El error humano favoreci¨® de nuevo al Madrid
En M¨¢laga sufrieron, de nuevo, el humano error arbitral. El beneficiado, otra vez, Real Madrid. La Casa Blanca, que en f¨²tbol no se descuelga de la cabeza, quiere apartarse de la benem¨¦rita sociedad protectora de deportes minoritarios. El Madrid quiere quedarse s¨®lo con los grandes profesionales. Le sobran ¨¢quellas disciplinas que no dan mucho lustre. El Atl¨¦tico vivi¨® un domingo feliz.
En M¨¢laga han tenido mala suerte. En lo que va de temporada han sufrido todos los errores arbitrales que caben en una Liga. El domingo, hasta alg¨²n jugador madridista confes¨® que hab¨ªa habido penalti en su ¨¢rea y el se?or Acebal se sac¨® de la manga un bote neutral. El director de la contienda esjustamente de los que gozan de la total confianza del Comit¨¦ de Arbitros y, por tanto, de la Federaci¨®n. El ?as¨ª, as¨ª, as¨ª gana el Madrid? se oy¨® en La Rosaleda en un partido en que todo pudo haber resultado satisfactorio, incluso para el Real. Todas las grandes casualidades de la Liga han beneficiado, este a?o, al Madrid.En la Casa Blanca, a pesar de que andan metidos en las rebajas, no pierden ripio en la Liga futbolera. El Madrid protegi¨® en otros tiempos los deportes m¨¢s o menos amateurs y ahora se ha propuesto eliminar los gastos considerados superfluos. Bernab¨¦u suprimi¨®, en cierta ocasi¨®n. el tenis, y lo recuper¨® a tiempo de ponerle a Santana un escudo de la casa, para jugar la final de Copa Davis, en Sidney, en 1965.
El Madrid, que abandon¨® a Santana cuando necesitaba ayuda, se lo quit¨® al Tenis Barcelona, que le hab¨ªa prestado apoyo cuando en su pueblo se le hab¨ªa negado. Bernab¨¦u y Saporta reconquistaron a Santana, con buenas pesetas por medio, para la Ciudad Deportiva. El Madrid nunca ha desperdiciado un duro en operaciones especiales. Santana llev¨® a la Ciudad Deportiva no s¨®lo torneos internacionales, sino tambi¨¦n aficionados de m¨¢s o menos fuste.
La operaci¨®n Santana permiti¨® al Madrid no descolgarse del poder en los a?os de la escalada Opus. En las pistas de la Ciudad Deportiva se vio por entonces a L¨®pez Rod¨® empu?ando la raqueta. Con el superministro de entoncesjugaban en las ma?anas madridistas L¨®pez de Letona, Fontana Codina y un chico que promet¨ªa, llamado Adolfo Su¨¢rez.
En el Real Madrid perdura el esp¨ªritu de Bernab¨¦u que, como se sabe, siempre se preguntaba para qu¨¦ sirve la pista de atletismo. De Carlos est¨¢ en plan liquidaci¨®n fin de teniporada. A los clubs se les oblig¨®, en cierta ¨¦poca, cuando gozaban de notables exacciones fiscales, a proteger los deportes minoritarios. Ahora que los impuestos han aumentado, el Madrid quiere liberarse de las obligaciones pasadas. Ya no van a quedar en la casa m¨¢s que profesionales bien pagados, o sea, los jugadores de f¨²tbol y los de baloncesto. Y ¨¦stos, mientras puedan firmarse con Televisi¨®n sustanciosos contratos.
El Atl¨¦tico tuvo un domingo afortunado. Gan¨® su equipo al Zaragoza y se produjo el esc¨¢ndalo de M¨¢laga. Queda, pues, difuminada su crisis. Vicente Calder¨®n quer¨ªa reforzar su diezmada directiva y Santos Campano jugaba a ganar tiempo. Ahora que parec¨ªa inevitable el remozamiento, han surgido algunos problemas. Parece que ciertos presuntos directivos no est¨¢n dispuestos a aceptar el puesto mientras dentro de la casa no est¨¦ todo clarificado.
La ¨²ltima operaci¨®n, el fichajede Dirceu, tambi¨¦n ha tenido estrambote inesperado. Resu que desde la entidad atl¨¦tica insisti¨® en que el traspaso de Dirceu era posible gracias a la amistad que une a Calder¨®n con el presidente del Am¨¦rica. Oficialmente el fichaje se hizo de club a club, para eso viaj¨® a M¨¦xico Santo Campano. Resulta que los intermediarios est¨¢n prohibidos por la reglamentaci¨®n vigente, ocurre que d¨ªas pasados el se?or Santos firm¨® un cheque por importe de medio mill¨®n de pesetas, cuyo destinatario fue el se?or Minguella, conocido contratista jugadores.
Bien mirado, nada de particular tiene el hecho, porque en otras ocasiones, y tambi¨¦n en operaciones realizadas de club a club, se ha llevado sus kilos de verdes el se?or Guijarro, el m¨¢s importante intermediario espa?ol.
Los clubes son, en su inmensa mayor¨ªa, deficitarios y algunos de los agujeros de sus arcas se producen por gastar p¨®lvora en salvas. El dinero de los traspasos es cada vez m¨¢s importante, porque hay mucha gente de por medio. Una entidad dad como el Atl¨¦tico no necesita intervenci¨®n de gentes extra?as. Sobre todo, cuando se presume de las habilidades de cierto directivo.
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