Misterio en torno al avi¨®n libio que se estrell¨® en Italia

Sigue en pie la pol¨¦mica sobre el misterioso avi¨®n militar que cay¨®, el viernes por la tarde, en las monta?as de Sila, en Calabria. Al parecer el caza fantasma, del cual se han recuperado hasta ahora el cuerpo medio carbonizado del piloto y trozos del armaz¨®n, era un Mig 23 libio. Seg¨²n las primeras notas oficiales, ya que al lugar de la desgracia no ha podido a¨²n acercarse ning¨²n periodista, no se trataba de un jet esp¨ªa ya que no se han encontrado aparatos fotogr¨¢ficos ni armas, y el avi¨®n no pose¨ªa carburante suficiente, para salir de Italia. Podr¨ªa tratarse de un libio que deseaba huir e ir a Italia. Sin embargo, hay quien piensa que el piloto podr¨ªa ser un sovi¨¦tico, ya que, si es verdad que la mayor parte de los Mig 23 sovi¨¦ticos han sido dados a Libia, con mucha frecuencia estos aviones son pilotados por sovi¨¦ticos.El cazabombardero libio se estrell¨® en la regi¨®n de Calabria, zona donde existen varios objetivos militares de la Organizaci¨®n del Tratado del Atl¨¢ntico Norte (OTA,N). El Mig 23 dispon¨ªa en su morro de un equipo avanzado de contramedidas electr¨®nicas capaz de ?despistar? al radar del enemigo, hecho que explica que no fuera captado por ninguna de las estaciones de radar existentes en Italia.

Se recuerda que no hace mucho tiempo, los pilotos de las compa?¨ªas italianas hab¨ªan protestado porque "encontraban con demasiada frecuencia en el cielo del estrecho de Mesina aviones sovi¨¦ticos que creaban situaciones peligrosas en la fase de despegue y de aterrizaje".

Parece ser que se han encontrado papeles escritos en ¨¢rabe, que el piloto era de color y ten¨ªa unos treinta a?os. Pero queda en pie la pregunta: ?c¨®mo es posible que tantos aviones extranjeros puedan escapar al radar italiano? Y, sobre todo, nadie quiere olvidar en esta ocasi¨®n que, precisamente, en Ustica, hace unas semanas, tuvo lugar la desgracia del DC 9 de Italia con ochenta muertos, precisamete en un lugar donde se cruzan un pasillo a¨¦reo civil y otro militar.

Mientras las autoridades callan, se vuelve a hablar de posibles choques a¨¦reos entre aviones civiles y militares en el sur de Italia.