Aplazada la firma del acuerdo de alto el fuego en Rodesia

., La firma del acuerdo final sobre Rodesia, oficialmente prevista para el mi¨¦rcoles, ha sufrido un nuevo aplazamiento, ante la negativa del obispo Abel Muzorewa a comparecer a tiempo en Londres para la ceremonia hasta que Gran Breta?a no explique el alcance de las concesiones hechas al Frente Patri¨®tico.

Muzorewa, que ces¨® en sus funciones de jefe de Gobierno con la llegada del nuevo gobernador brit¨¢nico, lord Soames, a la capital rodesiana, manifest¨® en Salisbury que,?aunque desea m¨¢s que nadie un acuerdo honorable?, necesita comprobar que Londres no ha llegado en sus concesiones m¨¢s all¨¢ de lo aceptado la pasada semana por su delegaci¨®n.

El litigio est¨¢ en el n¨²mero de fuerzas que el Frente Patri¨®tico debe concentrar en las diecis¨¦is ?zonas especiales? asignadas por Gran Breta?a. Seg¨²n funcionarios brit¨¢nicos y rodesianos, los efectivos del Frente dentro de Rodesia oscilan entre 15.000 y 17.000 hombres, cifras contestadas por los nacionalistas, que afirman que ascienden a m¨¢s del doble.

Igualmente, Muzorewa ha mostrado su preocupaci¨®n por la posibilidad de un per¨ªodo demasiado dilatado entre la orden de alto el fuego y el cese total de las hostilidades, ya que toda su propaganda electoral est¨¢ basada en el fin de la guerra y en el levantamiento de las sanciones.

En todo caso, fuentes gubernamentales han manifestado su esperanza de que el acuerdo de la Lancaster House pueda ser firmado en las pr¨®ximas horas.

Alemania Federal y Canad¨¢ se sumaron ayer a los pa¨ªses que han levantado las sanciones contra Rodesia. un d¨ªa despu¨¦s de que la Asamblea General de la ONU expresara su ?reprobaci¨®n? por la medida adoptada por ?algunos Estados?. La resoluci¨®n de la ONU, adoptada por 97 votos contra diecisiete, ?deplora? una decisi¨®n adoptada sin tener en cuenta la opini¨®n del Consejo de Seguridad, que impuso las sanciones en 1968.

La Organizaci¨®n para la Unidad Africana ha acusado al Gobierno brit¨¢nico de no mantener una postura franca en las largas negociaciones de Londres. Los pa¨ªses de la ?l¨ªnea del frente?, que apoyan a los guerrilleros, condenaron, por su parte, ayer el env¨ªo de un gobernador brit¨¢nico a Rodesia antes de firmado el alto el fuego.

En Salisbury, y a pesar de que los partidos de Nkomo y Mugabe siguen prohibidos, sus partidarios se aprestan a prepararles un recibimiento multitudinario. No hay duda de que las cosas est¨¢n cambiando r¨¢pidamente en Rodesia, y la mejor prueba puede encontrarse en la transmisi¨®n, por primera vez, de una entrevista telef¨®nica realizada con Nkomo.

El dirigente guerrillero hizo un llamamiento a la reconciliaci¨®n nacional.