La huelga de Correos paraliz¨® el reparto de correspondencia en toda Espa?a

El reparto de cartas y telegramas qued¨® interrumpido ayer en casi todas las provincias espa?olas, como consecuencia del paro de veinticuatro horas mantenido por los trabajadores de Correos y Tel¨¦grafos en se?al de protesta por la imposibilidad de negociar la retribuciones de los funcionarios. Las informaciones sobre la incidencia de la huelga son contradictorias, dependiendo de las fuentes; los sindicatos aseguran que pararon m¨¢s del 90% de los trabajadores, mientras la Direcci¨®n General de Correos estima que las acciones no tuvieron eco en el 50% de las provincias.

Representantes de UGT informaron ayer, en conferencia de Prensa, que unos 50.000 empleados en los distintos servicios de Correos y Tel¨¦grafos no trabajaron ayer (la plantilla total es de 54.000 personas). Tan s¨®lo se efectu¨® reparto de los telegramas urgentes y algunos servicios de Prensa. Las ventanillas permanecieron abiertas en la mayor¨ªa de las oficinas, atendidas por los trabajadores contratados -que fueron obligados a trabajar por la direcci¨®n- y algunos responsables directivos de las mismas. Las provincias que no secundaron la convocatoria fueron, seg¨²n fuentes sindicales, Badajoz, C¨¢ceres, Ciudad Real y Soria.Confirmando todas las informaciones facilitadas por UGT varias centrales sindicales con representaci¨®n sindical en Correos, as¨ª como trabajadores no afiliados, denunciaron ayer tarde el af¨¢n de protagonismo de la central socialista, al querer atribuirse la convocatoria del paro. Recuerdan en este sentido que dicho llamamiento fue realizado el 1 de noviembre pasado por la junta central de delegados (comit¨¦ de empresa)-, que hab¨ªa sido decidida por las asambleas de trabajadores Y que contaba con el apoyo de todas las centrales, como lo demuestra la masiva respuesta a las acciones. Como remache a estas precisiones, aseguran las mismas fuentes que la mayor¨ªa de los trabajadores no est¨¢n afiliados y que UGT -contra la que no act¨²an y a quien acompa?an en este conflicto- no ha mantenido apenas protagonismo sindical en el proceso asambleario que precedi¨® a la convocatoria de paro.

Frente a las informaciones facilitadas por los representantes sindicales, el director general de Correos y Tel¨¦grafos, Miguel Angel Eced, asegur¨® ayer tarde que huelga ha representado m¨ªnimas consecuencias para el usuario, puesto que ¨²nicamente par¨® el personal de las unidades de clasificaci¨®n y reparto del 50% de las provincias.

Seg¨²n el se?or Eced, la normalidad fue absoluta en el tr¨¢fico de buzones y ventanillas y que el material que entr¨® por ellas ser¨ªa clasificado hoy mismo. Sin embargo, el turno de tarde de las oficinas centrales de Madrid celebr¨® una asamblea para decidir, sobre este aspecto; los trabajadores acordaron posponer cualquier decisi¨®n hasta conocer si la direcci¨®n general les descuenta los salarios correspondientes a la jornada, seg¨²n anunci¨® el se?or Eced. Por orden suya, los inspectores y jefes de servicio tomaron nota de todas aquellas personas que secundaban el paro para proceder al descuento de la jornada en sus haberes. Los empleados estiman que s¨®lo se puede descontar un d¨ªa de salario cuando la productividad no puede recuperarse.

Tanto esta como otras medidas han sido consideradas como coactivas por los sindicatos. Especialmente, la prohibici¨®n taxativa de secundar la convocatoria que recibieron los contratados. El se?or Eced considera al respecto que no se trata de amenazas, puesto que la huelga tiene su origen en reivindicaciones de los funcionarios, pero no suyas.

En opini¨®n del responsable administrativo, toda esta confusi¨®n entre trabajadores v usuarios, a quien m¨¢s perjudica es al propio servicio: ? Luego no podemos pedir credibilidad. Adem¨¢s?, dijo, ?me da la impresi¨®n de que se sigue utilizando al cuerpo de reclasificaci¨®n y reparto, que son los ¨²nicos que han secundado el paro?.

Tambi¨¦n los trabajadores responden al director general a este respecto: ?Si Correos tiene mala imagen, es porque hay una mala gesti¨®n. Esta es la primera huelga desde hace dos a?os desde entonces?, asegura un representante sindical,

?no se han solucionado los problemas y, evidentemente, ¨¦sa no es s¨®lo nuestra culpa?.