El Festival de Cine de Humor de La Coru?a se plantea su superv¨ªvencia
Les petites fugues (Las peque?as fugas), del suizo Ives Yersin, gan¨® el premio a la mejor pel¨ªcula presentada en el VII Festival Internacional de Cine de Humor Ciudad de La Coru?a. Su principal protagonista, Michel Robin, mereci¨®, adem¨¢s, el premio a la mejor interpretaci¨®n masculina. El festival propiamente dicho termin¨® con un replanteamiento de su supervivencia.
La mejor direcci¨®n fue atribuida al checo Oldrich Lispsk, por su trabajo en Adela no ha cenado todav¨ªa. La mejor interpretaci¨®n femenina fue para la brasile?a Zeze Motta, por su papel en Xica da Silva, pel¨ªcula que gan¨® tambi¨¦n el premio al mejor gui¨®n de humor. El mejor gag correspondi¨® a la pel¨ªcula checoslovaca ya citada, y los mejores efectos de humor, a la espa?ola Tres en raya. La mejor interpretaci¨®n femenina secundaria se atribuy¨® a Irene Guti¨¦rrez Caba, por su labor en Tres en raya. Angel Pel¨¢ez y Fernando Trueba compartieron el premio al mejor cortometraje con sus pel¨ªculas El globero y Homage a trois, respectivamente.El festival termin¨® con la esperanza de que sus futuras ediciones puedan marcar el desarrollo que necesita y con la impresi¨®n de que este a?o se hicieron un poco mejor las cosas. Qued¨® claro, de todas maneras, que el Ciudad de La Coru?a no ha logrado ser todav¨ªa una aut¨¦ntica ocasi¨®n de mostrar al p¨²blico y al mercado cinematogr¨¢fico cu¨¢les son los caminos por los que marchan la industria y la cultura del cine. Esto se hizo de tal modo patente que ya se plantea incluso la propia supervivencia del festival. Los organizadores adquirieron plena conciencia de que no se puede seguir haci¨¦ndolo como hasta ahora. El propio concepto b¨¢sico del certamen, cine de humor, es cuesti¨®n a revisar, o incluso a cambiar radicalmente antes de seguir reproduciendo una y o tra vez esquemas t¨®picos sobre lo que es o deja de ser cine de humor.
Para ello se piensa en la composici¨®n de un patronato encargado de plantear seriamente las posibilidades y de programar, con tiempo y medios las futuras ediciones.
Experiencia negativa
La experiencia no ha sido nada positiva, ni mucho menos creadora, en lo que se refiere a la primera edici¨®n de la llamada Mostra de Cine de las Nacionalidades y Regiones. De entrada, naci¨® ya con una evidente crisis de identidad que hace inexplicable el hecho de que determinados cortometrajes, los producidos en Madrid, por ejemplo, no hayan tenido cabida, mientras otros, de similares caracter¨ªsticas, pero de calidad sensiblemente inferior, se mostraron como ejemplo de lo que se est¨¢ haciendo en Catalu?a, Andaluc¨ªa o el Pa¨ªs Vasco. No cabe la menor duda de que en esto la organizaci¨®n fall¨® estrepitosamente. Respondi¨®, sin embargo, el p¨²blico, que a veces acudi¨® masivamente.En cuanto a la pel¨ªcula ganadora del certamen, lo primero que sobresale es que el fallo del jurado fue absolutamente bien recibido por el p¨²blico y por la cr¨ªtica del festival. No en vano el filme tiene incluso algunas resonancias propiamente gallegas, y conviene no olvidar que el festival se celebra en Galicia, en tanto que Las peque?as fugas trata un tema perfectamente traspasable a la realidad del mundo rural gallego, desde formas cinematogr¨¢ficas claramente inteligibles desde aqu¨ª.
En el orden, m¨¢s que nada, anecd¨®tico del festival hay que se?alar que la proyecci¨®n de El imperio de los sentidos, del japon¨¦s Oshima, en la sesi¨®n de clausura, levant¨® ardientes cr¨ªticas contrarias en los sectores conservadores de la ciudad. Algunas personas abandonaron el cine y menudearon los comentarios de que la pel¨ªcula de Oshima no es otra cosa que un filme estrictamente pornogr¨¢fico. Contra esta opini¨®n se registr¨® la actitud de un buen n¨²mero de personas que llegaron, incluso, a manifestarse frente al cine Valle-Incl¨¢n ante la imposibilidad de obtener entradas.
Babelia
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