Un nuevo terrorista "arrepentido" desmiente las acusaciones contra Cossiga
Al debate que se abri¨® ayer en el Parlamento italiano por las imputaciones al presidente del Gobierno, Francesco Cossiga, de haber favorecido la fuga del hijo del dirigente democristiano Donat-Cattin, acusado de terrorista, no le ha faltado el golpe de escena ?a la italiana?. Ante el terrorista arrepentido S¨¢ndalo, que hab¨ªa acusado a Cossiga, se ha presentado otro terrorista igualmente ?arrepentido?, pero que desmiente la versi¨®n de su compa?ero de c¨¢rcel.
Paolo Salvi, estudiante de arquitectura perteneciente al grupo Primera L¨ªnea, revel¨® a los jueces que fue ¨¦l mismo quien advirti¨® ¨¢ Donat-Cattin de que se encontraba en peligro y, por consiguiente, deb¨ªa huir.Esas declaraciones restan una gran responsabilidad a Cossiga.
Los sumarios enviados al Parlamento por la Magistratura de Tur¨ªn han sido un regalo para los democristianos, los cuales, naturalmente, aceptan desde ayer que el terrorista ?bueno? es el que salva a Cossiga, y el ?malo?, el que lo acusa.
Los comunistas, que fueron quienes recogieron firmas para que el asunto Cossiga llegara al Parlamento, han declarado inmediatamente que las nuevas ?revelaciones? demuestran a¨²n con mayor claridad que todo el caso necesita ser reconsiderado y que por eso van a pedir una investigaci¨®n suplementaria. antes de poder absolver al presidente del Gobierno definitivamente.
Mientras tanto, la comisi¨®n investigadora del ?caso Moro? ha denunciado ante la Magistratura al diario Corriere della Sera y al semanario L'Espresso, por la fuga de noticias de una de las sesiones secretas de la comisi¨®n.
El ex ministro italiano de Defensa Mario Tanassi y el ex jefe de Estado Mayor de la aeron¨¢utica Duilio Fanali fueron condenados por los tribunales a devolver al Estado casi 1.300 millones de liras (unos 110 millones de pesetas) de la cantidad que recibieron como soborno de la casa fabricante de aviones Lockheed. La sentencia fue hecha p¨²blica en la noche del martes por el Tribunal Supremo de Justicia, pero todav¨ªa no es oficial.
Los implicados podr¨¢n recurrir al Tribunal de Cuentas, con lo que la sentencia de ayer quedar¨ªa en suspenso.
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