La URSS silencia los aspectos m¨¢s importantes de los acuerdos entre los trabajadores y el Gobierno polaco

La agencia Tass public¨® ayer por la tarde una primera referencia, tard¨ªa, al arreglo logrado el domingo entre los huelguistas de la costa b¨¢ltica polaca y las autoridades, pero soslayando toda menci¨®n de los acuerdos sobre sindicatos independientes o derecho de huelga. En cambio, esta ma?ana, el ¨®rgano oficial del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, Pravda, sin referirse a¨²n al arreglo, arremet¨ªa, en el comentario m¨¢s duro sobre la situaci¨®n en Polonia -le¨ªdo adem¨¢s el domingo por la noche en el principal programa informativo de la televisi¨®n-, contra los ?elementos antisocialistas en Polonia que tratan de coordinar sus acciones con la emigraci¨®n reaccionaria polaca y centros de subversi¨®n que funcionan en Occidente?.

El art¨ªculo de Pravda -inquietante por las obvias reminiscencias que suscita de acusaciones similares antes de la intervenci¨®n en Checoslovaquia en 1968- parece para no pocos analistas seguir m¨¢s bien la inercia de cr¨ªticas parecidas difundidas en la misma forma -lectura previa en televisi¨®n y publicaci¨®n a la ma?ana- los pasados mi¨¦rcoles y jueves, que constituir una clara reacci¨®n a la firma del arreglo que ha puesto fin a la huelga.Pero, de todas formas, revela una creciente preocupaci¨®n en los altos niveles de la pol¨ªtica sovi¨¦tica por el desarrollo de los acontecimientos en Polonia -?cada d¨ªa que pasa hace m¨¢s evidente que las actividades instigadoras del exterior pretenden perjudicar los logros socialistas y empujar a Polonia fuera de la v¨ªa ... ?- y para muchos significar¨ªa un claro aviso a los dirigentes polacos de que est¨¢n en el l¨ªmite de lo que se considera tolerable, a pesar del reconocimiento formal en los acuerdos del papel dirigente del Partido Obrero Unificado (comunista) polaco.

La informaci¨®n sobre el arreglo, aparte del mencionado silencio sobre los puntos claves pol¨¦micos de los acuerdos, vuelve a la pol¨ªtica de abstenerse de comentarios propios y citar fuentes polacas, entre las que interesa otra referencia, tomada del ¨®rgano central polaco Trybuna Ludu, a la necesidad de ?garantizar que aquellas fuerzas que no est¨¢n interesadas en una Polonia socialista y que traen consigo la ruina y la anarqu¨ªa, y todos aquellos que propugnan la consigna "cuanto peor, mejor", no interfieran en los acontecimientos ?.

No obstante, analistas y observadores diplom¨¢ticos experimentados se inclinan a opinar que se est¨¢ llevando a cabo en las altas esferas un estudio a fondo de la situaci¨®n y que no parece haberse llegado a una clara toma de postura, probablemente a la espera del alcance en la pr¨¢ctica del arreglo firmado.

C¨ªrculos diplom¨¢ticos occidentales solventes dan de lado la idea de que el art¨ªculo de Pravda pueda interpretarse como intimaci¨®n de una intervenci¨®n en Polonia por parte de la URSS, que actualmente se desecha, en lo que coinciden con observadores y figuras pol¨ªticas tan solventes en la propia Polonia como Mieczyslaw Rakowski, que consideraba el domingo en una entrevista ?est¨²pido? hablar de una posible intervenci¨®n, y afirmaba: ?La URSS s¨®lo ha venido observando la situaci¨®n aqu¨ª, en la misma forma que Schmidt o Giscard d'Estaing?.