Entrevista con Josep Tarradellas

( ... ) Pregunta. Otro tema candente es el del Estatut. ?Qu¨¦ piensa realmente cuando opina sobre el mismo?Respuesta. Justamente, ya han visto que no he contestado a diversas campa?as que se hacen. Pero tengo que recordar que en el mes de diciembre, en las diversas discusiones que hubo, ya dije, de una manera clara y precisa, que era conveniente que Catalu?a tuviera un Estatut; que a trav¨¦s de las reuniones que tuvimos con los diputados, en el decreto que firm¨¦ al. constituir la ponencia y la comisi¨®n para discutir en el Parlamento y en todas partes, se puede volver a leer que yo dije que hab¨ªa que votar el Estatut. Y lo he dicho docenas de veces. Lo que es fant¨¢stico en todo esto es que los que nunca han dicho nada me acusan de que yo no quiero el Estatut. Lo he defendido siempre y nadie puede decir lo contrar¨ªo. Lo que ocurre es que al decir que hay que votar el Estatut no significa que yo no sea libre para decir lo que pienso, como muchos diputados y la comisi¨®n que lo ha aceptado, que han dicho que no les gusta. El Estatut de Catalunya no gusta a nadie: ni a los diputados, ni a los senadores, ni a m¨ª, ni a Su¨¢rez.

P. Ya que usted ha hablado de transferencias, acaso seria conveniente que realizara un balance de estos dos a?os de vida del Consell Executiu.

R. Las transferencias a esta Generalitat ser¨¢n la gran sorpresa que tendr¨¢n nuestros ciudadanos, aunque sobre esto no quiero decir nada todav¨ªa. Muchas veces siento una gran tristeza de que no se hable de ellas como deber¨ªa hacerse. Es enorme y nunca ser¨¢ suficiente el elogio que puedo hacer a los siete consellers t¨¦cnicos que, sin medios, sin preparaci¨®n de ninguna clase, sin funcionarios que supieran c¨®mo y de qu¨¦ manera se hac¨ªan los traspasos de servicios, con una generosidad, con una inteligencia y lucidez extraordinarias, han hecho que las transferencias que tiene la Generalitat y que son muy importantes, mucho m¨¢s importantes que el Estatut que tendremos, han preparado el futuro de Catalu?a.

P. Necesitamos una voz de esperanza. Usted, se?or presidente, con su larga traves¨ªa del desierto, ha sido un hombre que confiaba. ?Cu¨¢l es su esperanza en el futuro de Catalu?a?

R. Estoy seguro de que Catalu?a ir¨¢ adelante. Tendremos dificultades. Que la gente no se haga ilusiones y piense que teniendo el Estatut tiene la panacea. El Estatut costar¨¢ por muchas razones. No por nosotros, sino por el Gobierno, que es posible que cuando est¨¦ aprobado cambie su pol¨ªtica en relaci¨®n a Catalu?a. Esto ya ocurri¨® la otra vez. No hablo del Gobierno del se?or Su¨¢rez, para quien todos los elogios son pocos; porque, permitidme que os lo diga, todos los acuerdos Su¨¢rez-Tarradellas del a?o 1977, del a?o 1978 y del a?o 1979 se han cumplido. No tengo nada que decir. Mi reconocimiento es fervoroso y creo que con otro presidente en el Gobierno de Espa?a habr¨ªa sido imposible que yo estuviera aqu¨ª. ( ... )

No tenemos ninguna fuerza pol¨ªtica para hacerlo, no tenemos ninguna raz¨®n de primer plano, pero tenemos una cosa importante que es la unidad. Por eso obstinadamente hablo de nuestra unidad y es necesario que esta unidad contin¨²e porque si continuamos esta unidad, sea el que sea el gobierno que haya en Espa?a, nosotros podemos tener muchas cosas con rigor, con sensatez, pero demostrando que somos capaces y que tenemos gente dispuesta a ponerse al frente de la Administraci¨®n.

, 7 de octubre