Se crear¨¢n almacenamientos de vino para evitar especulaci¨®n en los precios

?La firma del convenio-puente de Daimiel del pasado jueves d¨ªa 4 y la pr¨®xima constituci¨®n de la Sociedad An¨®nima Regulaci¨®n y Servicios Vin¨ªcolas (Resevisa) supondr¨¢n un cambio radical en la regulaci¨®n del mercado vitivin¨ªcola e introducir¨¢n un sistema de corresponsabilidades entre el Estado y el sector privado que permitan reducir considerablemente las p¨¦rdidas de ayuda al sector, que le supusieron al Estado durante la campa?a pasada 10.489 millones de pesetas?, dijo ayer el presidente del FORPPA, Luis Garc¨ªa, en una rueda de Prensa convocada para explicar los problemas estructurales del sector.?Se trata en definitiva?, dijo, ?de crear unos almacenamientos de vino que impidan estas p¨¦rdidas; ser¨ªa absurda la transformaci¨®n de vino en alcohol en un a?o de excedentes (con costes de casi nueve pesetas por litro) si al a?o siguiente, en una mala cosecha, se tuviera que recurrir a las importaciones, prim¨¢ndolas incluso. Es necesario evitar estas oscilaciones en el mercado, que dan lugar a la especulaci¨®n?.

En este sentido, la constituci¨®n de Resevisa presenta la novedad de que en ella est¨¢n representados todos los sectores. La sociedad, que cuenta ya con un borrador de estatutos, quedar¨¢ constituida, en poco m¨¢s de un mes, con un capital social de cien millones de pesetas. La participaci¨®n ser¨¢ de un 10% para el Estado, 45% para las cooperativas (unas 850 en toda Espa?a, que suponen casi el 60% de la producci¨®n) y el 45% restante para los grupos exportador y envasador. En tanto queda definitivamente constituida Resevisa, el FORPPA y la Unaco (Uni¨®n Nacional de Cooperativas del Campo) firmaron en Daimiel un acuerdo-puente de colaboraci¨®n que permitir¨¢ ir acometiendo algunos de los principales problemas estructurales de cara a esta campana.

?La nueva sociedad?, dijo Luis Garc¨ªa, ?comprar¨¢ cualquier vino que le ofrezca el vitivinicultor, pertenezca o no a la entidad, est¨¦ integrado o no en cooperativas, siempre que este vino cumpla las condiciones del decreto de regulaci¨®n de campa?a. Se pagar¨¢ al precio de garant¨ªa?. El responsable ¨²nico de la conservaci¨®n de este vino es la entidad colaboradora, que estar¨¢ obligada a sacar vinos al mercado si sus precios llegaran a alcanzar los de protecci¨®n al consumo. La misi¨®n exclusiva del FORPPA es la de financiar la compra.

La existencia de almacenamientos permitir¨¢ actuaciones en la exportaci¨®n, como sucede en la CEE, donde ya existen sociedades an¨¢logas. Asegur¨® el se?or Garc¨ªa que este convenio de colaboraci¨®n entre el Estado y el sector privado se incorpora a las medidas actuales: ?Los decretos reguladores actuales no son malos, pero s¨ª insuficientes?.

Y en su opini¨®n, este sistema puede servir como experiencia-piloto que pudiera extenderse a todos aquellos productos que se encuentran sometidos a regulaci¨®n de campa?a,y destac¨® como los m¨¢s viables (por sus altos costes financieros para el Estado) los hortofrut¨ªcolas, aceite de oliva (del que hay almacenadas m¨¢s de 200.000 toneladas) y cereales.

Finalmente, Garc¨ªa hizo un r¨¢pido balance de cifras del sector. La demanda del mercado para la campa?a 1979-1980 asciende a 34 millones de hectolitros (veintiuno de consumo interior, 6,5 a vino para destilaci¨®n, otros seis a exportaci¨®n, 0,2 a vinagre y otros 0,2 millones que se pierden). De este modo, si las previsiones de producci¨®n de 35 millones de hectolitros llegaran a cumplirse, quedar¨ªan atendidas todas las necesidades de la demanda. Preguntado por las existencias actuales de vino, precis¨® que no se dispone de la cifra, porque no se conoce el volumen de existencia en poder de almacenistas y detallistas, que son, en definitiva, los verdaderos reguladores de los precios de rnercado.