Composici¨®nes de Moreno Torroba y Strawinsky

Con ¨ªmpetu ejemplar, extraordinaria vitalidad e ilusionada vocaci¨®n, el maestro Federico Moreno Torroba se acerca a los noventa a?os (naci¨® en Madrid, en 1891). No deja de componer, tanto en el campo que le granje¨® mayor popularidad -el teatro l¨ªrico- como en otro al que ha dado un centenar de obras: la guitarra. As¨ª, mientras esperamos el estreno de El poeta, en la pr¨®xima temporada de ¨®pera, recibimos el Concierto Ib¨¦rico, para cuatro guitarras y orquesta.Estrenado en Canad¨¢ (1976), el Concierto ha sonado por muy diversos lugares de Am¨¦rica, hasta Regar al reciente ¨¦xito en el Festival Hollywood Bowl, protagonizado, con el compositor, por el director Jes¨²s L¨®pez Cobos. Como dato curioso anotaremos que, al ofrecer en el Real el estreno espa?ol del Concierto Ib¨¦rico, la Orquesta Nacional programa -por vez primera en su historia- m¨²sica de Moreno Torroba. Estos pentagramas, pensados para quienes hoy los tocaron, Los Romero, obedecen a las premisas de simplicidad, espa?olismo, rasgos populares y adecuaci¨®n instrumental, propios de Moreno Torroba, compositor espont¨¢neo, de vena fluida,

Grande fue el ¨¦xito para todos: Moreno Torroba, Los Romero, ONE y el director invitado, Theo Alc¨¢ntara, quien al comienzo expuso con vigor y consistencia la obertura de Freisch¨¹tz, de Weber. En la segunda parte, Alc¨¢ntara se mostr¨® firme, seguro, expresivo en la Sinfon¨ªa n¨²mero dos (Peque?a Rusia) de Tschaikowsky.

Garcia Asensio, P¨¦rez de Guzm¨¢n y la RTVE

Dos compositores ingleses de acusada personalidad, Britten y Berkeley, escribieron en 1937 una suite titulada Montjuich, que pretende evocar el ambiente catal¨¢n. No obstante la utilizaci¨®n de algunos datos concretos -mel¨®dicos o r¨ªtmicos-, no llegaron a calar hondo en el esp¨ªritu musical de Catalu?a, pero si lograron una partitura variada, transparente y atractiva. Su programaci¨®n por la OSRTVE me parece acertada, como lo fue la clara versi¨®n dirigida por Garc¨ªa Asensio.

Con el Capricho para piano y orquesta, de Strawinsky, volvi¨® Enrique P¨¦rez de Guzni¨¢n, dominador de la t¨¦cnica mec¨¢nica y el estilo de esta p¨¢gina quiz¨¢ un poco superficial, pero producto de la formidable inteligencia y la aguda inventiva del autor de Petruchka. Obra clara de intenciones -forma libre, fantas¨ªa, neoclasicismo- y, a la vez, confusa en su justificaci¨®n escrita, cuando el compositor alude a Weber ?como punto de mira est¨¦tico?. En todo caso, interesante, brillante, original en el ?sonido ? de la orquesta, caracter¨ªstica en las soluciones r¨ªtmicas y m¨¦tricas, desbordante de ingenio. El pianista y sus colaboradores hicieron una buena versi¨®n.

Como contraste con esta parte inhabitual, Garc¨ªa Asensio program¨® en la otra una sinfon¨ªa b¨¢sica del repertorio: la ?cuarta? de Brahms. Primaron el buen orden, el sentido constructivo.

Bolet¨ªn Informativo de la ONE

En los conciertos de esta semana recibimos el primer n¨²mero del Bolet¨ªn Informativo de la Orquesta y Coro Nacionales de Espa?a, ?una forma de expresi¨®n epistolar?, dice el duque de Alba, director general de M¨²sica, ?que pretende canalizar lo que est¨¢ fuera y dentro de este organismo estrictamente musical?. En suma, contar a los seguidores la vida, los proyectos, las ideas de cuantos -directores, profesores, regidores- colaboran en la labor cotidiana de ambas entidades. Prop¨®sito que ya se cumple en la primera entrega. del bolet¨ªn, que atiende las voces de instrumentistas, que recoge el pensamiento de Ros Marb¨¢, contrasta cr¨ªticas de conciertos anteriores, tanto en lo relativo a versiones como a obras estrenadas; que explica, en fin, el porqu¨¦ del nuevo sistema de abonos para avanzar.