Marcelo Fraga y su caballo "Tahit¨ª" descansan despu¨¦s de atravesar Espa?a
Diplom¨¢tico de carrera con categor¨ªa de ministro plenipotenciario, actualmente ocupa el cargo de subdirector de la Escuela Diplom¨¢tica. Su pasi¨®n son los caballos.Su ¨²ltimo viaje a lomos de Tahit¨ª, desde Madrid hasta Tarifa, le conviti¨® en noticia; pero, como dec¨ªa Tahit¨ª: ?En el peri¨®dico os empe?¨¢is en mencionar que Marcelo es hermano menor de un l¨ªder pol¨ªtico?.
?Yo, como diplorn¨¢tico?, dice el se?or Fraga, don Marcelo, ?creo que no debo estar en ning¨²n partido pol¨ªtico. Por ser hermano de Manolo se supone que soy de AP, y yo digo que no, que aunque votara ese partido, con lo cual no estoy diciendo que lo vote, que no s¨¦ si lo voto, no podr¨ªa pertenecer a ¨¦l. La gente habla de ti y dice: "Ese es de Alianza Popular", e incluso hay gente que a?ade eso de que uno es "otro carca" y tal, y yo de carca nada. Tengo amigos socialistas, comunistas, tengo amigos por todos lados, tambi¨¦n en Alianza Popular. Una cosa es la pol¨ªtica y otra las personas. Si todos pensaran as¨ª, otro gallo nos cantar¨ªa?.
?Esto es lo que el caballo quer¨ªa decir?, a?ade Marcelo Fraga. Por lo dem¨¢s, Fraga Iribarne, locuaz, arrollador, como deben ser todos los Fraga, cuenta con apasionamiento sus largos periplos a caballo. ?No hago p¨²blicas mis experiencias por af¨¢n de publicidad personal, sino por animar a otros a hacer lo mismo, ya que considero que viajar a caballo es una de las actividades m¨¢s relajantes y maravillosas que puede experimentar el hombre de la ciudad. Yo siempre que tengo ocasi¨®n me organizo un viajecito a caballo. Este ¨²ltimo es el cuarto que hago. El primero lo hice en 1971, de Madrid a Santiago de Compostela, con motivo del A?o Santo. Muchos europeos realizan este viaje por el camino de Santiago. En 1973 hice otro viaje a Santander; en esta ocasi¨®n fue la ¨²nica vez que no fui en solitario. Con el caballo espa?ol se puede ir de aqu¨ª a China, si hay quien tenga tiempo para hacerlo. Yo no tengo tiempo para ir a China, si no, ir¨ªa?.
Fraga realiza sus viajes en jornadas de sesenta kil¨®metros, dando al caballo un d¨ªa de descanso cada cuatro o cinco etapas. En el viaje a Tarifa recorri¨® cerca de mil kil¨®metros en unos quince d¨ªas, descansos aparte. Las principales dificultades con las que se enfrenta son encontrar herradores y cuadras. ?En todo el viaje s¨®lo tuve necesidad de herrar a Tahit¨ª de las cuatro patas cerca de Sevilla?, comenta Fraga, ?pero anteriormente se le hab¨ªa ca¨ªdo una herradura a mi caballo. Desmont¨¦ y fui andan do unos cinco kil¨®metros hasta el pueblo m¨¢s cercano. All¨ª encontr¨¦ un herrador, que no ten¨ªa ni clavos ni herraduras. Es un oficio que. va desapareciendo. El problema se solucion¨® porque en estos viajes yo siempre llevo herraduras y clavos de respuesto?.
Seg¨²n Marcelo, ?la vuelta fue fabulosa. La hicimos Tahit¨ª y yo en un coche-cama; bueno, un furg¨®n de paja de Renfe. Ten¨ªamos compartimentos separados por un tabique de fardos de paja. El bebedero de zinc de Tahit¨ª, a m¨ª me serv¨ªa de lavadero. En fin, que ¨ªbarnos comod¨ªsimos con nuestras camas de paja. El mercanc¨ªas paraba bastante, y hasta tuve la ocasi¨®n de ba?arme en una piscina durante una parada de dos horas. Sin embargo, el viaje no result¨® todo lo prometedor que yo esperaba. En Renfe me hab¨ªan dicho que tardar¨ªa cuatro o cinco d¨ªas en llegar a Madrid, pero, contra todo pron¨®stico, teniendo en cuenta las costumbres de nuestro ferrocarril, llegamos en d¨ªa y medio ?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.