El Gobierno ingl¨¦s inicia la privatizaci¨®n de las comunicaciones
El Gobierno brit¨¢nico ha presentado un proyecto de ley por el cual se dividir¨¢ el famoso Post Office en dos sociedades, una para los servicios de correos y otra para las telecomunicaciones, abriendo ambos campos a la inversi¨®n privada. En el sector de las telecomunicaciones, la lucrativa empresa estatal de comunicaciones internacionales, Cable and Wireless, podr¨¢ vender algunas de sus acciones a inversores privados.La otra gran empresa, British Telecom, conservar¨¢ por ahora su monopolio b¨¢sico de la red telef¨®nica, no vendiendo participaciones al sector privado. El ministro de industria, sir Keith Joseph, se?al¨® la necesidad de grandes inversiones de capital en el campode las telecomunicacicones y para ello alent¨® a British Telecom a que emprendiese proyectos conjuntos con las industrias privadas. El programa del ministro de Industria, a tres a?os vista, permitir¨¢ alas empresas privadas disporier de una mayor libertad en la producci¨®n e instalaci¨®n de equipos, compitiendo con la industria estatal. Esta pol¨ªtica se aplicar¨¢ especialmente para aquiellos servicios no proporcionados por British Telecom y podr¨ªa llevar a la introducci¨®n por el sector prlvado de comunicaciones por microoridas y sistemas de sat¨¦lites comerciales.
En cuanto al servicio de correos, la nueva ley permitir¨¢ al ministro, de Industria suspender el monopollo del Post Office, que en el futuro ser¨¢ s¨®lo responsable de los servicios postales y de giros bancarios. Esta suspensi¨®n se producir¨ªa en caso de huelga o de un descenso en la calidad de los servicios.
Los inversores privados podr¨¢n crear sus propios sistemas de distribuci¨®n para servicios urgentes u otros tipos de cartas. El nuevo proyecto de ley prev¨¦ que el Post Office se ver¨¢ obligado a aceptar responsabilidad. por todos los paquetes postales, y no solamente para el correo certificado. Los usuarios podr¨¢n, pues, demandar a la empresa nacional en caso de da?os.
El sindicato de ingenieros del Post Office recibi¨® con agrado la noticia de la separaci¨®n de las sociedad en dos partes, pero se opuso totalmente a la p¨¦rdida de los monopolios estatales.
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