Los saharauis ocupan el extremo suroriental de Marruecos
El Ej¨¦rcito marroqu¨ª abandon¨® su base de Lebuirat despu¨¦s del ataque del Frente Polisario del pasado 24 de agosto. Ahora Lebuirat, que lleg¨® a albergar 1.500 soldados marroqu¨ªes, es una ciudad fantasma.Marruecos ha perdido su dispositivo defensivo en el extremo suroriental del pa¨ªs, y s¨®lo el Ej¨¦rcito saharaui es due?o de la situaci¨®n en la zona,
Hemos llegado hasta aqu¨ª con una patrulla del Frente Polisario. Detr¨¢s han quedado m¨¢s de trescientos kil¨®metros a trav¨¦s del desierto, hechos en un Land-Rover que, precisamente, hab¨ªa pertenecido al Ej¨¦rcito marroqu¨ª hasta el d¨ªa de la batalla de Lebuirat.
Ni en el Sahara (te¨®ricamente ocupado por Marruecos) ni en el mismo Marruecos hemos podido ver ni rastro del Ej¨¦rcito de Hassan II. S¨®lo algunas patrullas del Polisario, alg¨²n escorpi¨®n, el aullido de las hienas y unas pocas v¨ªboras. Hemos dormido en un oasis, ya dentro de las originarias fronteras marroqu¨ªes. Ni un avi¨®n, ni un helic¨®ptero enemigo han venido a visitamos.
Pasa a p¨¢gina 4
El Ejercito marroqu¨ª est¨¢ desmoralizado
(Viene de primera p¨¢gina)En las cercan¨ªas de Lebuirat quedan a¨²n abundantes rastros de la batalla. Hemos contado hasta 51 blindados marroqu¨ªes destruidos. Aun hoy, tres semanas despu¨¦s de la batalla, se pueden encontrar cad¨¢veres entre la arena. La lucha tuvo que ser muy dura. ?Es el Dien Bien Fu marroqu¨ª?, nos dec¨ªa un viejo periodista franc¨¦s que formaba tambi¨¦n parte de la expedici¨®n.
Cuando el Frente Polisario dijo que controlaba esta zona de Marruecos, nadie le crey¨®. Era algo demasiado grave para ser cierto. Ahora lo hemos podido apreciar con nuestros propios ojos. S¨®lo la desmoralizaci¨®n de las fuerzas marroqu¨ªes puede explicar el resultado de la batalla. Lebuirat se encuentra en un valle y estaba defendido por treinta posiciones situadas en lo alto de las,colinas que la rodean. Pero los oficiales estaban hartos ya de pedir la renovaci¨®n del armamento, sin ser escuchados, seg¨²n nos ha confesado un oficial de L¨¦buirat, hoy prisionero del Polisario.
Los soldados llevaban ya 43 meses en el desierto y s¨®lo hab¨ªan tenido 45 d¨ªas de vacaciones. La escueta paga les llegaba con mucho retraso. En una de las posiciones hemos podido leer el borrador de la carta que un soldado dirig¨ªa a su mujer e hijos: ?Llevo ya varios meses sin cobrar. En cuanto me den algo de dinero os mandar¨¦ 3.000 dirhams (unas, 45.000 pesetas).? Buena parte de la tropa proced¨ªa del norte de Marruecos, una tierra monta?osa y pobre que nada tiene que ver con el desierto.
El Polisario ha cumplido su amenaza de luchar contra los'marroqu¨ªes en su propio pa¨ªs, una vez que ¨¦stos ocuparon Dajla (Villa Cisneros), despu¨¦s del abandono mauritano.
Hoy, aqu¨ª, en el desierto, no se descarta que contin¨²e la ofensiva.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.