Ra¨²l Castro habla de "ajustar cuentas" en Cuba
En los pr¨®ximos meses se producir¨¢n numerosos relevos en puestos de importancia del aparato estatal y del Partido Comunista cubano, sin llegar a una campa?a de depuraciones total. Fuentes bien informadas manifestaron que ?los rumores que exist¨ªan en c¨ªrculos pol¨ªticos desde hace meses se van a ver cumplidos sin tardar mucho?.El primer toque de advertencia lo dio el propio Fidel Castro, quien, en su discurso conmemorativo del 26 de julio, exalt¨® la necesidad de llevar a cabo un completo programa de lo que se podr¨ªa llamar ?autocr¨ªtica o exigencia?.
Los que pensaban entonces que se trataba de meras palabras estaban en un error, pues al discurso del presidente cubano le siguieron numerosas apariciones en los medios informativos de quienes ped¨ªan que la ?exigencia? fuese el motor de la revoluci¨®n en este pr¨®ximo a?o.
En el conjunto de declaraciones pol¨ªticas nacionales e internacionales no ha pasado inadvertido que el segundo secretario del partido, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de ministros y verdadero n¨²mero dos de Cuba, Ra¨²l Castro, ha anunciado los g¨¦lidos vientos depuratorios. Ra¨²l Castro, hermano de Fidel, ha hablado de ?ajustar cuentas?, y ha citado a ?algunos de los que evaden enfrentar los problemas, m¨¢s preocupados por conservar los cargos?.
Tambi¨¦n no hace mucho, la ministro de la Industria Ligera, Nora Frometa, utiliz¨® la palestra de un acto sin importancia para pedir m¨¢s exigencia y para anunciar, por vez primera, que los errores se pagan, y se van a pedir cuentas.
Esas palabras aparecieron en el diario Granma, en portada, y quien conoce Cuba sabe que un ministro no lanza discursos de este tipo sin m¨¢s, mientras que el ¨®rgano del comit¨¦ central del Partido Comunista tampoco los reproduce por ligereza.
Los c¨ªrculos pol¨ªticos cubanos comentan la necesidad que tiene el pa¨ªs de limpiar los propios errores cometidos por quienes se amparan en los puestos y desde ellos amparan la indisciplina laboral, no deshacen lo mal hecho y tampoco aceptan la autocr¨ªtica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.