Hipergranada, desaf¨ªo a la autoridad municipal

Lo que ya se conoce en Granada como ?el tema del hiper? no s¨®lo tiene dividida de forma casi irreconciliable a la Corporaci¨®n municipal, hasta el punto de haber provocado su primera y grave crisis, con la dimisi¨®n del alcalde, Antonio Camacho, del PSOE, sino que ha mermado al m¨¢ximo la autoridad del Ayuntamiento granadino, ha dejado en evidencia la capacidad y voluntad de hacer cumplir la ley por parte del gobernador civil y el actual alcalde en funciones, del PSA, y, lo que es m¨¢s importante, podr¨ªa terminar dando al traste con el pacto municipal de izquierdas no s¨®lo en Granada, sino, incluso, en toda Andaluc¨ªa.

?Si alg¨²n d¨ªa llegan a demoler el hiper, que no creo que llegue el caso, tendr¨ªan que hacerlo sobre nuestras propias cabezas, porque ninguno de los 150 socios de esta cooperativa pensamos movernos de aqu¨ª?, declaraba ayer a EL PAIS el presidente de Hipergranada, Rogelio Rodr¨ªguez, mientras se?alaba desde su despacho la sala de ventas del ?legal centro comercial, completamente abarrotada de p¨²blico.Inauguradas precipitadamente hace dos d¨ªas -aprovechando una reciente violaci¨®n de los precintos municipales a que se hallabas -metido, as¨ª como la circunstancia de que la alcald¨ªa se encuentre de forma provisional en manos del PSA-, las instalaciones del hiper carecen, en efecto, de la preceptiva licencia municipal de obras y de la de apertura al p¨²blico; pesa, finalmente, sobre el edificio una orden del alcalde en funciones para su cierre inmediato, cuyo plazo legal de ejecuci¨®n voluntaria se cumple esta noche.

Terrenos de protecci¨®n agr¨ªcola

El edificio comercial construido por Hipergranada, junto a la confluencia de las carreteras de Badajoz y M¨¢laga, se encuentra situado en terrenos no urbanizables de la zona 16 del Plan General de la comarca de Granada, calificados como suelo agr¨ªcola de protecci¨®n, en donde s¨®lo se permite levantar edificios directamente relacionados con las actividades agr¨ªcolas.Aunque existe una excepci¨®n que permite construir en terrenos r¨²sticos (como los de la zona 15 del Plan) ciertos edificios de car¨¢cter social, asistencial o tur¨ªstico, previa aceptaci¨®n por la Comisi¨®n Provincial de Urbanismo, Hipergranada no puede acogerse a la misma por pertenecer sus solares a terreno agr¨ªcola de petici¨®n y no haber aprobado nunca sus obras la Comisi¨®n de Urbanismo.

Otra de las posibles excepciones previstas en el Plan se refiere a edificaciones al servicio de la carretera (restaurantes, cafeter¨ªas, hoteles, paradores, gasolineras, puestos sanitarios o zonas deportivas) y dentro de una franja no superior a los cien metros, ninguno de cuyos requisitos cumplen tampoco las instalaciones del hiper, para cuya legalizaci¨®n s¨®lo cabr¨ªa, en teor¨ªa, una modificaci¨®n del Plan General.

Seg¨²n el Colegio de Arquitectos, sin embargo, ¨¦sta habr¨ªa de atenerse a lo previsto en los art¨ªculos 49 y 50 de la nueva ley del Suelo, donde se especifica que no se pueden incrementar los vol¨²menes edificables (0,2 metros c¨²bicos por metro cuadrado) y que la tramitaci¨®n habr¨ªa de ser la misma que la requerida por el Plan, desde su aprobaci¨®n inicial por la Corporaci¨®n municipal, con el voto favorable de dos tercios de sus miembros, hasta su aprobaci¨®n definitiva por la Comisi¨®n Central de Urbanismo, pasando por un plazo de informaci¨®n p¨²blica, proceso que tampoco se ha seguido en este caso.

