Franco le dijo a don Juan Carlos: "Esto tiene que cambiarlo usted; yo no puedo"

Franco le dijo muchas veces al entonces Pr¨ªncipe de Espa?a Juan Carlos: ?Esto tiene que cambiarlo usted, es evidente que yo no puedo hacerlo?, manifest¨® ayer Sabino Fern¨¢ndez Campo, secretario general de la Casa del Rey, en unas declaraciones al diario La Nueva Espa?a, con motivo de un homenaje que recibi¨® en Oviedo, de donde es natural. El acto fue organizado por un grupo de amigos suyos coincidiendo con su ascenso a interventor general del Ej¨¦rcito, m¨¢xima categor¨ªa de dicho cuerpo.

El general asturiano afirm¨® que don Juan Carlos jug¨® un papel importante antes y despu¨¦s de su coronaci¨®n, hasta que fue proclamada la Constituci¨®n, que limita sus funciones a las de un rey constitucional, al referirse a su protagonismo en la transici¨®n pol¨ªtica. Del libro de Joaqu¨ªn Bardav¨ªo Los silencios del Rey dijo que no es totalmente exacto, y que faltan en ¨¦l muchas cosas, pero, en general, se ajusta a la realidad.Sobre el posible contacto de don Juan Carlos con Santiago Carrillo, cuando ¨¦ste se encontraba en el exilio, respondi¨®: ?Bueno, no creo que fuera un contacto directo. Pero estar¨ªa sin duda enterado de todas las negociaciones?. Los discursos reales, indic¨®, se confeccionan en la Zarzuela, salvo en ocasiones que tratan de temas muy concretos, en cuyo caso son elaborados por el departamento correspondiente. No son obra de una sola persona. El Rey da las ideas, los supervisa y sugiere cambios si no le satisfacen?.

?Cada vez?, agreg¨® el general Fern¨¢ndez Campo, ?pronuncia los discursos mejor, con m¨¢s seguridad?. Sobre las supuestas escapadas del Rey para huir del protocolo que le impone el cargo, afirma que hay mucha leyenda?. Lo que s¨ª es cierto es que el Rey, como a cualquiera otra persona, le gusta ir a cenar y a tomar una copa con sus amigos, y eso no lo puede hacer con la frecuencia que quisiera. Es Rey y lo asume con sus ventajas y sus inconvenientes, responsablemente (...). Don Juan Carlos es una persona como los dem¨¢s, pero tiene el sello especial que tienen los miembros de la realeza?. La Casa Real anda apretada con el dinero, seg¨²n el general Fern¨¢ndez Campo. ?Yo ten¨ªa m¨¢s holgura?, afirma, ?cuando era secretario de ministerios; en cualquier ministerio se maneja el dinero con m¨¢s fluidez. Aqu¨ª tenemos un presupuesto global aprobado por las Cortes que no llega a los doscientos millones de pesetas anuales. De momento esta cifra puede parecer alta, pero si se tiene en cuenta que de ah¨ª tiene que salir el mantenimiento de toda la casa, el pago de los empleados, excepto los funcionarios, que cobramos a trav¨¦s del ministerio respectivo, el mantenimiento de los coches, los ch¨®feres, los regalos que hay que hacer, las atenciones sociales, comidas, material de toda clase, etc¨¦tera, se comprende que no se puede tirar del presupuesto con demasiada alegr¨ªa. Incluso algunos viajes se cargan a este presupuesto global, dentro del cual entran tambi¨¦n los sueldos del Rey, y de la familia real. Y de este sueldo hay que deducir los impuestos, que pagan como cualquier ciudadano ?.

Preguntado si ve diariamente al Rey, Sabino Fern¨¢ndez respondi¨®: ?Lo veo todos los d¨ªas y a todas horas. Aparte de despachar diariamente, a veces incluso se presenta aqu¨ª, en mi despacho, cuando estoy yo con alguien, con los consiguientes sustos para los visitantes?.

El Rey tiene dos ayudas de c¨¢mara que se turnan, y la Reina dos doncellas.Don Juan Carlos habla correctamente ingl¨¦s, franc¨¦s, italiano, portugu¨¦s y algo de griego. ?La Reina?, afirma el se?or Fern¨¢ndez Campo, ?es muy culta y habla varios idiomas. Cuando es madrina de un acto, como una entrega de bandera, es conveniente que diga unas palabras; por supuesto, ahora lo hace con m¨¢s frecuencia que antes y se siente totalmente segura con el espa?ol. Hay que tener en cuenta que no es su lengua materna?.

El cargo de secretario general del Rey le permite a Fern¨¢ndez Campo ?un contacto directo y cotidiano con personas encantadoras; los Reyes son verdaderamente agradables?. Su misi¨®n, como secretario de la Casa Real, abarca todo: ?Desde comprar ese perro que les gusta hasta matricular un coche, preparar una carta del Rey al Papa o colaborar en la confecci¨®n de un discurso. En este cargo se hace de todo. Lo primero es la organizaci¨®n administrativa, econ¨®mica e incluso de protocolo de la casa. La verdad es que yo tengo madera de secretario. Y cuando leo el significado de la palabra ?secretario? en el diccionario siempre me horrorizo: secretario es aquel al que cuentan los secretos para que los guarde ?No es esto terrible??.

La idea de la creaci¨®n de la Fundaci¨®n del Principado de Asturias (EL PAIS, 29-4-80) ?ha parecido maravillosa a todo el mundo?, asegura. ?La actividad m¨¢s importante de dicha fundaci¨®n?, subray¨®, ?ser¨¢ la concesi¨®n del Premio Pr¨ªncipe de Asturias a la investigaci¨®n cient¨ªfica, cuya dotaci¨®n econ¨®mica se dice no podr¨¢ ser inferior a la m¨¢s elevada de las que se conceden oficialmente en el campo cient¨ªfico o cultural. El acto de la concesi¨®n ser¨¢ siempre en Asturias, el d¨ªa de Nuestra Se?ora de Covadonga. ?Es muy interesante todo lo que acerque al heredero de la Corona a su principado?.