Ruman¨ªa, brillante vencedor del torneo de Valladolid
Ruman¨ªa, que empat¨® a veinte con Yugoslavia en la jornada final, se proclama vencedor del IV Torneo Internacional de Espa?a de balonmano, celebrado en Valladolid. Los yugoslavos lograron el segundo puesto y Espa?a, contra pron¨®stico, y gracias a sus dos sensacionales victoria frente a Yugoslavia y la URSS, el tercero.
Los hombres de Domingo B¨¢rcenas, tras un comienzo decepcionante, se han convertido en la aut¨¦ntica revelaci¨®n del torneo. El viernes derrotaron a Yugoslavia por 18-16, despu¨¦s de sesenta minutos espectaculares y emocionantes en los que el combinado hispano defendi¨® muy bien y atac¨® con ideas merced al formidable partido de Goyo.Pagoaga, que realiz¨® varias intervenciones de antolog¨ªa, fue el h¨¦roe del encuentro. Un d¨ªa m¨¢s tarde los espa?oles volvieron a sorprender a todos al derrotar a la URSS por 15-13. La clave de este nuevo e inesperado triunfo residi¨® en la firmeza de la zaga hispana y en la actuaci¨®n del pivot De la Puente que, pese a tener que batallar con hombres de m¨¢s de dos metros, anot¨® cinco goles.
La Uni¨®n Sovi¨¦tica, que el viernes venci¨® a la modesta Suiza por 34-16, decepcion¨® en t¨¦rminos generales, ya que se esperaba mucho m¨¢s de los campeones ol¨ªmpicos. Los sovi¨¦ticos impresionaron por su fortaleza, pero cometieron el error de emplear sistemas demasiado r¨ªgidos y mecanizados que no alteraron ni cuando las cosas les iban mal.
El triunfo final de Rumania fue justo y merecido. Los rumanos hicieron un balonmano moderno y r¨¢pido, y a lo largo de los cinco d¨ªas no atravesaron ning¨²n bache. El primer puesto fue sin duda, el premio a su regularidad. Yugoslavia sorprendi¨® en las dos primeras jornadas, pero en la tercera se encontr¨® con una selecci¨®n espa?ola inspirad¨ªsima que cort¨® la marcha de los balc¨¢nicos hacia el primer puesto. En el ¨²ltimo encuentro, Yugoslavia volvi¨® a hallar su juego y logr¨® un empate frente a los campeones.
En las dos jornadas finales se mantuvo e incluso mejor¨® el buen nivel de los primeros d¨ªas. Todos los choques, a excepci¨®n del URSS-Suiza, fueron disputad¨ªsimos e interesantes.
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