Urban¨ªsticamente, pues, la situaci¨®n del hiper no s¨®lo es ilegal, sino que su posible legalizaci¨®n pasa por una modificaci¨®n del Plan Comarcal de compleja y dilatada tramitaci¨®n y no menos dif¨ªcil justificaci¨®n, de acuerdo con el citado colegio. El proyecto, adem¨¢s, si es que est¨¢ redactado, no ha sido al menos visado urban¨ªsticamente por colegio profesional alguno, requisito que tambi¨¦n exige la ley.

Petici¨®n de recalificaci¨®n de la zona

A pesar de tan evidentes impedimentos legales, los directivos de Hipergranada no dudaron un momento a la hora de escoger los citados terrenos para la ubicaci¨®n de su futuro negocio, como tampoco a la de ponerse a construir sin licencia. ?Por un lado?, explica ahora el presidente de la cooperativa, ?se trataba de los terrenos id¨®neos, por su situaci¨®n privilegiada, a pocos kil¨®metros de la ciudad y junto a dos de las principales carreteras de acceso. Adem¨¢s eran aut¨¦nticos eriales desde hace doce a?os, por lo que no se ha perjudicado a la agricultura de la vega. Por otro lado, siempre pensamos que terminar¨ªan legalizando nuestra situaci¨®n, como pas¨® con el motel Alcano, al otro lado de la carretera, y con tantas otras edificaciones que existen en la misma zona 16 del Plan.?Lo cierto es que, en noviembre del pasado a?o, Hipergranada solicit¨® al Ayuntamiento la aprobaci¨®n de un anteproyecto de nueva planta, al amparo de la excepci¨®n tercera del Plan Comarcal, petici¨®n que ser¨ªa negativamente resuelta por la Comisi¨®n Central de Urbanismo al cabo de varios meses, si bien esta resoluci¨®n no lleg¨® nunca a comunicarse a los interesados, de manera oficial.

Apenas incorporados a sus puestos en el Ayuntamiento los miembros de la nueva Corporaci¨®n democr¨¢tica, el d¨ªa 20 de abril, la cooperativa tramit¨® otro expediente, pidiendo recalificaci¨®n de la zona y, en concreto, la parcela que hab¨ªa de ocupar el hiper. Esta petici¨®n tampoco ha sido a¨²n oficialmente contestada, si bien es cierto que la ley no obliga al Ayuntamiento a hacerlo.

Mientras tanto, las obras de explanaci¨®n y movimiento de tierras hab¨ªan empezado hac¨ªa varias semanas sin la preceptiva licencia municipal, motivo por lo que el alcalde decret¨® la paralizaci¨®n de las mismas, con fecha 7 de mayo. La orden, cuyo recib¨ª y enterado no lleg¨® a ser firmado por el presidente de la sociedad, s¨®lo se hizo efectiva durante varios d¨ªas, y posteriormente continuaron los trabajos como si nada hubiera pasado.

?Lo que ocurri¨® fue que ten¨ªamos que indemnizar a la constructora con mill¨®n y medio de peseta por cada d¨ªa de inactividad?, dice Rogelio Rodr¨ªguez. ?Adem¨¢s, el propio teniente de alcalde delegado de Urbanismo, Antonio Jara del PSOE, nos dijo que se trataba de un simple tr¨¢mite, para ¨¦l cubrirse las espaldas y que el asunto se resolver¨ªa lo antes posible.?

