El humorista Coluche quiere ser el "candidato de las minor¨ªas" a la Presidencia de Francia

La Francia de la campa?a preelectoral empieza a vivir al comp¨¢s del apellidado fen¨®meno Coluche. Michel Colucci, conocido por Coluche, 37 a?os de edad, es el m¨¢s c¨¦lebre c¨®mico franc¨¦s del momento y desde hace ya algunos a?os. Sus haza?as verbales a la hora de denunciar, de la manera m¨¢s virulenta, la degradaci¨®n de las libertades y de la situaci¨®n global francesa hacen re¨ªr y hacen mella.

Recientemente, la emisora Radio Tele-Luxemburgo tuvo que rescindir el contrato que hab¨ªa firmado con Coluche porque la pir¨¢mide del orden establecido no aguantaba sus licencias. En Par¨ªs y en provincias, los teatros en donde act¨²a Coluche revientan de gente y de risa. Y, de repente, el c¨®mico ha decidido presentar su candidatura a las elecciones presidenciales. Y uno de les m¨¢s ilustres fil¨®sofos galos, como Gilles Deleuze, al lado de varias docenas de personalidades, ha decidido unirse al presidente Coluche.Seg¨²n las tablas de la ley electorales francesas todo deb¨ªa desarrollarse de la siguiente manera: Giscard, Chirac, Mitterrand y Marchais, esto es, el giscardiano, el neogaullista, el socialista y el comunista, asociados todos ellos en la llamada banda de los cuatro, les aseguran a los franceses una elecci¨®n presidencial seria, que abordar¨ªa los problemas de fondo, y aburrida porque cada cual repetir¨¢ lo que ya se sabe o que no interesa. Y, al final, el d¨ªa 10 de mayo de 1981, Val¨¦ry Giscard d'Estaing ser¨ªa autorizado por sufragio universal a iniciar su segundo septenio.

Pero he aqu¨ª que Coluche, c¨®mico de la legua ilustrado por la picaresca de la civilizaci¨®n del ¨¢tomo, sale a la palestra y dice: ?Soy candidato a las presidenciales para cubrir de mierda a todo mundo y hasta el final ?. Y a?ade: ?Yo no quiero ser presidente, pero quiero que esos gach¨®s que hacen pol¨ªtica reflexionen y que sepan que la pol¨ªtica, tal como se practica, es una caca muerta?. Y m¨¢s a¨²n: ?Hay muchos tipos en este pa¨ªs que nunca son representados por los partidos pol¨ªticos, como los homosexuales, los taxistas, los agricultores, los peluqueros, etc¨¦tera. Es decir, yo soy el candidato de minor¨ªas que, sumadas, son la mayor¨ªa?. Y contin¨²a: ?Si Marchais se muere ma?ana cada cual comprender¨¢ que no ha servido m¨¢s que para hacer re¨ªr en la televisi¨®n. Yo, por lo que me concierne, suspend¨ª mi certificado de estudios, pero no intent¨¦ aprobarlo en tres ocasiones, como Mitterrand. Y por lo que se refiere a Giscard, claro que va a ganar las elecciones, pero Francia va a perderlas?. Pero Coluche a¨²n contin¨²a con su programa.

De izquierdas

?Claro que soy de izquierdas. No pido otra cosa, pero hace falta que la izquierda exista?. Y, por fin, anteayer, en su segunda actuaci¨®n presidencial ante la Prensa: ?Lo importante de mi candidatura es el burdel en el que yo convierto a este pa¨ªs ?.Ni m¨¢s, ni menos. El sesud¨ªsimo portavoz de la izquierda democr¨¢tica y moralista parisiense, el semanario Le Nouvel Observateur, la semana ¨²ltima discurr¨ªa sobre el caso a partir de su portada con la fotograf¨ªa del clown subrayada por la leyenda ?La Francia de Coluche?. Comunistas, socialistas, gaullistas y giscardianos no acaban de vituperar a este corruptor de la democracia. Ya se han creado m¨¢s de doscientos comit¨¦s de apoyo en todo el pa¨ªs. Toda Francia al tanto de ?lo que pasa?, entre cachonda e inquieta, espera el 1 de diciembre para saber lo que dar¨¢ de s¨ª el primer sondeo anunciado de la opini¨®n p¨²blica referente a las posibilidades de Coluche. ?Un mano a mano televisado Giscard-Coluche?: se rompi¨® el cartesianismo. Ya se anticipa entre un 7 % y un 10 % del electorado colouchista, que podr¨ªa volver maniaco-agresivo a m¨¢s de uno. Estos d¨ªas, dos de los personajes m¨¢s respetados de la grandeur intelectual de Francia, los fil¨®sofos Guilles Deletize y F¨¦lix Guattari, autores recientes de Mille plateaux (an¨¢lisis del papel del poder de los media), exaltaron en un comunicado la candidatura de Coluche, unidos a varias docenas de magistrados, periodistas, abogados, artistas e intelectuales diversos, de derechas y de izquierdas. Todos ellos, en un comunicado, estiman que la candidatura de Coluche ?es capaz de abrir una brecha en el muro actual de la informaci¨®n pol¨ªtica y del centralismo ?.

Total, que tras la aventura americana a base de Reagan, que fue cowboy en el cine, los franceses tienen a un c¨®mico que dice caca en p¨²blico y hace pensar.