La izquierda explic¨® su pol¨ªtica sobre la "tercera edad"

S¨®crates G¨®mez, presidente de la comisi¨®n de personal y Alberto Villate, de la asistencia social, expusieron detalladamente la filosof¨ªa y los principios de la diputaci¨®n provincial respecto a las pol¨ªticas sectoriales de personal y de asistencia a la tercera edad, respectivamente, en un pleno extraordinario anterior al de la moci¨®n de dimisi¨®n ucedista.Ambas exposiciones cogieron a contrapi¨¦ al grupo de diputados de UCD, que no supieron contestar a los argumentos presentados y se limitaron a hacer consideraciones sobre cuestiones colaterales, que en m¨¢s de una ocasi¨®n, provocaron las risas de la izquierda y parte del p¨²blico asistente.

En el fondo del debate subyac¨ªan las acusaciones que desde hace meses socialistas y comunistas lanzan contra sus oponentes: UCD no ha presentado nunca ninguna alternativa coherente ni documentada a las l¨ªneas de actuaci¨®n de la mayor¨ªa, y se ha limitado a la pr¨¢ctica de una obstrucci¨®n machacona y aburrida sobre peque?os asuntos, que a menudo no superan la categor¨ªa de an¨¦cdotas. En concreto, el se?or S¨®crates G¨®mez se quej¨® de que no ha recibido propuesta alguna por escrito durante los catorce meses de funcionamiento de la comisi¨®n que preside.

Alberto Villate, a su, vez, critic¨® d¨²ramente la anterior pol¨ªtica grandilocuente, franquista, de las anteriores corporaciones, y expuso el criterio de que las ciudades de ancianos actuales son inhumanas, desde el momento en que burocratizan y limitan el horizonte vital de los ancianos a sujetos pasivos, desarraigados de su entorno familiar y alejados de su barrio o pueblo. Calific¨® a las ciudades de ancianos de centros de atenci¨®n a enchufados y protegidos del anterior r¨¦gimen, hasta el punto de que en las fichas de admisi¨®n figuraba una l¨ªnea en la que se especificaba ?Patrocinado por ... ?, I¨ªnea rellena en muchas ocasiones con importantes nombres del franquismo. Anunci¨® un cambio de actuaci¨®n gradual, puesto que no es factible, ni la izquierda quiere -remach¨®-, cerrar los centros y dejar sin asilo a los ancianos acogidos. Ante est¨¢ exposici¨®n, que dur¨® m¨¢s de media hora, los se?ores Enrique Castellanos y Enrique S¨¢nchez s¨®lo supieron contestar que hab¨ªan recibido cartas an¨®nimas de algunos ancianos, en las que se quejaban de los cambios introducidos.