La mala situaci¨®n econ¨®mica de la URSS, expuesta crudamente ante el Soviet Supremo

Alexei Kossiguin, 75 a?os, volvi¨® a ser ayer, en el Kremlin, el gran ausente en la apertura de la segunda sesi¨®n de la d¨¦cima convocatoria del S¨®viet Supremo. La sustituci¨®n del presidente del Consejo de Ministros de la URSS por Nicolai Tijonov, 73 a?os, parece ya decidida, a la espera de su confirmaci¨®n oficial. El jefe del Gobierno sigue internado en un hospital y parece que deber¨¢ guardar convalecencia por lo menos hasta el mes de enero. Desde anteayer nadie duda que Tijonov realiza, hace ya cuarenta d¨ªas, fecha en que se puso enfermo Kossiguin, las funciones de primer ministro interino.

Le¨®nidas Brejnev asisti¨® a la primera parte de la sesi¨®n de ayer del Soviet Supremo, escuchando durante hora y media un informe cr¨ªtico a la econom¨ªa sovi¨¦tica por parte del presidente del Gosplan, Nicolai Babaikov, despu¨¦s de un breve descanso y cuando el ministro de Finanzas, Vasili Garbuzov, le¨ªa los presupuestos de la URSS para 1980, Brejnev ya no apareci¨® en la tribuna, si bien esta ausencia debe calificarse de normal. Durante el tiempo, que permaneci¨® en la sala de sesiones mantuvo una gran actividad, conversando principalmente con Mijail Suslov, a quien ten¨ªa a su derecha. El aspecto f¨ªsico de jefe del Estado coincide con el de las ¨²ltimas apariciones en p¨²blico, aunque parece m¨¢s grueso.El primer vicepresidente del Consejo de Ministros de la URSS, nombrado ahora miembro de pleno derecho del Bur¨® Pol¨ªtico, Tijonov, es un hombre del ?grupo de Dniepopetrovski?, fiel a Brejnev, y que ahora ocupa el lugar del que fue heredero de Kruschev En el viaje que realiz¨® ¨¦ste a Par¨ªs en 1960, anunci¨® la posibilidad de su retirada y denomin¨® a Kossiguin como ?mi sucesor?. Desde entonces a hoy los verdaderos sucesores fueron la troika formada por Podgorni, Kossiguin y Brejnev. Ahora est¨¢ s¨®lo el jefe del Estado, cada vez m¨¢s arropado por sus leales de siempre: Suslov, Chernenko, Gromiko y Tijonov.

El nombramiento de Mijail Gorbatchev, que hace un a?o justo ascend¨ªa a secretario del Comit¨¦ Central y ahora a miembro suplente del Politbur¨®, tampoco ha sorprendido dadas las caracter¨ªsticas de hombre eminentemente pol¨ªtico, dedicado plenamente al partido, fue destacado primer secretario del PC en Stavropol, considerada como una de las regiones ?granero? del pa¨ªs, y cuya juventud, 48 a?os, ser¨¢ utilizada para dar nueva energ¨ªa al examen de los problemas agr¨ªcolas que en estos momentos preocupan a los dirigentes del partido.

En la sesi¨®n de ayer del S¨®viet Supremo, el ministro de Finanzas, Garbuzov, anunci¨® una reducci¨®n del presupuesto militar, que debe calificarse de simb¨®lica. Mientras en los dos a?os precedentes este presupuesto ascend¨ªa a 17.200 millones de rublos (algo m¨¢s de un bill¨®n y medio de pesetas), para 1980sedestinan 17. 100 millones de rublos.

Aumenta el presupuesto general del pa¨ªs en 15.000 millones de rublos. Para 1980 se prev¨¦n 284.000 millones de rublos (m¨¢s de veinte billones de pesetas), la mayor parte de los cuales, 157.600 millones, se gastar¨¢n en la industria y 5 1.000 millones en agricultura. Garbuzov repiti¨® que los salarios aumentar¨ªan y calific¨® las cifras ofrecidas para 1980 como ?presupuesto de paz?.

