Nuevas bajas
Contin¨²an las bolsas sumidas en un profundo impasse, del que ayer ni se libraba el joven mercado valenciano, y ello a pesar de que los mecanismos propios y tradicionales de las bolsas, es decir, arbitrajes y especulaci¨®n, a¨²n no se han asentado en el reci¨¦n ascendido Bols¨ªn.Las ¨®rdenes compradoras se han convertido en unos objetos raros, casi de coleccionista, y el afortunado operador que las detenta las cuida con amor maternal y consciente de la privilegiada situaci¨®n que le proporcionan, acude a los corros intentando evitar siempre el que su presencia provoque subidas ficticias, al replegarse, aun que no sea m¨¢s que estrat¨¦gicamente, el papel.
As¨ª, entre gui?os, arranques de genio y alguna que otra actuaci¨®n m¨¢s o menos anecd¨®tica, transcurren las sesiones mientras el deterioro de los cambios resulta cada vez m¨¢s evidente.
La competencia ?salvaje? que plantean al mercado de acciones algunas de las nuevas emisiones de renta fija y la inminencia de las ampliaciones de capital son aceptadas casi un¨¢nimemente como las causas ce este desaguisado.
Ayer, en Madrid, no ocurri¨® nada nuevo. Papel creciente para los bancos, que acentuaron sus bajas: flojedad manifiesta en los valores el¨¦ctricos, y algunas actuaciones positivas aisladas, como la de Duro-Felguera, que, ante esos 2.000 millones de pesetas de ingreso que le supondr¨¢ la venta de su participaci¨®n en Langreo, se vio solicitada marcando dinero sin operaciones a 66%.
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