Silencio de los te¨®logos italianos

Mientras la prensa italiana ha dado casi un¨¢nimemente la primera p¨¢gina de todos los diarios a la condena del te¨®logo Hans K¨¹ng por parte del ex Santo Oficio, est¨¢ chocando enormemente el silencio coral de los te¨®logos italianos.La noticia de que el famoso te¨®logo del concilio ?ya no puede considerarse te¨®logo cat¨®lico? est¨¢ siendo comentada s¨®lo por los escritores laicos, como hizo ayer Carlo Bo en primera p¨¢gina de Corriere della Sera. El mundo eclesi¨¢stico calla. S¨®lo el semanario Com-Nuovi Tempi, ¨®rgano de las comunidades cristianas de base, que abraza a cat¨®licos y protestante, se ha preguntado en un editorial ?qu¨¦ sentido pueden tener las proclamaciones de los derechos del hombre que ha hecho Juan Pablo II cuando los intelectuales y disidentes son castigados en la Iglesia?.

Miedo al castigo

Pero mientras los te¨®logos italianos mantienen un silencio que es casi miedo -?no cite mi nombre?, afirman un¨¢nimemente cuando se les pide una declaraci¨®n-, ha saltado a los peri¨®dicos la noticia de que ha sido personalmente Juan Pablo II quien ha pedido a la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe que replanteara el caso K¨¹ng y que decidiera sin m¨¢s consultas. De hecho, el mismo te¨®logo catedr¨¢tico de Tubinga ha confirmado que el 28 de noviembre, cuando hab¨ªa protestado con los dem¨¢s te¨®logos en la revista internacional de teolog¨ªa Concilium sobre los m¨¦todos inquisitoriales usados por el ex Santo Oficio contra los colegas, el franc¨¦s Pohier y el holand¨¦s Schillebeeckx no sab¨ªan a¨²n que se estaba decidiendo su condena.