue prosperando y est¨¢ en plena expansi¨®n?: en 1976, la producci¨®n mundial de cigarrillos fue de tres billones 850 millones de unidades. Por otra parte, las ?sirenas de la publicidad? -se afirma- siguen cantando en todo el mundo las alabanzas del tabaco con voz clara, firme y persistente: ?El hombre que triunfa fuma cigarrillos.?

En los pa¨ªses donde el consumo de cigarrillos est¨¢ muy generalizado, la mortalidad por c¨¢ncer aumenta constantemente. Es la conclusi¨®n, ya definitiva, a que han llegado los estudios de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, en los que se afirma que el tabaco est¨¢ relacionado con el 90% de los casos de c¨¢ncer de pulm¨®n, enfermedad que, por el contrario, tambi¨¦n se subraya, ?todav¨ªa es muy poco frecuente en las poblaciones donde el h¨¢bito de fumar ha empezado a difundirse en fecha reciente ?.

En el trabajo de Nedd Willard, en forma resumida, se aborda el problema de los males que acarrea el tabaco, haci¨¦ndose hincapi¨¦ en que los peligros no son imaginarios: ?La mayor propensi¨®n de los fumadores a contraer el c¨¢ncer de pulm¨®n y otras neumopat¨ªas obstructivas representa un factor de riesgo suplementario en la exposici¨®n de atm¨®sferas contaminadas, especialmente en ciertos lugares de trabajo.? Tambi¨¦n se asegura que ?es un factor de riesgo importante el h¨¢bito de fumar en relaci¨®n con el infarto de miocardio y con las isquemias de las extremidades inferiores, que entre los j¨®venes parecen exclusivamente reservadas a los fumadores?.

Por otra parte, se ha constatado estad¨ªsticamente que las ¨²lceras gastroduodenales son dos veces m¨¢s frecuentes entre los fumadores que entre las personas que no fuman, y lo mismo ocurre con el c¨¢ncer de vejiga entre los varones.

Otra constataci¨®n indica que el desarrollo fetal, se retrasa en el caso de las mujeres embarazadas que fuman y sus hijos est¨¢n m¨¢s expuestos a morir inmediatamente despu¨¦s del parto que los hijos de madres no fumadoras. El riesgo de mortalidad prenatal aumenta en proporci¨®n de un tercio entre los hijos de mujeres que fuman regularmente despu¨¦s del cuarto mes de la gestaci¨®n. Tambi¨¦n es mayor el riesgo de peso natal insuficiente, de defectos cong¨¦nitos y de enfermedades, entre los hijos de mujeres fumadoras. Finalmente, en torno a este mismo tema de la maternidad, se califica de ?indudable? la relaci¨®n estad¨ªstica entre frecuencia de abortos espont¨¢neos y consumo de cigarrillos de las embarazadas.

Investigando en un campo m¨¢s general sobre los efectos del tabaco, en la publicaci¨®n de la OMS se sostiene que, dada la gran variedad de amenazas que pesan sobre la salud de los fumadores, no es de extra?ar que sus tasas de absentismo laboral sean mucho m¨¢s elevadas que las del resto de los trabajadores. De un estudio efectuado en Polonia se desprende que los fumadores padecen 3,5 veces m¨¢s enfermedades y dos veces m¨¢s accidentes, que los no fumadores.