Precisiones sobre N¨²?ez de Prado

El d¨ªa 6 de diciembre apareci¨® en EL PA?S una carta de Ram¨®n Salas en respuesta a un comunicante, en la cual se me menciona y se cita mi trabajo sobre el general N¨²?ez de Prado. Deseo aqu¨ª hacer unas puntualizaciones.En primer lugar, no pude ver el programa La clave del d¨ªa 24 de noviembre y, por tanto, ignoro lo que en ¨¦l dijo Salas. Este, en su carta, afirma que yo llego a la misma conclusi¨®n que ¨¦l en torno a la muerte del general, cuando, de hecho, no advierto en qu¨¦ podemos coincidir. El aseguraba, en su libro sobre el Ej¨¦rcito Popular de la Rep¨²blica, que N¨²?ez de Prado hab¨ªa sido fusilado, y en Zaragoza. En cuanto a m¨ª, al redactar el trabajo citado, ten¨ªa la absoluta certeza de que ?¨²nez de Prado hab¨ªa sido asesinado, y hoy esta certeza se ve si cabe corroborada por los testimonios que he obtenido al continuar mis investigaciones tras la publicaci¨®n de dicho art¨ªculo. Es indudable que el general fue paseado, pero ?qui¨¦n fue el autor de su muerte? Seg¨²n unos, los requet¨¦s; seg¨²n otros, las personas en cuyas manos fue depositado; quien asevera que fue muerto por orden del general Cabanellas, quien menciona una orden del general Franco y quien se?ala responsabilidad del director de la prisi¨®n de Pamplona en que estuvo encarcelado.

Sea como sea, lo que est¨¢ fuera de toda duda es que fue asesinado, y acerca de los m¨®viles, existe tambi¨¦n una versi¨®n que he podido recoger. Todo ello, en buena parte no coincide, dicho sea de paso, con las, dos versiones que presenta Guillermo Cabanellas en otros tantos libros, en los cuales resulta, por lo dem¨¢s, y quiz¨¢ por razones obvias, tremendamente confuso y contradictorio.