Craxi propone la reforma global del Estado italiano

Bettino Craxi, secretario general del Partido Socialista italiano lanz¨® ayer, en primera p¨¢gina del ¨®rgano oficial del partido, L'Avanti, en un editorial firmado de cinco folios, una propuesta de reforma global del Estado.Toda la prensa ha dado gran importancia, destac¨¢ndolo en primera p¨¢gina, a este desaf¨ªo del original y activo l¨ªder socialista. Se puede decir que ha sido la primera vez que L'Unit¨¢, ¨®rgano oficial del Partido Comunista, ha dado un relieve muy significativo a una iniciativa de Craxi. Y a las pocas horas del art¨ªculo del secretario socialista se ha reunido la direcci¨®n comunista.

Seg¨²n Craxi, ?Italia est¨¢ en una encrucijada hist¨®rica? y s¨®lo con un trabajo de profunda transformaci¨®n de las instituciones pol¨ªticas, econ¨®micas, sociales y morales puede pretender un puesto en la nueva Europa. Craxi propone, pues, en su ?manifiesto? una gran alianza de todas las fuerzas vivas y democr¨¢ticas del pa¨ªs para cambiar la Constituci¨®n, el Estado y la econom¨ªa y para devolver al pa¨ªs la dignidad moral de la ?justicia y de la verdad?, porque si es verdad que ?ltalia es uno de los pa¨ªses m¨¢s libres del mundo, tambi¨¦n lo es?, dice el l¨ªder socialista, ?que demasiadas inmoralidades y el mal uso de la misma libertad oscurecen una toma de conciencia colectiva para la preparaci¨®n de un futuro m¨¢s sereno?.

Dejemos, pues, dice Craxi, de seguir discutiendo sobre f¨®rmulas de gobierno y preparemos una reforma a fondo de las instituciones a trav¨¦s del Parlamento. Este tiene el poder para hacerlo. El edificio de la Constituci¨®n italiana ha demostrado, dice Craxi, ser fuerte y s¨®lido, pero hasta los monumentos m¨¢s consistentes y robustos se desgastan con el tiempo. Y a?ade que el pa¨ªs siente ya la necesidad de una ?verificaci¨®n hist¨®rica? de sus instituciones.

Esta reforma debe abarcar la Administraci¨®n p¨²blica del Estado, la econom¨ªa y la moral de los gobernantes. De otro modo, dice Craxi, el pa¨ªs ser¨¢ cada d¨ªa m¨¢s ingobernable, la separaci¨®n entre sociedad civil y clase pol¨ªtica m¨¢s profunda y las instituciones acabar¨¢n muriendo por inmovilismo. Y si el ?presidencialismo? es un bizantinismo sin sentido, el inmovilismo no es un mal peor.

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