Elecciones en Portugal

EL DOMINGO se celebran en Portugal unas elecciones generales que no pueden ser, por razones constitucionales y de configuraci¨®n pol¨ªtica, resolutorias. Tratan de cubrir el lapso entre el Gobierno provisional de la se?ora Pintassilgo -que era, a su vez, un parche para cubrir el tiempo entre la disoluci¨®n de la Asamblea y la convocatoria de elecciones- y la fecha legal de las nuevas elecciones: un a?o escaso. La nueva Asamblea no tendr¨¢ poderes para la reforma de la Constituci¨®n, que es el punto en el que se centran ahora ciertas esperanzas de orden en una casa dif¨ªcil. La tendencia al presidencialismo que favorece Eanes, que querr¨ªa protagonizarla; la superposici¨®n del Consejo de la Revoluci¨®n, las dificultades entre militares, la fuerza de los grupos de presi¨®n extraparlamentarios -la Iglesia, que es muy poderosa; el Capital, que ha recuperado su fuerza plenamente y las microalianzas continuamente cambiantes de los partidos pol¨ªticos hacen dif¨ªcil una continuidad gubernamental importante en un pa¨ªs incesantemente devorado por la crisis econ¨®mica y social.Aun siendo de poderes limitados, la nueva Asamblea que salga de estas elecciones tendr¨¢ una importancia considerable: sobre todo, la de ocupar el Gobierno cuando se celebren las nuevas elecciones generales y la de configurar el pa¨ªs en favor de la mayor¨ªa resultante. Hay augures que creen que si la mayor¨ªa se forma por la Alianza, Democr¨¢tica, cuya cabeza visible es Sa Carneiro -un grupo centro-derecha-, ¨¦sta no abandonar¨¢ el poder en muchos a?os. Los augurios se basan en datos sacados principalmente del ?modelo espa?ol?. Sa Carneiro representar¨ªa una especie de Su¨¢rez, pero con una larga y antigua finura pol¨ªtica; Alianza Democr¨¢tica ser¨ªa una UCD -que ha prestado apoyo abierto a sus cong¨¦neres y ha enviado, oradores de post¨ªn a sus m¨ªtines; con una preocupaci¨®n menor por aparecer coino de centro y un inter¨¦s considerable por servir a su derecha, que le resulta menos agresiva -por m¨¢s inteligente, por m¨¢s posibilista- de lo que es para Su¨¢rez la suya. El modelo centrista est¨¢ bastante apoyado en Portugal por fuerzas exteriores, aunque el presidente Eanes lo considera con bastante recelo: teme que busque para presidente -presidencialista, si reforma la Constituci¨®n, alguien m¨¢s a la derecha que ¨¦l. Eanes, a pesar de haber despedido a Mario Soares y haberle quitado el poder hace tres meses, parece ahora favorecerle. Es tambi¨¦n un Soares reformado, seguidor de inodelos internacionales m¨¢s suaves que aquellos que practic¨® en la revoluci¨®n; un socialismo m¨¢s centrista, m¨¢is otanista, mucho menos amigo de nacionalizaciones y de expropiaciones que nunca.

La elecci¨®n se plantea pr¨¢cticamente entre la alianza que: dirige Sa Carneiro y el socialismo de Mario Soares. Lasi auscultaciones, los pron¨®sticos de las v¨ªsperas, dan una ligera Yentaja a Sa Carneiro. No son enteramente fiables. Portugal es todav¨ªa un pa¨ªs demasiado confuso como para que las intenciones de voto puedan establecerse de una manera clara por encuestas y muestreos. Parece que la Asamblea va a estar repartida y que los votos comunistas puedan representar mucho en ella, desde un punto de vista de arbitraje y maniobra.