Puerta abierta para la invasi¨®n de la vega

A finales de mayo, sin embargo, el Ayuntamiento abri¨® un expediente sancionador contra Hipergranada y nombr¨® instructor del mismo al teniente de alcalde Jos¨¦ Miguel Castillo, del PCE. Dos meses m¨¢s tarde, Antonio Jara dej¨® entrever. p¨²blicamente la posibilidad de que las obras fuesen demolidas, por ?carecer de licencia municipal y constituir una grave infracci¨®n de la ley del Suelo?, comenzando as¨ª lo que no tardar¨ªa ya en convertirse en una verdadera guerra dial¨¦ctica entre los promotores del hiper y la Comisi¨®n Municipal de Urbanismo.Una guerra de la que, por otra parte, EL PAIS ha venido informando cumplidamente durante los ¨²ltimos meses, muy en particular esta ¨²ltima semana; que ha provocado una profunda divisi¨®n en la Corporaci¨®n granadina y ha puesto incluso en entredicho el pacto municipal de la izquierda, con el PSA a favor de la legalizaci¨®n del hiper y PSOE y PCE a favor de su demolici¨®n; que ya se ha cobrado su primera v¨ªctima importante en la persona de Antonio Camacho, quien ha preferido la dimisi¨®n como alcalde ?por motivos personales de salud?, antes de firmar el decreto de demolici¨®n del edificio, como propugna su partido, y en la que, finalmente, Hipergranada acaba de apuntarse una importante victoria parcial con su apertura por las bravas del pasado viernes.

A pesar de sus declaradas intenciones de respeto por la legalidad, lo cierto es que Hipergranada ha estado practicando desde el principio una pol¨ªtica de hechos consumados, como ?se ven¨ªa hacienda durante el r¨¦gimen anterior?, seg¨²n se?al¨® recientemente el diputado socialista y catedr¨¢tico de Derecho, Jos¨¦ Vida.

?Los promotores del hiper no s¨®lo est¨¢n violando flagrantemente la ley?, ha declarado el profesor Vida, ?sino que est¨¢n poniendo a prueba, una y otra vez, la autoridad y legitimidad de una Corporaci¨®n municipal democr¨¢ticamente elegida. Y no s¨®lo esta Corporaci¨®n, sino tambi¨¦n las que le sigan estar¨¢n ya hipotecadas en sus actuaciones por lo que se decida frente a esta ilegalidad?.

Estas y otras razones de peso, tan importantes a veces como la de frenar la invasi¨®n especulativa de la vega granadina, son las que han llevado al PSOE y PCE a pronunciarse taxativamente desde un principio por la demolici¨®n de lo construido, a pesar del posible inter¨¦s social que se reconoce al centro comercial y a sabiendas que habr¨¢, entre sus cooperativistas, perjudicados de buena fe.

Razones para la legalizaci¨®n

El PSA, por su parte, no est¨¢ de acuerdo en como se ha llevado el asunto del hiper por la Corporaci¨®n municipal. Seg¨²n su portavoz en el Ayuntamiento y actual alcalde en funciones, Arturo Gonz¨¢lez Arcas, si en su d¨ªa se hubiera ejercido la autoridad municipal, la acci¨®n judicial y la acci¨®n p¨²blica, se habr¨ªa evitado con toda seguridad la construcci¨®n del centro, sin que ello supusiera la ruina para los 150 cooperativistas, todos ellos peque?os comerciantes y trabajadores, por lo que ahora s¨®lo cabe ya la recalificaci¨®n de la parcela, no sin ciertas condiciones.?Los andalucistas votar¨ªamos sin dudarlo por la demolici¨®n del hiper, siempre y cuando se hiciera otro tanto con todos los edificios sin licencia que hay dentro de la misma zona 16 del Plan Comarcal, algunos incluso de promoci¨®n oficial o p¨²blica?, ha declarado el se?or Gonz¨¢lez Arcas.

Para UCD, el conflicto le viene pol¨ªticamente como anillo al dedo, con la izquierda dividida y tir¨¢ndose entre s¨ª los trastos, situaci¨®n que, seg¨²n su secretario provincial, Andr¨¦s Villatta, les puede beneficiar electoralmente, por lo que de momento procuran mantenerse al margen de toda pol¨¦mica. No obstante, con su votaci¨®n contradictoria y negativa a las dos propuestas alternativas del expediente sancionador (demolici¨®n con multa o recalificaci¨®n tambi¨¦n con multa), son los responsables indirectos de la actual situaci¨®n y de que el edificio no entrara en v¨ªas de legalizaci¨®n.

Seg¨²n el Colegio de Arquitectos, no queda ahora m¨¢s salida que la firma del decreto de demolici¨®n, bien por parte del alcalde o, en su defecto, del gobernador civil, de acuerdo con la ley del Suelo.