Madrid tiene desde ayer 16.000 ¨¢rboles m¨¢s

Los 16.000 ¨¢rboles que el Ayuntamiento de Madrid hab¨ªa reservado para el D¨ªa del Arbol, a celebrar ayer y hoy, fueron plantados junto a la M-30 en poco m¨¢s de tres horas, ayer por la ma?ana. Unos 20.000 madrile?os participaron voluntariamente en la operaci¨®n, seg¨²n c¨¢lculos de? primer teniente de alcalde, Ram¨®n Tamames. Sumados a los 14.000 ¨¢rboles que se han plantado esta semana en otras zonas de la ciudad, cabe decir que desde hoy cada cien madrile?os tienen un ¨¢rbol m¨¢s.

El D¨ªa del Arbol 1979, que deber¨ªa haberse desarrollado en dos jornadas, s¨¢bado y domingo, en turnos de ma?ana y tarde, cumpli¨® sus objetivos en s¨®lo tres horas. Desde las nueve de la ma?ana de aver, grupos de personas se concentraban en las raquetas de la M-30, dispuestos a plantar, en los hoyos abiertos d¨ªas atr¨¢s por las m¨¢quinas, los 16.000 ¨¢rboles que los servicios municipales hab¨ªan puesto en ellos. Entre las doce y media y la una de la ma?ana, los partes de trabajo que llegaban al puesto de control, instalado en el cruce de la calle de O'Donnell con la M-30, hablaban ya de que hab¨ªa sido plantado entre el 90% y el 100% de los ¨¢rboles que hab¨ªan sido dispuestos.Sobre la una y media de la ma?ana, los distintos equipos que hab¨ªan coordinado la operaci¨®n se reunieron en el puesto de control para hacer un ¨²ltimo balance. Este balance ven¨ªa a resumirse en que hab¨ªan sido plantados todos los ¨¢rboles -16.000-, no se hab¨ªan producido accidentes dignos de menci¨®n y todo hab¨ªa funcionado a la perfecci¨®n.

Los ciudadanos m¨¢s madrugadores llegaron a los sitios prefijados para la plantaci¨®n sobre las nueve de la ma?ana. Autobuses de la Empresa Municipal de Tiransportes y del propio Ayuntamiento se encargaron de llevar a los madrile?os que lo desearon hasta las distintas raquetas de la M-30. Estas raquetas hab¨ªan sido distribuidas, sobre el papel, para ser forestadas por los habitantes de cada distrito afectado por la autopista. Pero se dio la circunstancia de que una de las parcelas en las que se esperaba una mayor participaci¨®n -la de Vallecas- era una de las m¨¢s peque?as. Por eso, en el momento en que todos los ¨¢rboles de ese distrito hab¨ªan sido ya plantados, los vecinos de Vallecas fueron trasladados por los mismos autobuses municipales a otras zonas de la autopista para continuar el trabajo.

Es de destacar la masiva afluencia de habitantes de un distrito por el que no pasa la M-30, el de Latina, que, sin embargo, acudieron a la operaci¨®n de forestaci¨®n de la M-30 en gran n¨²mero, ocupando para ello siete autobuses dispuestos por el Ayuntamiento, a los que se sumaron, en una larga caravana que atraves¨® Madrid, unos cincu.enta veh¨ªculos particulares. Juli¨¢n Rebollo, el concejal de ese distrito, no se cansaba de repetir a quien se mostraba dispuesto a o¨ªrle lo maravillosos que eran sus gobernados. Otro concejal del mismo partido pol¨ªtico comentaba en las cercan¨ªas: ?Es que los concejales son como ni?os.?

La Cruz Roja Espa?ola mont¨® un servicio de auxilio a lo largo de toda la M-30 realmente espectacular, en previsi¨®n de que pudiera producirse alg¨²n accidente, bien por atropello, bien por una indebida utilizaci¨®n de los azadones que hab¨ªan sido dispuestos para la plantaci¨®n. Sin embargo, su actuaci¨®n se limit¨® a una cincuentena de casos, que, a la hora del balance final, fueron calificados por el coronel que mandaba las tropas de socorro como leves.

Una inversi¨®n rentable

Un jardinero municipal, que hab¨ªa estado a lo largo de la ma?ana atendiendo el desarrollo de la operaci¨®n, coment¨® al final de la jornada que casi todos los ¨¢rboles hab¨ªan sido plantados correctamente y que esperaba que prendieran en un ciento por ciento. ?Los defectos que haya son por los descuidos de los de siempre?, dijo, al referirse a la falta de previsi¨®n de instalaci¨®n de bocas de riego para darles agua a los ¨¢rboles reci¨¦n plantados.

Sin embargo, como a ¨²ltima hora de la ma?ana comenz¨® a llover sobre el puesto de control de la operaci¨®n, el delegado municipal de Obras y Servicios Urbanos, Juan Claudio de Ram¨®n, coment¨®: ?Estaba todo tan bien organizado que estaba previsto hasta que se pusiera a llover ahora. ?

El ingeniero jefe de jardiner¨ªa del Ayuntamiento, Jos¨¦ Luis Pita, calcul¨® para EL PAIS el balance econ¨®mico de la operaci¨®n de ayer por la ma?ana: los ¨¢rboles plantados han sido cedidos gratuitamente por los viveros municipales, de la Diputaci¨®n Provincial y del Instituto para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (Icona). Los desembolsos m¨¢s elevados que se han realizado han correspondido a la compra de los azadones para la plantaci¨®n y a la realizaci¨®n de los agujeros donde deber¨ªan ser plantados los ¨¢rboles. En total, por todos los conceptos, el D¨ªa del Arbol 1979 ha supuesto, en n¨²meros redondos, una inversi¨®n de cinco millones de pesetas. Pero el propio se?or Pita reconoci¨® que el plantar 16.000 ¨¢rboles, teniendo que pagar por cada concepto que supone la operaci¨®n, ' habr¨ªa equivalido a desembolsar del orden de los diecis¨¦is millones de pesetas; es decir, a unas mil pesetas por ¨¢rbol plantado. Incluso el se?or Pita comentaba: ?Aunque se llevaran la mitad de los azadones que hemos comprado para esta ocasi¨®n, seria rentable la inversi¨®n. ?

Otro jardinero, con todo, no se mostraba tan satisfecho: ?S¨ª, s¨ª, mucha gente ha venido aqu¨ª y ahora dir¨¢ que ha plantado un ¨¢rbol, pero para que agarre y crezca vamos a tener que arreglar la plantaci¨®n de, por lo menos, la mitad. Y despu¨¦s seguro que no vienen ellos a cuidarlos. Los vamos a tener que regar nosotros y con muy pocos medios. ?

Pero, dado que lo principal que se buscaba, despu¨¦s de la propia forestaci¨®n de la M-30, era la participaci¨®n popular, el ¨¦xito fue m¨¢s que completo. Ram¨®n Tamames, al t¨¦rmino de la ma?ana, dec¨ªa a los periodistas que hab¨ªan acudido al puesto de control: ?Por favor, decidle a la gente que no venga ma?ana a plantar ¨¢rboles, que ya no nos quedan.?

Hoy, sin embargo, contin¨²a, aunque sea bajo techo, el D¨ªa del Arbol: en el Palacio de los Deportes se celebrar¨¢, a las cinco de la tarde, un festival que dar¨¢ por concluida la Semana del Arbol de este a?o. La iniciativa continuar¨¢ el ya pr¨®ximo 1980.