A lo largo de las jornadas pol¨ªticas de estos, d¨ªas, los dirigentes sovi¨¦ticos han puesto de manifiesto, clara y tajantemente, la grave crisis econ¨®mica que atraviesa la URSS. Tanto en el amplio mensaje, publicado por la prensa y ofrecido a puerta cerrada por Le¨®nidas Brejnev ante el pleno ordinario del Comit¨¦ Central del PCUS, como el informe que hizo ayer en la sesi¨®n conjunta del Soviet Supremo, Babaikov, presidente del Gosplan (direcci¨®n de planificaci¨®n econ¨®mica), ambos coinciden en afirmar los graves problemas que sufre el actual plan quinquenal -el d¨¦cimo-, que termina en los pr¨®ximos doce meses.

Las cr¨ªticas duras y concretas, a tan alto nivel, no son habituales por estos pagos. Despu¨¦s de referirse a las desfavorables condiciones clim¨¢ticas que ha sufrido la URSS, que han influido en que la producci¨®n de cereales s¨®lo haya alcanza do la cifra de 178 millones de tone ladas de trigo, por debajo de lo conseguido el a?o pasado, han subrayado que, ?a pesar de todas las dificultades, nuestros ¨¦xitos econ¨®micos pod¨ªan ser m¨¢s importantes si los ministerios de las rep¨²blicas hubieran cumplido las previsiones estatales. Se han incumplido los planes en producci¨®n de petr¨®leo, carb¨®n, metalurgia industria qu¨ªmica y tambi¨¦n en la producci¨®n de art¨ªculos de consumo?.

Concretar las cifras para 1980

Se responsabiliza, asimismo, a los ministerios por permitir la dispersi¨®n de recursos, lo cual provoc¨® grandes p¨¦rdidas. ?En l980?, se se?ala, ?debemos reconstruir el mecanismo econ¨®mico.? Seg¨²n las previsiones anunciadas, el a?o pr¨®ximo se va a poner a prueba la capacidad de reacci¨®n del sistema econ¨®mico sovi¨¦tico. Puntos generales de la reforma son el conseguir el crecimiento de la producci¨®n en un 8%; mejorar la estructura de Ia agricultura; utilizar mejor los grandes recursos naturales de pa¨ªs; preparaci¨®n urgente de cuadros directivos, y conseguir, en todos los sectores de la econom¨ªa ?una atm¨®sfera de responsabilidad para el trabajo?.

En cuanto a puntos concretos, se estima que la producci¨®n industrial exige una mayor atenci¨®n a Ia extracci¨®n de petr¨®leo, cuyo gasto debe no s¨®lo reducirse utiliz¨¢ndose menos en las centrales el¨¦ctricas sino que debe aumentar en un 3,6%. La falta de petr¨®leo ya se hace sentir en varios yacimientos del pa¨ªs, sin embargo, tiene a¨²n ilimitadas posibilidades para su extraci¨®n en Siberia, aunque conseguir este equilibrio en la producci¨®n es costoso, puesto que los nuevos yacimientos est¨¢n lejanos y se precisan grandes inversiones de capital, as¨ª como poner en funcionamiento r¨¢pidamente gasoductos, oleoductos y refiner¨ªas, a tiempo que debe tenerse en cuenta la necesidad de crear condiciones dignas de habitabilidad, con el fin de que los cuadros se decidan a ir a estas regiones. Para 1980 est¨¢ prevista la extracci¨®n de 315 millones de toneladas de petr¨®leo, que seguir¨¢ export¨¢ndose no s¨®lo a los pa¨ªses del CAME, sino a los pa¨ªses occidentales.

Por ¨²ltimo, se han hecho repetidas alusiones a la necesidad de mejorar los salarios de los trabajadores y las pensiones de los jubilados. El salario medio crecer¨¢ en 1980 un 2%, y quedar¨¢ establecido en 167 rubos (alrededor de 20.000 pesetas).