La RFA suaviza la postura brit¨¢nica sobre la CEE

La Rep¨²blica Federal de Alemania apoyar¨¢ a Gran Breta?a en el deseo de esta de abandonar el papel de primer contribuyente de las Comunidades Europeas. Antes de que Margaret Thatcher, primera ministra brit¨¢nica, concluyese su fulgurante visita de un d¨ªa a Bonn, el canciller Helmut Schmidt hab¨ªa logrado de la premier que suavizase su ultim¨¢tum concretado en el abandono de Gran Breta?a de su pertenencia a las Comunidades, si no se atend¨ªa este deseo.La RFA, segundo contribuyente a la CEE, no est¨¢ dispuesta a perder, ni siquiera hipot¨¦ticamente y por v¨ªa de ultim¨¢tum, la presencia brit¨¢nica en el seno de la Europa integrada, aunque nada m¨¢s sea para impedir el desequilibrio que ello significar¨ªa en el contexto de una mitad anglosajona y sajona, al Norte, y latina al Sur.

La lady de Hierro ha suavizado posteriomente su ultim¨¢tum de mediados de octubre, y ello en base a las garant¨ªas alemanas que ya se le anticiparon d¨ªas pasados. Margaret Thatcher ha venido a Bonn, seg¨²n parece, para desde aqu¨ª dar cuerpo a su confianza en la ayuda alemana. El Gobierno federal ha apreciado una ?correcci¨®n indirecta? en la anterior postura de la premier brit¨¢nica, y al tiempo ha sugerido la conveniencia de que se establezca ? una modificaci¨®n en el mecanismo de correcci¨®n?, por el que se resuelve satisfactoriamente en la Comunidad Europea a favor de los pa¨ªses excesivamente recargados en alg¨²n cap¨ªtulo econ¨®mico.

No hace un mes el jefe de Gobierno italiano, cuyo pa¨ªs es el m¨¢s beneficiado por la ayuda de la CEE, trat¨® de anticiparse a lo que podr¨¢ ocurrir en Dubl¨ªn, insistiendo en que las subvenciones a la agricultura mediterr¨¢nea no pod¨ªan recortarse.

Margaret Thatcher opina exactamente lo contrario: la industria, empezando por la brit¨¢nica, es el sector que m¨¢s respaldo tendr¨ªa que tener. Pero en esto los alemanes tambi¨¦n disienten parcialmente. Si Gran Breta?a se ve afectada por su papel de primer transfusor, de ayudas, es porque su industria padece graves fallos organizativos. Bonn opina que las reservas petrol¨ªferas brit¨¢nicas del mar del Norte deber¨ªan servir tambi¨¦n, y sobre todo, para subsanar los fallos econ¨®micos brit¨¢nicos en cuanto al apoyo efectivo que podr¨ªa prestar Bonn a Londres en la conferencia del Consejo Europeo en Dubl¨ªn.