Satisfacci¨®n sovi¨¦tica por el viaje del sha a Egipto

La agravaci¨®n de la crisis entre Estados Unidos e Ir¨¢n, como consecuencia de la ?huida? del sha a Egipto, ha sido recibida en la Uni¨®n Sovi¨¦tica con satisfacci¨®n. Mosc¨² se ha apresurado a se?alar que la huida de Reza Pahlevi de Panam¨¢ fue posible gracias a los norteamericanos, quienes ten¨ªan bien estudiado el plan para que no hubiera posibilidad de ning¨²n fallo.Con amplitud y rapidez, la agencia Tass coment¨® ayer el viaje del ex monarca a bordo de un avi¨®n militar norteamericano pocas horas antes de que los representantes iran¨ªes pudieran exigir legalmente la extradici¨®n. El Kremlin espera que esta nueva situaci¨®n sirva, cuando menos, para una tregua de los pol¨ªticos iran¨ªes en los ataques que llevan a cabo en las ¨²ltimas. semanas contra la invasi¨®n sovi¨¦tica de Afganist¨¢n.

Las relaciones sovi¨¦tico-iran¨ªes hab¨ªan sufrido en el transcurso de este mes no s¨®lo un deterioro en el terreno pol¨ªtico, sino tambi¨¦n en el econ¨®mico, por culpa del precio del gas que suministraba a la URSS el Gobierno de Teher¨¢n desde la ¨¦poca del sha. Se construy¨® un gasoducto para el abastecimiento de 70.000 millones de metros c¨²bicos y estaba proyectado otro segundo gasoducto, cuya construcci¨®n est¨¢ paralizada ante la declaraci¨®n del actual Gobierno iran¨ª de que prefer¨ªan no exportarlo a mantener los precios establecidos por el antiguo r¨¦gimen.

Horas antes de que Mosc¨² conociese la fuga del sha, preparada por Estados Unidos, ayer apareci¨® en Pravda un art¨ªculo firmado por el colectivo del PCUS, que se firma A. Petrov, en el que se acusa a Washington de c¨¢muflar el car¨¢cter anti¨¢rabe y ant¨²ran¨ª de sus actividades. En el comentario se reiteran las acusaciones sovi¨¦ticas contra la Administraci¨®n Carter.

En la nueva denuncia, que abunda en t¨¦rminos ya conocidos de anteriores declaraciones de los pol¨ªticos sovi¨¦ticos, Petrov insiste en la ?amenaza real? que la presencia norteamericana supone sobre el Pr¨®ximo y Medio Oriente e invita a Washington a ?la moderaci¨®n ? en esta zona.

Por ¨²ltimo, Pravda afirma que la posici¨®n de la URSS ?no ha cambiado? y, curiosamente, expresa que la Uni¨®n Sovi¨¦tica ?no codicia los recursos de otros pueblos, no atenta contra la seguridad de otros Estados y no busca para s¨ª derechos ni privilegios especiales?,