El pueblo afgano, feliz por la retirada de tropas sovi¨¦ticas
Con el prop¨®sito de que la retirada de un contingente de tropas sovi¨¦ticas de Afganist¨¢n revistiera la apariencia de gran acontecimiento, las autoridades de Kabul permitieron el pasado lunes que la poblaci¨®n pudiera desplazarse, sin inconvenientes, hasta veinte kil¨®metros a las afueras de Kabul, tras la correspondiente verificaci¨®n de que ning¨²n guerrillero musulm¨¢n se encontrase entre ella. La poblaci¨®n se siente contenta por esta retirada parcial.El corresponsal de la agencia France Presse alquil¨® un taxi para desplazarse hasta el paso de Salang, lugar por donde saldr¨ªan la dvision sovi¨¦tica y los 108 carros de combate. Al abandonar Kabul, una patrulla afgana de registr¨® y le oblig¨® a permanecer en la cuneta.
En el punto de la carretera donde fue detenido, a las siete de la mafiana, hora local, pudo contem plar poco despu¨¦s el paso de un jeep sovi¨¦tico, con la bandera roja, seguido de un cami¨®n, donde, viajaban periodistas y operadores de televisi¨®n de la Europa del Este. Inmediatamente detr¨¢s pasaron 200 camiones, transportando los soldados, y 108 veh¨ªculos, transportando otros tantos carros de combate.
Algunas j¨®venes, que se encontraban de excursi¨®n, saludaron, a lo que respondieron los soldados, casi todos. menores de veinte a?os. Entre tanto, hab¨ªa llegado al lugar un autob¨²s cargado de escolares afganos, que despidieron tambi¨¦n a las tropas. Antes del paso del convoy militar, se distribuy¨® entre los estudiantes coca-cola.
Cami¨®n tras cami¨®n, el convoy pas¨® entre los c¨¢nticos de los soldados, al parecer satisfechos de alejarse del peligro mortal que representan los rebeldes afganos.
Cuando pas¨® el ¨²ltimo veh¨ªculo, un joven afgano grit¨®: ?Buro Bajar rusi? Juera los rusos?. Inmediatamente fue detenido y trasladado a un veh¨ªculo de la polic¨ªa.
incluso en Kabul nadie cre¨¦ que los rusos se hayan marchado. Como es costumbre, helic¨®pteros de combate sobrevuelan la ciudad. Soldados afganos con fusiles Kalashnikov patrullan las calles. Veh¨ªculos con altavoces recorren la capital instando a los comerciantes a abrir sus tiendas, tras el tercer d¨ªa de huelga, amenaz¨¢ndoles con procesos judiciales e incluso con la ejecuci¨®n.
Los afganos forman peque?os grupos en algunos rincones de la capital y hablan en voz baja. Mohamed Ismail comenta que lo ¨²nico que pretende la retirada es confundir a los afganos. ?Si los rusos quieren retirarse verdaderamente?, dice, ??por qu¨¦ los helic¨®pteros hacen fuego a la menor provocaci¨®n??. Otro afgano afirma que escuch¨® la radio, y comenta que se retiran s¨®lo ?un n¨²mero superficial? de tropas.
Victoria isl¨¢mica
A pesar de las reticencias de los afganos interrogados sobre esta retirada, el criterio es un¨¢nime cuando se dice que se trata de ?una victoria de los rebeldes?. Para Abdul, empleado de banca, la retirada sovi¨¦tica explica, una vez m¨¢s, la repugnancia afgana por estar sometida a un dominio extranjero.
En realidad, todos los afganos se sienten felices con esta retirada. Casi todos. Entre los ?oficiales? afganos del Ej¨¦rcito existe el temor de que la protecci¨®n ser¨¢ menos eficaz e implicar¨¢ una ?psicosis de miedo? entre las tropas a¨²n leales al r¨¦gimen prosovi¨¦tico.
Por su parte, el ministro iran¨ª de Asuntos Exteriores, Sadeh Gotbzadeh, declar¨® en Teher¨¢n que la retirada sovi¨¦tica de Afganist¨¢n ten¨ªa como principal objetivo buscar la divisi¨®n ?en la cumbre occidental de Venecia y en la reuni¨®n isl¨¢mica de Mont Pelerin, en Ginebra?, a la que asistieron representantes de la resistencia afgana.
Gotbzadeh asegur¨® que estaba sorprendido por el hecho de que la URSS hubiese enviado la notificaci¨®n de la retirada a Occidente, ?y no a Ir¨¢n y Pakist¨¢n, pa¨ªses directamente vinculados con el problema afgano?.
Cr¨ªticas de la URSS a,EE UU
Finalmente, la prensa sovi¨¦tica critic¨® violentamente ayer a Estados Unidos por su reacci¨®n ante la retirada sovi¨¦tica de Afganist¨¢n. La agencia Tass denunci¨® las declaraciones del secretario de Estado, Edmund Muskie, y del consejero presidencial, Zbigniew Brzezinski, de que la salida del ?contingente sovi¨¦tico ?era una maniobra propagand¨ªstica?. La agencia afirma que tales declaraciones son ?falsedades y versiones absurdas?, con el prop¨®sito de ?avivar la tensi¨®n militar en Asia y ampliar la agresi¨®n contra Afganist¨¢n?.
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