En 1980 no habr¨¢ premios para "doncellas pobres"

El importante pero tedioso y t¨¦cnico debate presupuestario no depar¨® ayer grandes sorpresas, entre otras cosas porque rechazadas ya las enmiendas a la totalidad, la oposici¨®n dedic¨® la mayor parte de la discusi¨®n a intentar, casi siempre sin ¨¦xito, cambiar el destino de las partidas presupuestarias dentro de un mismo ministerio. De ah¨ª que el inter¨¦s de los diputados se despertase cuando, durante la sesi¨®n vespertina, la socialista Mar¨ªa Izquierdo se opuso, con gracia, a determinados premios previstos en los Presupuestos para 1980 para ?las doncellas pobres? y propuso su sustituci¨®n por subvenciones a establecimientos ben¨¦ficos. La C¨¢mara, sonriente, vot¨® favorablemente la enmienda casi por unanimidad.Mar¨ªa Izquierdo plante¨® su alegato contra el texto presupuestario en base a su car¨¢cter medieval y discriminatorio en dos fuentes. ??Por qu¨¦ no se premia tambi¨¦n a los donceles pobres??, pregunt¨®. ?Los presupuestos no tienen por qu¨¦ meterse en esas intimidades y castigar econ¨®micamente a las desvirgadas.?

En medio del regocijo de los diputados la diputada Izquierdo consider¨® inadecuado e impertinente la citada partida presupuestaria y propuso modificarla por la de subvenci¨®n a establecimientos ben¨¦ficos. ?Bastante tienen las destinatarias de estas subvenciones con ser pobres. para adem¨¢s tener que ser doncellas.? La diputada socialista manifest¨® que bien estaban las tradiciones. pero sin discriminaciones. Y termin¨® con un refr¨¢n: ?En materia de doncellas, lo sabe Dios y lo saben ellas.?

El centrista Alberto Ollart expres¨® el acuerdo de su grupo con la enmienda socialista. pero puntualiz¨® que se trataba de un lenguaje no medieval, sino decimon¨®nico. Todav¨ªa la votaci¨®n reflej¨® la existencia frente a lo 238 votos favorables, de tres diputados recalcitrantes que se opusieron y de dos que, tal vez por no ver claro el asunto, prefirieron abstenerse.

Tambi¨¦n se evidenci¨® la satisfacci¨®n en la sala durante la defensa de las enmiendas socialistas y comunistas contrarias a la asignaci¨®n de m¨¢s de diecis¨¦is millones al Tribunal de la Rota y de otras dotaciones para destinos eclesi¨¢sticos, que los diputados de la izquierda consideraron incompatibles con los recientes acuerdos con el Vaticano.

El argumento del centrista Joaqu¨ªn Mu?oz Peirats sobre la falta de ratificaci¨®n de los citados acuerdos no convenci¨® a la oposici¨®n de izquierdas, por tratarse de unas cantidades para 1980. En cuanto al argumento de que las 900.000 pesetas destinadas a la canonj¨ªa de San Pedro del Vaticano s¨®lo perdurar¨ªan mientras viviera su titular. Gregorio Peces-Barba contest¨®: ?Que viva el se?or can¨®nigo, pero sin cobrar de los Presupuestos Generales del Estado espa?ol? Las enmiendas fueron rechazadas.